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Un delfín de Nueva Zelanda, del que una de sus dos subespecies, el delfín de Maui, está en peligro crítico de extinción debido a una población en rápido descenso. Foto por: Steve Dawson/NABU Fundación Internacional por la Naturaleza.
Los delfines de Maui (Cephalorhynchus hectori maui) se están acercando poco a poco a la extinción. Su llamativa marca, una aleta dorsal redondeada y oscura, ha sido comparada con la oreja de Mickey Mouse y alcanzan un tamaño como máximo de 140 centímetros de longitud aproximadamente.
Un par de nuevos informes resaltan los problemas de estos delfines y datos actuales así lo demuestra: la población ha alcanzado un nuevo mínimo, con menos de 47 ejemplares vivos. Los informes fueron presentados al Comité Científico de la reunión anual de la Comisión Ballenera Internacional (CBI) en San Diego, que terminó a principios de esta semana.
Los delfines de Maui viven únicamente en la costa occidental de la Isla Norte de Nueva Zelanda, cuya denominación Maorí, Te Ika a Maui, dio lugar a su nombre. Esta y otra subespecie estrechamente relacionada llamada delfín de Héctor (ephalorhynchus hectori hectori), del que solo quedan tres pequeñas poblaciones alrededor de la Isla Sur del país, son conocidos como los delfines de Nueva Zelanda.
Los delfines de Maui han disminuido bruscamente desde 1970, principalmente como consecuencia de enredos accidentales en equipo de pesca que ahoga o mutila cientos de miles de cetáceos por todo el mundo cada año.
La población de delfines de Maui se sitúa hoy día entre 42 y 47 ejemplares, de los 59 que existían en 2010/2011, según un informe de Barbara Mass, jefe de Conservación Internacional de Especies en el grupo ecologista alemán NABU, Fundación Internacional por la Naturaleza. Actualmente, hay tan solo 10 ó 12 hembras adultas vivas.
Un informe previo estimó que el delfín de Maui podría soportar tan solo una muerte a manos del hombre cada 10 a 23 años. Sin embargo, cada año mueren cuatro delfines tras quedar atrapados en aparejos de pesca —54 veces el nivel sostenible. Con esta actual tasa de mortalidad, los delfines podrían extinguirse en 14 años, según el informe de Mass.
Delfín de Maui atrapado en una red de pesca. Más del 95 por ciento de las muertes de delfines de Maui se debe a utensilios de pesca. Foto por: Steve Dawson/NABU Fundación Internacional por la Naturaleza.
Los ecologistas llevan haciendo sonar la alarma por los delfines de Maui durante años. En 2012, un panel de científicos reunido por el gobierno de Nueva Zelanda estimó que la red de enmalle y el arrastre eran responsables de más del 95 por ciento de las muertes de los delfines de Maui. Actualmente, estos animales tan solo cuentan con un 5 por ciento de protección de su hábitat natural ante el arrastre y un 19 ante las redes de enmalle gracias a las pequeñas expansiones de área protegida en 2012 y 2013. Anteriormente contaban solo con un 16 por ciento.
En esos dos años, el Comité Científico del IWC realizó recomendaciones urgentes sobre medidas de conservación para proteger a los delfines. En 2014, su informe anual de la reunión destacó que incluso con las pequeñas expansiones de área protegida, “la situación actual de gestión de Nueva Zelanda no satisface los requerimientos para revertir el descenso de la población de delfines de Maui.” La declaración prosigue: “En lugar de seguir buscando evidencias científicas, es de altísima prioridad llevar a cabo acciones inmediatas para atajar el problema de la pesca incidental de delfines de Maui.” Además, se recomendó que la red de enmalle y el arrastre fueran prohibidos en todo el hábitat natural de los delfines.
La UICN, que lista al delfín como en peligro crítico de extinción, y la Sociedad de Mastozoología Marina emitieron recomendaciones similares, según el informe de Mass. La declaración critica al gobierno de Nueva Zelanda por iniciar el desarrollo de un plan de cinco años para la investigación de las especies en lugar de llevar a cabo tareas de conservación inmediatas. “Las cifras de delfines de Maui siguen descendiendo por culpa de que un mensaje fuerte y unánime de conservación con fundamentación científica no está viéndose plasmado en acciones reales de gestión,” describe Mass.
Otro informe presentado a la reunión del IWC desveló que las pequeñas expansiones del área protegida llevadas a cabo en 2012 y 2013 fueron básicamente ineficaces. Con estas áreas o sin ellas, el estudio calculó que existe un 95 por ciento de probabilidad de que la población del delfín de Maui disminuya por debajo de los 30 ejemplares para 2033 y un 50 por ciento de que lo haga por debajo de 10. En cambio, si el gobierno de Nueva Zelanda siguiera las recomendaciones del comité del IWC, la investigación estima que la suerte del delfín mejorará de forma considerable, hasta un 40 por ciento de probabilidad de crecimiento.
En los últimos años, han surgido nuevas amenazas para los delfines en forma de pruebas sísmicas y actividades relacionadas con la producción petrolífera y de gas por todo su hábitat natural. En las estimaciones ya mencionadas, ningún informe contabilizó estos factores.
Los ecologistas piden al gobierno de Nueva Zelanda que tome cartas en el asunto. “Hasta ahora, Nueva Zelanda ha eludido su responsabilidad de proteger los últimos delfines de Maui. Durante tres años, los científicos del IWC han instado al gobierno de Nueva Zelanda a prohibir el uso de redes de enmalle y arrastre por todo el hábitat. No obstante, Nueva Zelanda ha ignorado de manera obstinada a los científicos y está liquidando estas especies únicas por unas razones económicas con poca visión de futuro,” posteó NABU en un comunicado en su sitio web.
Fuentes:
- Maas, B. Estimated population size and decline of Maui’s dolphins. IWC SC/66a/SM/21 Rev 1. 2015.
- Slooten, E. Effectiveness of partial protection for Maui’s dolphin. IWC SC/66a/SM/12. 2015.