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Desaparecidos: Un vistazo a la extincion de la última década

Un estudio de las doce especies extintas en los últimos diez años.


Nadie puede decir con certeza cuántas especies se extinguieron entre el 2000 y el 2009. La razón, nadie sabe si el número de especies en el mundo es de tres millones o de treinta millones; es imposible adivinar cuántas especies conocidas, ni mucho menos desconocidas, pueden haber desaparecido recientemente. Especies de bosques tropicales y de los océanos del mundo se encuentran sin investigar, dejando enormes brechas donde las especies pueden desaparecer, llevándose con ellas todos sus secretos, incluso, el conocimiento de su existencia.



Igualmente, es difícil saber cuándo realmente una especie ha desaparecido. Algunas especies reaparecen después de haber pensado, por décadas, aún por siglos, que se habían extinguido. Las especies no son consideradas oficialmente extintas, hasta que transcurra un largo tiempo sin ser vistas, por ejemplo, cincuenta años. A pesar de las advertencias de muchos biólogos y ecologistas de que estamos en medio una extinción masiva, producida por los humanos, que puede ser más enorme que la de la desaparición de los dinosaurios; es importante reconocer cómo han desaparecido éstas, con solo recordar nuestro propio impacto y fracasos, para tener certeza de que se han extinguido.



Los científicos han revelado un número probable de extinciones, durante los últimos diez años (adicionales a las silvestres), aquí observamos doce de éstas.









Fotografía: El baiji. Fotografía de Wang Ding y cortesía del Instituto de Hidrobiología, (Academia China de Ciencia.)

El Río Yangtsé, un punto crítico de conservación.


La extincion más publicitada en las últimas décadas es la del baiji, también conocido como el Delfín del Río Yangtsé.



A pesar de que la evolución del delfín se remonta a veinte millones de años atrás, éste no pudo sobrevivir al gran auge de desarrollo de china. Una combinación de embalses, tráfico marino, contaminación, pesca excesiva, y electro pesca condujeron a la extinción de las especies, otorgándole al delfín el discutible título del primer mamífero marino que se ha extinguido desde los años cincuenta. El delfín fue un personaje en la mitología china y coloquialmente fue conocido como, “La Diosa del Yangtsé”, sin embargo, nada de esto pudo salvarlo del fenómeno económico.



No se trata solamente del baiji, otro habitante del Yangtsé también puso haber desaparecido recientemente. Una nueva investigación sobre el pez espada chino, uno de los más grandes peces de agua dulce, fracasó al demostrarse que no existía ni un solo ejemplar. No obstante, los investigadores todavía creen que el pez probablemente existe; nadie sabe con certeza por cuánto tiempo podrán resistir en un hábitat tan altamente degradado. El pez espada chino ha sido diezmado por la misma razón que el delfín: embalses, tráfico y contaminación, siendo la causa más probable la sobreexplotación pesquera. Se confirmó que el último pez espada chino fue exterminado por la pesca ilegal en el 2007.



A no ser que China actúe rápidamente, otras especies del legendario Yangtsé no sobrevivirán en los próximos diez años, incluyendo la marsopa sin aletas, el esturión del Yangtsé y el caimán chino (a pesar de que, un gran número de caimanes sobrevive en cautiverio).



FOTOGRAFIA: El ‘Alala’. Por: US Fish and Wildlife Service.


Hawái en menor grado



Con un sistema similar al del Río Yangtzé, las islas hawaianas, famosas por sus formidables especies de aves, son un punto crítico de extinción.



En el 2002, el cuervo de Hawái, conocido como “Alala”, se extinguió en la selva cuando los dos ejemplares conocidos desaparecieron. El ave sufrió varias clases de amenazas, incluyendo la pérdida de hábitat, ratas, mangostas, enfermedades, al igual que la caza ilegal. El “Alalá” no fue el primero: Los fósiles mostraron que otras cuatro clases de cuervos se han extinguido en Hawái. A pesar de esto, el Alalá ha ocupado por largo tiempo un lugar especial en la cultura hawaiana; los nativos lo consideraban como un templo de Dios.



Por fortuna, para el Alalá aún no se ha escrito la última palabra, ya que cerca de 50 ejemplares sobreviven en cautiverio y la posibilidad de reintroducción está siendo debatida.



Otra desafortunada ave hawaiana: El pájaro Po’ouli, Black-faced Honeycreeper, se extinguió en 2004. Desconocida para la ciencia hasta los años noventa, la tímida ave era endémica solamente de la isla de Maui. Sin embargo, a comienzos de la década se supo que únicamente tres ejemplares sobrevivían. Uno murió en cautiverio en el 2004, los otros dos no se han visto desde entonces.



El Po’ouli. Photo by: US Fish and Wildlife service.

Si bien, los otros dos ejemplares, podrían haber sobrevivido, nadie lo sabe con seguridad y es improbable encontrar una sana población reproductora. Talvez la reintroducción del Alala es un imposible.



Las aves son sólo las representantes más reciente de una larga decadencia de las especies nativas de Hawái. La mitad de las 140 especies de aves endémicas, históricamente registradas, han desaparecido para siempre.



No más mamíferos grandes



Además del delfín, en la década se vió la extinción de otros dos grandes mamíferos.



Ilustración de la cabra de Los Pirineos. Imagen de Cabrera, (1914)

A comienzos de la década, en enero 6 de 2000, en un final poco digno, la última cabra de Los Pirineos murió golpeada por un árbol. Una subespecie de la cabra montés iberiana, la cabra de los Pirineos, una vez deambuló a lo largo de los Pirineos de Francia y España, pero pasó la mayor parte a del Siglo XX al borde de su extinción. Nueve años después de su pérdida, la especie reapareció por corto tiempo: nació un clon del ejemplar, el primero de un animal extinto, pero murió de una insuficiencia pulmonar después de unos minutos.



El rinoceronte negro de occidente también llegó a su fin durante esta década. Este espécimen perteneció a los miles de animales históricos que existieron, de los cuales solamente quedan diez en Camerún; fue implacablemente cazado por su cuerno. En el año 2006, una investigación demostró que ya no sobrevive ninguno.



El rinoceronte es uno de los mamíferos más amenazados del mundo. De las cinco especies que perduran, tres están en serio peligro, una está en peligro de desaparición y únicamente el rinoceronte blanco parece estar a salvo ante la extinción.



Detrás de la desaparición mundial de los rinocerontes está la caza furtiva; al final de esta década se ha observado un incremento. A no ser que se tomen acciones rápidas para frenar el contrabando de especies de la vida silvestre, es muy probable que en la próxima década veamos más extinciones del mamífero.



Batalla final para los anfibios: Las anteriores décadas han sido particularmente peligrosas para los anfibios. Fueron devastados por el todavía misterioso hongo Chytrid, golpeados por el cambio climático, la pérdida de hábitat y la contaminación; la particular y sensible familia de los anfibios se encuentra en medio de una crítica extinción.



El sapo irrigador, apareándose en cautiverio. Fotografía de: Rhett A. Butler.

El sapo irrigador de Kihansi desapareció de su hábitat a mediados de la década. El sapo sobrevivió en solamente dos hectáreas de tierra, junto a una cascada y a un desfiladero en Tanzania, pero cuando el World Bank construyó una represa en el área, se cambió el flujo del agua y el sapo no pudo salir a flote en el modificado ecosistema. Las investigaciones encontraron cada vez menos sapos, hasta no encontrar ninguno.



Al igual que muchos anfibios que desaparecieron de la selva, una población de sapos rociadores de Kihansi, sobrevive todavía en cautiverio en los Estados Unidos. La reintroducción sería solamente posible si se creara un nuevo hábitat nativo para ayudarlos.



La rana dorada panameña, es un bello espécimen dorado y negro, similar al desaparecido de la selva durante los últimos años de la década. En Panamá es un símbolo nacional; la rana fue devastada por el hongo Chytrid y la destrucción del entorno. Al igual que el sapo irrigador de Kihansi, la rana dorada panameña sobrevive en cautiverio, pero su futuro no es nada promisorio.


Estos no son más que unos pocos ejemplos: los investigadores estiman que probablemente más de 120 especies de anfibios se han extinguido desde 1980. Con los escenarios de cambio climático incrementándose en forma extrema, deforestación rampante, contaminación permanente y todavía sin ninguna cura para el hongo Chytrid, es improbable que la década del 2.010 sea mejor para los anfibios.



La rana dorada de Panamá con una ranita verde. Fotografía de: Rhett Butler.

Las desapariciones olvidadas: Mientras la extincion de mamíferos, pájaros y anfibios capta la atención de los medos de comunicación (en ese órden), los invertebrados y las plantas están desapareciendo con la misma frecuencia.



En algún momento, al final de los años noventa, y a comienzos de esta década, el último caracol de franjas sucumbió ante la deshidratación. Esta poco conocida, especie de caracol era endémica del atolón de Aldabra. En razón a que el caracol hiberna durante los períodos secos, , menos cascadas de agua caen sobre el atolón de Aldabra, debido al calentamiento global, augurando así su posible destino.



Otro invertebrado extinto por los cambios climáticos es la sanguijuela terrestre europea. Una investigación llevada a cabo entre el 2000 y el 2005 encontró únicamente una sanguijuela viva. Los investigadores creen que el aumento de tres grados Celsius, durante el verano, la ha matado, ya que específicamente está adaptada al frío.



Las especies susceptibles al clima, desde el oso polar hasta los pikas, ranas y los arrecifes de coral, están enfrentando una batalla creciente para sobrevivir en nuestro mundo cada vez más cálido. Las extinciones ocasionadas por los cambios climáticos, serán probablemente más comunes en la próxima década.



Ilustración del Olivo de Santa Helena. Dibujo de: John Charles Meliss (1875).

Los invertebrados no son las únicas especies pequeñas conocidas y con frecuencia pasadas por alto. La extinción de las plantas o el descubrimientos sobre este tema, raramente son noticia. En diciembre de 2003, el último olivo de Santa Helena se extinguió en cautiverio. Anteriormente, la especie había desaparecido del medio silvestre, en 1994.



El olivo de Santa Helena, planta endémica de la Isla de su mismo nombre, desapareció desde la deforestación y la introducción de especies extranjeras, tales como la cabra. Nadie conoce cuántas plantas han desaparecido entre el 2000 y el 2009, pero con las altas tasas de destrucción de bosques en muchas naciones, es probable que un gran número de plantas, muchas desconocidas para la ciencia, desapareciera en los últimos diez años.



El futuro, ¿puede ser la esperanza?: El último papagayo silvestre conocido de Spix, desapareció de Brasil en el 2000. El hermoso papagayo fue maltratado por la pérdida de hábitat y la captura para el comercio de mascotas. Es posible que algunos papagayos silvestres todavía existan, pero se requieren más investigaciones. Aún, si no quedaran los papagayos silvestres de Spix, la especie todavía tiene una oportunidad.



Una pequeña población de papagayos de Spix sobrevive en cautiverio, donde ha ocurrido un reciente y exitoso suceso de procreación, específicamente en Al Wabra Wildlife Preserve, que ha reproducido 21 aves desde el 2004. Al Wabra ha comprado un ecosistema de Spix en Brasil para una posible reintroducción.



De los doce especímenes mencionados, probablemente los papagayos de Spix tienen la mayor esperanza de supervivencia, durante los próximos 10 años .Para otras desafortunadas especies, esta década significó su última aparición.


Lista (probable) de especies extintas, 2000- 2009:





Dibujo del pez espada chino, que puede crecer más de siete metros. Dibujo de: Günther, Albert CLG.


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