Se conoce ampliamente que la población de peces desapareció drásticamente durante el siglo pasado, sin embargo, una investigación reciente publicada en Nature Communications, muestra que el descenso puede ser peor de lo esperado. Una investigación de la Universidad de York y la Sociedad de Conservación Marina, descubrió que en 1889, en el Reino Unido (cuando los barcos eran impulsados por velas) fue 17 veces más fácil pescar que hoy en día, que se utilizan barcos con motores de alta potencia y avances tecnológicos.
“Nos aterramos al descubrir que en 1889 capturábamos cuatro veces más peces en Inglaterra y Gales, que lo que pescamos actualmente,” Ruth Thurstan, quien dirigió el estudio desde el Departamento del Medio Ambiente, dijo: “Con todo y estas sofisticaciones tecnológicas y nuevas formas de energía, la actual flotilla de pesca tiene menos éxito que su equivalente, el barco de vela del Siglo XIX, debido a la severa disminución de la abundancia de peces.”
Basados en la información gubernamental, el estudio comparó la cantidad de peces capturada, contra el número y tamaño de los botes utilizados durante los anteriores 118 años (de 1889 al 2007). Al explorar específicamente el habitat de las principales especies de peces, tales como el bacalao, la merluza y la platija, el estudio encontró que la disponibilidad de estas especies había disminuído en un 94%, desde 1889.
Por ejemplo, un barco de vela, en el Siglo XIX, trajo en promedio el doble de la cantidad de peces de lo que actualmente se pesca con rápidos barcos pesqueros con 100 años de avances tecnológicos; lo cual revela que fue 17 veces más fácil capturar peces en 1889, que lo capturado en 2007.
En 1938, en el Reino Unido, se alcanzó la máxima producción pesquera (una combinación de los inventarios disponibles de peces y el aumento de métodos sofisticados de captura a nivel industrial)cuando los barcos capturaron 5.8 veces más que en la actualidad.
De acuerdo con los investigadores, el estudio muestra un panorama más amplio de disminución de peces en los alrededores del Reino Unido, de lo que actualmente reconocen los funcionarios.
“La valoración de los inventarios piscícolas europeos y las metas gerenciales basadas en éstos, solo retroceden entre 20 y 40 años. Estos resultados deberían proporcionar un correctivo importante para el cortoplacismo inherente en el manejo de las pesqueras actuales,” dijo el profesor Callum Roberts, del Departamento del Medio Ambiente de la Universidad de York, agregando que “esta investigación deja en claro que el estado de las principales pesqueras del Reino Unido, y por ende, las europeas (puesto que comparten territorios) es mucho peor que la más pesimista de las valoraciones actualmente publicadas”.