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Las iguanas azules “resurgen”

 Una iguana azul de corta edad esperando para su evaluación médica. Foto de Julie Larsen Maher/Wildlife Conservation Society.
Una iguana azul de corta edad esperando para su evaluación médica. Foto de Julie Larsen Maher/Wildlife Conservation Society.


En una época, la iguana azul (Cyclura lewisi) ) fue la reina de la isla caribeña de Gran Caimán. Con 11 kilos, más de 1,5 m y un promedio de vida de más de 60 años, nada podía con este majestuoso lagarto. Pero ocurrió lo impensable: coches, gatos y perros, junto con la destrucción de su hábitat natural destronaron al reptil soberano de la isla de Gran Caimán y, de poseer una gran población que rondaba por la isla a sus anchas, el lagarto ha pasado a estar prácticamente en la extinción. En 2002, los investigadores estimaron que, en el mejor de los casos, habría dos docenas viviendo en su hábitat natural. A pesar de la desalentadora cifra, los ecologistas no se rindieron y se pusieron en acción para salvar la especie. Con la ayuda de ONG locales e internacionales, la iniciativa, denominada Programa para la Recuperación de la Iguana Azul, logró algo excepcional en la historia de la conservación. En nueve años, la población de iguanas azules ha aumentado 20 veces su tamaño: en la actualidad 500 iguanas azules viven en estado salvaje en la reserva natural de isla Salina.



¿Cómo lo consiguieron?



Las iguanas azules son criadas en cautividad hasta que alcanzan la edad de dos años, momento en el que son lo suficientemente grandes para mantener alejados a los gatos salvajes, que estaban diezmando la población de iguanas jóvenes. Cuando alcanzan los dos años, se las suelta en la 250 hectáreas de la Reserva de Salina y se las mantiene en vigilancia.



“Durante los últimos años, hemos logrado devolver cientos de animales a sus hábitat naturales, todos los cuales pasan un examen veterinario antes de su puesta en libertad” explica el doctor Paul Calle, director del departamento de salud zoológica de la Wildlife Conservation Society (WCS) del Bronx Zoo, que ha ayudado a examinar a las iguanas que estaban listas para ser liberadas.



The program has been such a success that conservationists have started releasing blue iguanas in a new protected area, the Colliers Wilderness Reserve. This month the program has had confirmation of the first blue iguana breeding in the area.



The current goal is to reach 1,000 blue iguanas. Given the success to date that goal may be met quickly.



“Esperamos poder alcanzar el objetivo de llegar a mil iguanas en áreas naturales protegidas en unos cuantos años. Después, llevaremos un control sobre las iguanas para asegurarnos de que nazca el número suficiente de crías para mantener la población en estado salvaje. Si conseguimos resultados positivos, lo habremos logrado”, declaró Fred Burton, director del Programa para la Recuperación de la Iguana Azul, en una rueda de prensa.



Además de la ayuda de WCS, el programa ha recibido el apoyo del Durrell Wildlife Conservation Trust (Fondo Durrell para la Conservación de la Vida Silvestre) y de la International Reptile Conservation Foundation (Fundación Internacional para la Conservación de Los Reptiles).







Una iguana azul de edad adulta. Foto de Julie Larsen Maher/Wildlife Conservation Society.
Una iguana azul de edad adulta. Foto de Julie Larsen Maher/Wildlife Conservation Society.





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