Los Pangolines en Peligro: se necesita el apoyo mundial para frenar el comercio global chino

  • Ocho especies de pangolín pueblan Asia y África, pero estas criaturas nocturnas son tan esquivas y reservadas que los científicos saben muy poco sobre ellas.
  • Los traficantes ilegales de la fauna silvestre están mermando las poblaciones de pangolín a una velocidad asombrosa, con los conservacionistas esforzándose por responder a la creciente demanda china.
  • Los conservacionistas están colaborando para rescatar al pangolín, pero se necesita un aumento dramático en la financiación para la investigación, la conservación y la aplicación de la ley si se quiere que está especie en peligro de extinción sobreviva.

En la tarde del 23 de abril, la Policía Nacional de Indonesia irrumpió en un almacén en Medan, la mayor ciudad portuaria de Sumatra.

Seis meses de investigaciones les llevaron allí, el resultado de una investigación encubierta llevada a cabo conjuntamente con la Unidad de Delitos contra la Fauna de la Sociedad para la Conservación de la Vida Silvestre. Los avisos de los informadores habían resultado positivos: los policías encontraron un inmenso cargamento de pangolines malayos (Manis javanica), un mamífero nocturno del Asia Meridional que está en peligro crítico de extinción.

Cinco toneladas de pangolines congelados y 170 libras (77,11 kilos) de escamas estaban ocultas detrás de una fachada de pescado congelado; también fueron confiscados 96 animales vivos. El alijo, con destino China, tenía un valor aproximado de 1,8 millones de dólares en el mercado negro. Los agentes arrestaron a Soemiarto Boediono, de 60 años, que se enfrenta a cinco años de prisión y una multa de 10.000 dólares por traficar con especies protegidas.

The pangolin almost appears to be a mythical beast, looking like a low-slung medieval- armored tank. But despite its wall of scales, which protects it from fierce predators such as lions, it is no match for illegal wildlife traffickers. Photo credit: Tikki Hywood Trust.
El pangolín casi parece una bestia mitológica, se parece a un tanque armado medieval bajo. Pero a pesar de su muro de escamas, que le protege de los predadores feroces como los leones, no es rival para los traficantes ilegales de fauna silvestre. Fotografía: Tikki Hywood Trust.

En dos días, los agentes de la fauna silvestre liberaron en secreto los 88 pangolines que sobrevivieron en una reserva anónima. Ocho habían muerto y, junto con los animales que estaban muertos y las escamas, fueron tirados a una fosa y quemados.

Agentes de aduanes de todo el planeta interceptan, regularmente, pangolines y escamas que se intentan pasar de contrabando. A menudo están escondidos entre otras mercancías, como con la redada de Medan y otro cargamento encontrado en el aeropuerto Surabaya de Indonesia en julio: 43 cartones de “pescado” que contenían 455 pangolines muertos. Algunos son transportados con declaraciones de aduanas falsificadas, como con la incautación de dos toneladas de escamas en Uganda que estaba registrado como “equipo de comunicaciones”.

La desconocida difícil situación del pangolín

Puede que nunca hayas oído hablar de esta criatura rara, tímida y desdentada. Un pangolín se parece a un oso hormiguero blindado, primordial –pero más pequeño–. Es nocturno y solitario, encontrándose con otros solo para aparearse. Trepa como un acróbata y puede colgarse de los árboles por su cola prensil y larga, y se dice que es capaz de excavar hormigón con las garras largas que usa para desgarrar los montículos de las termitas, un alimento básico.

Los científicos saben poco sobre este esquivo animal. Todas las ocho especies están amenazadas pero es raro encontrarlos en la naturaleza en cualquiera de los 48 países africanos y asiáticos donde viven, lo que lo hace casi imposible para estimar cuantos quedan. Tampoco se les ve a menudo en los zoológicos: son tan sensibles que pocos sobreviven en cautividad.

Se cree que más de un millón han sido asesinados en los últimos 10 años por el comercio ilegal de fauna silvestre internacional, lo que hace a los pangolines el mamífero más traficado de la Tierra. El príncipe Guillermo de Gran Bretaña apuntó recientemente que “El pangolín corre el riesgo de extinguirse antes de que mucha gente haya incluso oído hablar de él”.

Frozen pangolins, part of a recent shipment of illegally trafficked pangolin and pangolin parts seized at Belawan seaport in Medan, Sumatra. Photo credit: Paul Hilton for WCS-Indonesia.
Pangolines congelados, parte de un cargamento reciente de pangolines traficados ilegalmente y partes de pangolín incautados en el puerto marítimo de Belawan en Medan, Sumatra. Fotografía: Paul Hilton for WCS-Indonesia.
A bag of pangolin scales seized in Medan, Sumatra. The dried scales are used in traditional Chinese medicine to treat ills ranging from excessive nervousness and hysterical crying in children, to possession by devils or ogres in women, to malaria, deafness, cancer, rheumatism, asthma, acne and more. There is no scientific basis for such claims. Photo credit: Paul Hilton for WCS-Indonesia.
Una bolsa de escamas de pangolín incautada en Medan, Sumatra. Las escamas secas son usadas en la medicina tradicional china para tratar enfermedades que van desde el nerviosismo excesivo al llanto histérico de los niños, a la posesión por demonios u ogros en las mujeres, a la malaria, la sordera, el cáncer, el reumatismo, el asma, el acné y más. No hay una base científica para tales afirmaciones. Fotografía: Paul Hilton for WCS-Indonesia.

Hay una gran demanda por parte de los consumidores chinos –y en un menor grado, vietnamitas– por su carne, que a menudo es cocinada al vapor con jengibre y cebollas tiernas, o cocinada al curry. Es una delicadeza algo cara que hace ostentación de la riqueza de aquellos que lo cenan o lo sirven a sus invitados. Se cree que comer pangolín mejorará la salud ya que nutre los riñones; en África, los pangolines son comidos como carne de animales salvajes.

Una creciente demanda por pangolín, que se ha convertido en un producto de lujo, es, ahora, la mayor amenaza. Pero históricamente, el mayor peligro para las ocho especies de pangolín del mundo ha sido la creencia de que sus grandes escamas superpuestas –hechas de queratina, como las uñas humanas y el cuerno de rinoceronte–, tiene poderes curativos. El nombre de la especie en chino significa, literalmente, “animal que puede excavar una colina” y la antigua tradición sostiene que se come este animal, uno pude obtener su fuerza y atravesar la barrera de la enfermedad.

La Materia Médica China de 1597 prescribía escamas de pangolín secas (que se parece a la corteza de cerdo) para el nerviosismo excesivo y el llanto histérico de los niños, para las mujeres poseídas por demonios u ogros y para la fiebre palúdica y la sordera. La edición de 1989 recomienda las escamas para el tratamiento de todo, desde el cáncer al reumatismo y el asma pasando por los problemas de circulación e incluso el acné.

En la medicina tradicional china y la medicina herbolaria Africana, el feto de pangolín es consumido por los hombres para tratar la virilidad desfallecida y también se usa para ayudar a las madres lactantes. En África, varias partes del cuerpo son utilizadas como protección y usadas en rituales y brujería, para prevenir la malaria, los espíritus malignos o hacer que llueva.

No hay ninguna evidencia científica que apoye el beneficio medicinal de las partes de pangolín.

Pangolins use their sharp claws to dig into termite mounds and ant nests, then scoop up the insects with their tongues. Photo credit: Tikki Hywood Trust.
Los pangolines usan sus afiladas garras para excavar los montículos de las termitas y los hormigueros, entonces recogen los insectos con sus lenguas. Fotografía: Tikki Hywood Trust.

El comercio de pangolines se remonta a siglos: el Rey Jorge III de Inglaterra fue obsequiado, en 1820, con un traje acorazado hecho de escamas de pangolín. Más recientemente, decenas de miles de pieles de pangolín fueron vendidos internacionalmente cada año durante las décadas de 1980 y 1990 para alimentar una locura de la moda por zapatos y botas de piel de pangolín. Los principales consumidores eran Japón, México y los EE.UU: 167.000 pangolines fueron exportados legalmente a los Estados Unidos de 1980 a 1985.

Por fin se paró el comercio de la piel cuando las partes de la Convención sobre el Comercio Internacional de Especies Amenazadas (CITES) adoptó una “cuota de exportación cero” en 2000, que prohibió todo el comercio de tres especies de pangolines capturados en el medio silvestre. CITES regula el comercio de fauna silvestre transfronterizo conforme a un tratado firmado por 181 naciones.

La creciente sed china por pangolines

Hacer el comercio ilegal no hizo mucho por contener el mercado chino. La demanda por pangolín se ha disparado en conjunto con el aumento de la riqueza de algunos de los 1,4 billones de ciudadanos chinos. Durante la década de 1980, hasta 160.000 pangolines estaban siendo “cosechados” cada año, dice Dan Challender, copresidente del Grupo de Especialistas de Pangolín de la Unión Internacional para la Conservación de la Naturaleza (UICN).

En cuanto estas poblaciones se volvieron “comercialmente extinguidas”, China arrasó con los pangolines malayos del Sureste y el Sur de Asia. Tanto el pangolín chino (Manis pentadactyla) como el malayo están ahora en peligro crítico de extinción.

Las especies india (Manis crassicaudata) y filipina (Manis culionensis) fueron los siguientes objetivos. Ambas especies están ahora clasificadas como en peligro de extinción.

A pangolin digs and roots in a termite mound. Photo credit: Tikki Hywood Trust.
Un pangolín excava y busca en un montículo de termitas. Fotografía: Tikki Hywood Trust.

“Los pangolines están en grave declive y, en muchos lugares, ya no quedan”, dice Chris Shepherd, que dirige la oficina de Sureste Asiático de TRAFFIC, , la red que monitoriza el comercio internacional de fauna silvestre.

Con las especies asiáticas que rayan el borde de la extinción y los crecientes vínculos económicos entre los países africanos y el Este Asiático, el terreno de recogida se centra ahora en África. Ahora, los pangolines están saliendo de África hacia China en “cantidades industriales”, dice Challender. Este nuevo comercio intercontinental fue presenciado por primera vez hace solo seis años, pero se ha multiplicado debido a la gran cantidad de proyectos de desarrollo chinos en África, dice. En 2013, las cuatro especies de pangolines africanos fueron incluidas en la lista de especies en peligro como “Vulnerable”.

Los pangolines están ahora extinguidos localmente en algunas partes de Asia y África y, a la vez que desaparecen, su valor se dispara. Su creciente rareza y precio ha hecho a las escamas de pangolín un artículo atractivo para aquellos que, normalmente, trafican con marfil de elefante y cuerno de rinoceronte, dice Challender, una evolución muy preocupante.

El año pasado, más de seis toneladas de escamas de pangolín africano fueron incautados en Asia. En los primeros seis meses de 2015, esa cifra saltó a las ocho toneladas. “Ante esta alarmante tendencia a la alza nos estamos dando cuenta que estas incautaciones representan la punta del iceberg de una inmensa industria de contrabando”, dice Lisa Hywood, CEO y fundadora de la fundación Tikki Hywood Trust,un centro de rescate de animales y conservación en Zimbabue. Dice que la gente estaría horrorizada si supiesen cuántos de estos animales fueron sacados ilegalmente del continente africano. Ella lo llama “una situación grave”.

Cuando se hecha la cuenta, los números asombran. Seis toneladas de escamas (12.000 libras o 5.443 kilos) requeriría la matanza de unos 2.000 Pangolines del Cabo (Smutsia temminckii) o 1.000 Pangolines arborícolas (Phataginus tricuspis).

Los pangolines son parte de un inmenso mercado negro global de fauna silvestre que genera, aproximadamente, unos 19 mil millones de dólares al año. El pasado marzo, Sam Kutesa, el presidente de la Asamblea General de las Naciones Unidas, pidió una respuesta internacional coordinada,que señalaba que el tráfico de fauna silvestre constituye en grave riesgo para la seguridad mundial.

Some species of pangolins roost in the hollows of trees. Photo credit: Dan Challender.
Algunas especies de pangolines duermen posados en los huecos de los árboles. Fotografía: Dan Challender.

En una Reunión de la Asamblea General de la ONU en marzo, Jan Eliasson, Vicesecretario General de la ONU, identificó a las redes de crimen organizado y los grupos rebeldes y terroristas como los responsables. “El comercio ilegal de fauna silvestre se ha convertido en una forma de crimen transnacional con un crecimiento vertiginoso, que sigue los pasos de otros ejemplos perniciosos, como el tráfico de seres humanos, de drogas y de artículos falsificados”, dijo.

Una especie Antigua amenazada por los tiempos modernos

Challender señala que los primeros fósiles de pangolín se remontan a unos 80 millones de años. Todas las ocho especies que hay hoy en día están clasificadas en el orden Pholidota, que está hecho, en su totalidad, de pangolines. El nombre de su género, Manis, deriva del término latino manes (los espíritus de los muertos en la religión romana), así llamados por sus hábitos nocturnos y su apariencia extraña.

“Pangolín” viene del malayo pengguling, que quiere decir “uno que se enrolla”, refiriéndose a su principal defensa. Cuando es amenazado, el animal se enrolla para formar una pelota inerte y escamosa con sus duras escamas que protegen su vientre vulnerable. Esto ofrece una protección acorazada contra, incluso, los predadores más temibles, incluidos los leones y los tigres. Pero esa defensa hace a los pangolines un objetivo fácil para los cazadores furtivos, que pueden cogerlos fácilmente y meterlos en una bolsa.

The pangolin rolls itself into a tight ball, providing a great defense against tigers, but not traffickers, who pick up the animals and drop them in a bag. Photo credit: Tikki Hywood Trust.
El pangolín se enrolla para formar una bola apretada, lo que proporciona una gran defensa contra los tigres, pero no contra los traficantes, que cogen a los animales y los meten en una bolsa. Fotografía: Tikki Hywood Trust.

Los científicos saben muy poso sobre la conducta de estos animales nocturnos y solitarios. No ha habido mucha investigación y, al ser los pangolines cada vez más escasos, se hace cada vez más difícil observarlos en la naturaleza.

Se sabe que algunas especies duermen acurrucados en los huecos de los árboles, mientras que otros se meten bajo tierra. Normalmente se atreven a salir de la seguridad de sus casas en la oscuridad, usan un agudo sentido del olfato para compensar por su mala visión cuando rastrean sus presas favoritas, hormigas o termitas.

Los pangolines rompen los montículos o nidos con tres garras afiladas y extremadamente largas –tan a que deben plegarlas para caminar–. Luego insertan sus estrechos hocicos dentro de un montículo, dan la apariencia de estar amantándose de la tierra cuando recogen hormigas o termitas con sus lenguas pegajosas que en la mayoría de las especies, es más larga que todo su cuerpo. Unos músculos especiales sellan sus fosas nasales y sus orejas para que no entren las hormigas, sus escamas les protegen de las picaduras –y piedras en sus estómagos tritura su comida, como si fueran dientes–.

Note this pangolin’s outsized, powerful claws, which are rumored to be able to dig through concrete. Photo credit: Tikki Hywood Trust.
Notar las grandes y ponderosas garras de este pangolín, se rumorea que son capaces de cavar a través de hormigón. Fotografía: Tikki Hywood Trust.

Sus hábitos de búsqueda de comida les hacen los jardineros de su mundo –y los ingenieros del ecosistema–. Remueven la tierra y cavan agujeros que luego se convierten en las casas de otras especias, lo que ayuda a incrementar la variedad de especies en el área. También sirven para controlar las plagas ya que devoran millones de insectos al año, lo que mantiene a los insectos bajo control.

Cómo hacerse cargo de un pangolín

A pesar de su apariencia acorazada y su comportamiento introvertido, los pangolines son unos protectores extraordinarios. Las madres se enrollan para proteger o amamantar a su cría y la mece para dormirla. Generalmente, solo tienen una “pangocría” y llevan ese bebe en su espalda o cola durante sus primeros tres meses. Para ese tiempo, los investigadores creen que la cría ha empezado a comer algunas hormigas, huevos de hormigas y unas pocas termitas. Pueden amamantar las crías durante cinco o seis meses hasta que hayan aprendido los puntos más sutiles de cómo encontrar y escavar los hormigueros y los montículos de las termitas.

Dice Hywood que las madres tienes una menor movilidad cuando están criando a sus crías, lo que las hace más vulnerables a la caza furtiva. Para una especie que se reproduce a un índice tan bajo, la perdida de hembras en edad reproductora debido a los traficantes pone aun en más peligro la supervivencia de la especies.

In most pangolin species, the tongue is longer than its body, as seen here with this pangopup. Photo credit: Tikki Hywood Trust.
Como se puede ver aquí con esta cría de pangolín, en la mayoría de las especies de pangolín, la lengua es más larga que el cuerpo. Fotografía: Tikki Hywood Trust.

Hywood conoce de primera mano lo difícil que es criar a una cría de pangolín. Su organización sin ánimo de lucro ha estado involucrada en más de 50 casos donde los Pangolines del Cabo confiscados estaban enfermos, heridos o huérfanos y necesitados de asistencia. El gol es criar o rehabilitar los animales para devolverlos a su medio natural.

“Entonces se vuelve nuestra responsabilidad enseñarles a ser un pangolín”, dice Hywood. Los bebes deben der ser alimentados por biberón y hay que enseñarles a vivir por sí mismos. “No puedes liberar un pangolín sin las aptitudes necesarias para sobrevivir”, dice, “o [liberar pangolines] que son tan pequeños que los leones, los águilas u otros animales pueden cazarlos”. Una cuidadora humana se vuelve su madre sustituta, llevan a las crías de pangolín a pasear con frecuencia, los introducen a diferentes especies de hormigas y termitas y les ponen en nidos. La adiestradora usa pequeños instrumentos que simulan las garras del animal para enseñar a los pequeños como desenterrar su comida.

Enseñar a las crías de pangolín que las hormigas son su alimento es un proceso muy lento y laborioso, dice Hywood. Cuando Champ, su primer huérfano de pangolín, llegó al centro, se le dio una fórmula especializada por biberón durante los primeros tres meses. Cuando llegó el momento de quitarle el biberón y empezar a alimentarle con sólidos, los investigadores no podían conseguir que comiese hormigas o termitas –y no podían explicarse por qué–. “Es realmente extraño: la mayoría de los menores parecen odiar las hormigas, las apartan con las garras si les suben encima –y echan a correr–”, dice Hywood. “Entonces, de repente hace clic, ‘¡Oye, me encantas las hormigas!’ y a partir de ese momento, no hay quien les pare”.

Orphaned pangolin babies are completely dependent on their human minders, who must feed them, and even teach them to recognize ants as prey. Photo credit: Tikki Hywood Trust.
Los bebes de pangolín huérfanos dependen completamente de sus cuidadores humanos que deben de alimentarlos e, incluso, enseñarles a reconocer a las hormigas como alimento. Fotografía: Tikki Hywood Trust.

Una vez que los pangolines jóvenes aprenden a alimentarse por sí mismos y pesan, al menos, 13 libras (6 kilos), los animales son puestos en libertad. Entonces se les instala un dispositivo de seguimiento y se les monitoriza a través de una señal de radio hasta que Hywood está convencida de que están listos para prosperar en la naturaleza.

Curiosamente, los animales jóvenes conectan con sus cuidadores mucho después de ser puestos en libertad. “La gente se olvida de que los pangolines son mamíferos”, dice Hywood. “Tienen una gran memoria y, no hace mucho, fui reconocida por una hembra adulta que había puesto en libertad seis meses antes. Cuando desarrollan un vínculo, a menudo, los animales jóvenes se ponen de pie contra tu pierna para pedir que los cojas”, dijo.

Salvar al mamífero más traficado del mundo

Los pangolines son los mamíferos salvajes más traficados y, a su vez, están entre los más ignorados en lo que se refiere a la conservación. Hasta hace poco, TRAFFIC era una de las pocas organizaciones que reconocían la seriedad de lo que una vez llamó “la crisis de la extinción olvidada de Asia”.

De repente, eso está cambiando. En 2012, se reformó el Grupo Especialista en Pangolines de la Comisión para la Supervivencia de Especies de la UICN. En 2013, se celebró la primera conferencia global de conservación sobre pangolines y, el año pasado, lanzó un plan de acción global para conservar los pangolines. En la reunión de CITES de 2014, se determinó que el comercio ilegal de especies de pangolín estaba escalando a un índice alarmado y se estableció un grupo de trabajo. Este año, el Servicio de Pesca y Fauna Silvestre de los Estados Unidos (Servicio de Pesca y Fauna Silvestre de los Estados Unidos.

A live pangolin stares out from the poultry cage it had been locked in by illegal wildlife traffickers, while an Indonesian law enforcement agent looks on. Photo credit: Paul Hilton for WCS.
Un pangolín vivo mira desde la jaula para aves donde ha sido encerrado por unos traficantes de fauna silvestre ilegales, mientras lo observa un agente del orden público indonesio. Fotografía: Paul Hilton for WCS.

Challender dice que cada vez se les están sumando más y más grupos de conservación con lo que los pangolines empiezan a atraer la atención que durante tanto tiempo se ha centrado en especies más carismáticas como los elefantes, rinocerontes y tigres.

En junio, 2015, delegados de 31 países africanos y asiáticos que cuentan con población de pangolines y de los Estados Unidos se sentaron por primera vez para fomentar la colaboración para conservar los pangolines. La reunión,patrocinada conjuntamente en DaNang por los gobiernos de Vietnam y los Estados Unidos y organizada por la Sociedad Humana Internacional, convocó a las agencias nacionales para la fauna silvestre y de ejecución, a las organizaciones de conservación y a los mejores expertos del mundo. Los países del África occidental, central y meridional se unieron para trabajar con los países asiáticos. “Hubo este reconocimiento de que juntos todos son más poderosos que un país que actúa solo –porque se necesita tanto a los países importadores como a los exportadores para trabajar hacia una solución”, dice Rosemarie Gnam, que es la jefa de la División de Asuntos Científicos para USFWS. “Los países necesitan estar unidos en esta cuestión”.

Un comité científico presidido por Gnam determine que todas las ocho especies de están en tal peligro que debería ser incluida en el Apéndice I de CITES –sus normas de comercio internacional más estrictas–. Eso requeriría un voto si la recomendación es propuesta en la reunión de CITES de 2016.

12-pangolinChris Shepherd, de TRAFFIC, dice que, claramente, la situación actual de “exportación cero” bajo la que están las cuatro especies asiáticas no es disuasivo: El tráfico ilegal no se ha parado.

Incluirlo en el Apéndice I traería un perfil de conservación más alto con más financiación –y restringiría toda la actividad comercial–, que Shepherd caracteriza como “esencial”.

“En cuanto a la cantidad que se ha gastado en la conservación de los pangolines, realmente no lo sé, ¡pero no lo suficiente!” dice. “Se ha dedicado muy poco dinero a la investigación en la naturaleza o en el impacto que está teniendo el comercio. Y, se ha gastado muy poco en el apoyo al cumplimiento”.

La inclusión en la lista hará el cumplimiento una prioridad. La mayoría de los países tienen leyes contra la caza de pangolines, pero con la escasez de personal y los fondos limitados, el cumplimiento es, generalmente, débil y la escala del comercio ilegal está inundando el sistema. Para los cazadores furtivos locales que viven en las zonas rurales pobres, el aliciente del dinero rápido es extremadamente tentador. “Las multas son necesarias como elemento disuasorio y hasta que eso ocurra, el comercio continuará”, dice Shepherd.

En 2012, Zimbabue promulgó una nueva legislación sobre la fauna silvestre que incluye una de las leyes contra la caza furtiva más fuertes del mundo. Solo este año, las autoridades de Zimbabue han arrestado y condenado a 16 cazadores furtivos de pangolines, todos ellos recibieron sentencias máximas, nueve años en prisión y uno de ellos fue multado con 5.000 dólares estadounidenses.

Baby pangolins travel on their mother’s backs. Photo credit: Tikki Hywood Trust.
Las crías de pangolín viajan sobre las espaldas de sus madres. Fotografía: Tikki Hywood Trust.

Hasta hace unos años, el crimen contra el medio ambiente estaba muy abajo en la lista de prioridades para la mayoría de los gobiernos nacionales. Achim Steiner, que dirige el Programa de las Naciones Unidas para el Medio Ambiente; junto con John E. Scanlon, Secretario General de CITES y Helen Clark, Administradora del Programa de las Naciones Unidas para el Desarrollo, están instando al mundo a dar una prioridad a la lucha contra los delitos medioambientales. Los delitos contra la fauna silvestre ahora han obtenido la atención del Consejo de Seguridad de las Naciones Unidas, la Asamblea General y otros organismos de las Naciones Unidas.

Dice Challender que mientras que unas leyes fuertes y su cumplimiento son extremadamente importantes, reducir la demanda es absolutamente crucial. “Sino, vamos a perder los pangolines de Asia y de África y, [esas extinciones] van a ser atribuidas, principalmente, a la demanda por su carne y sus escamas –fundamentalmente por parte de China–”.

Como los pangolines se reproducen muy despacio y a menudo no sobreviven en cautividad, es imposible satisfacer la demanda a través de la cría comercial –e incluso si eso fuese posible, se ha demostrado que un aumento en la disponibilidad crea un aumento de la demanda, que amenaza aún más las poblaciones silvestres.

While alarmed conservationists around the globe recently created alliances to better protect the world’s remaining pangolins, Chinese demand continues to threaten the world’s most trafficked mammal. Photo credit: Tikki Hywood Trust.
Mientras que, recientemente, los conservacionistas alarmados de todo el mundo crearon una alianza para proteger mejor a los pangolines que quedan en el mundo, la demanda china continúa amenazando al mamífero más traficado del mundo. Fotografía: Tikki Hywood Trust.

WildAid, una organización de conservación con base en San Francisco, está lanzando una campaña por la reducción de la demanda, que trabaja con 100 socios de los medios de comunicación en China y Vietnam para sensibilizar sobre el estado de riesgo de los pangolines –y el impacto de comprar su carne y sus escamas–.

Dice Shepherd que el mundo se está dando cuenta de que los pangolines están en peligro y “tenemos una oportunidad para prevenir que los pangolines africanos se conviertan en una especie en peligro crítico de extinción como están en Asia. Sería muy triste si no se hace nada para protegerlos”.

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