Un estudio publicado en el mes de agosto por investigadores alemanes y el Centro de Investigación Forestal (CIFOR) sostiene que Bolivia debe priorizar el cumplimiento de las leyes de medioambiente y disminuir la expansión de la ganadería a gran escala, con el objetivo de reducir la deforestación en el Amazonas.
Robert Mueller de la Universidad de Goettingen y sus colegas, analizaron las tendencias en la sustitución del uso del suelo en Bolivia entre los años 1992 y 2004. Descubrieron que la agricultura industrial es el principal factor causante de la deforestación en Bolivia, que asciende al 54%. Le siguen la ganadería que representa el 27% y la agricultura a pequeña escala, el 19% del desmonte de tierras.
Sin embargo, la agricultura es un blanco difícil de atacar para los programas cuyo objetivo es la reducción de las emisiones provenientes de la deforestación y la degradación de los bosques (REDD+), ya que genera más de medio millón de fuentes de trabajo (150.000 por parte de la agricultura comercial y 400.000 de pequeños agricultores) y representa más del 12% de las exportaciones. En vez de eso, los científicos argumentan que disminuir la tala para la ganadería a pequeña escala seria el mejor uso para la conservación de los recursos. ̈[La ganadería] debe ser tomada como prioridad ya que su expansión amenaza los bosques en muchos lugares diferentes y se pueden lograr mejoras a costos relativamente bajos, ̈ publicaron los investigadores.
Mueller y sus colegas explican que una mejor aplicación de las leyes ya existentes sobre el uso del suelo, particularmente una norma de 1996 que establece tarifas para autorizar las deforestaciones, es uno de los posibles enfoques hacia la reducción de los desmontes para uso de la ganadería. Actualmente, la norma no se cumple (80% de las haciendas ganaderas entre 2002 y 2006 no estaban en regla) y las tarifas por deforestación, en caso de cobrarse, son sólo de U$S 15 por hectárea.
Cabe destacar que actualmente son sólo 11 las personas responsables de controlar las actividades forestales a lo largo y ancho de 6 millones de hectáreas del Departamento de Pando, una de las zonas de mayor deforestación. Los autores sugieren que el incremento del personal de la agencia encargada de hacer cumplir las normas de uso del suelo (la Autoridad de Fiscalización y Control Social de Bosques y Tierras o ABT) podría reportar beneficios inmediatos. Racionalizar el programa de adjudicación de títulos de propiedad de la tierra de Bolivia, también podría ayudar a reducir la deforestación mediante la instauración de derechos sobre la tierra.
En general, Mueller y sus colegas, concluyen que ̈hay mucho potencial para disminuir el desmonte en las tierras bajas de Bolivia sin causar grandes impactos negativos en el bienestar económico del país ̈.
̈Abordar el asunto de la ganadería ofrece las mejores oportunidades para restringir la deforestación de manera efectiva y eficiente. El cumplimiento de las leyes ya existentes podría prevenir las talas ilegales de grandes zonas a manos de relativamente unos pocos ganaderos ̈.
Las conclusiones indican un camino hacia una disminución de la deforestación de manera rentable en Bolivia inclusive si el gobierno opta o no en participar en un programa global de REDD+. En los debates internacionales sobre el clima, Bolivia se ha opuesto a cualquier programa que involucre las compensaciones o mercados de carbono. Estos mecanismos actualmente figuran entre los programas de REDD+ promovidos por la ONU.
CITATION: Robert Müller, Till Pistorius, Sophia Rohde, Gerhard Gerold, Pablo Pacheco. Policy options to reduce deforestation based on a systematic analysis of drivers and agents in lowland Bolivia. Land Use Policy 30 (2013) 895–907