- Historias de especies en peligro de extinción y de pueblos que están siendo desplazados por el aumento del nivel del mar forman parte de esta lista.
- En la relación también hay historias de los daños que ha causado la explotación petrolera y ofrecemos un panorama de la presencia del narcotráfico en la Amazonía peruana.
Este 2024, Mongabay Latam nos trajo historias de resistencia. Desde las especies de árboles que sobreviven a pesar de todas las amenazas que caen sobre ellos, hasta los pueblos costeros de Panamá, Colombia, Puerto Rico, Guatemala y México que enfrentan el desplazamiento debido al aumento del nivel del mar. A ellas se suma las historias de cinco félidos —jaguar, oncilla, puma, gato de las pampas y ocelote— que habitan en territorios que están desapareciendo.
En la lista de este año también está la historia de cuatro mujeres de la Amazonía colombiana que defienden la vida y sus territorios de actividades como la minería, la deforestación, la extracción de hidrocarburos o los cultivos ilícitos. Una nueva entrega de la deforestación causada por las colonias menonitas establecidas en Perú y la construcción de un exclusivo hotel que presiona a la Reserva Nacional de Paracas, también en Perú.
La relación culmina con una nueva investigación sobre los daños que ocasiona la explotación petrolera en cuatro países de Latinoamérica, los manejos de una empresa para saltarse las normas ambientales en Chile y una serie de reportajes que demuestran cómo el narcotráfico se ha instalado en el corazón de la Amazonía peruana.
10. Corredores de conservación: una esperanza para los felinos de América Latina
Los félidos de América Latina se están quedando sin territorio. Poblaciones de jaguar, oncilla, puma, gato de las pampas y ocelote habitan en pequeños parches de territorios que están desapareciendo. Ecosistemas como el corredor mesoamericano, el macizo colombiano, el Chaco paraguayo, los bosques secos al sur de Ecuador y norte de Perú y el Bosque Atlántico son el escenario de la lucha permanente de estas especies para no desaparecer.
Aunque muchas de estas especies se mueven dentro de áreas protegidas, los científicos coinciden en que para mantener a las poblaciones saludables es necesario que se mantenga la comunicación entre los individuos, por ello, la importancia de los corredores biológicos, para asegurar el libre movimiento de las especies.
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9. Los árboles que no queremos perder
En Latinoamérica hay, por lo menos, 23 631 especies diferentes de árboles. Es la región con la mayor diversidad de especies. Y entre los países con más especies endémicas a nivel mundial están Brasil (4 226), México (1 453) y Colombia (1 148), de acuerdo con el informe “El estado de los árboles del mundo”, publicado en 2021.
Sin embargo, esta biodiversidad está en riesgo. Se calcula que poco más de 7 000 especies de árboles en Latinoamérica enfrentan algún tipo de amenaza, y 31 podrían ya estar extintas. Esos datos son algunos de los hallazgos de una investigación que comenzó en 2015. La iniciativa, impulsada por Botanic Gardens Conservation International (BGCI), se propuso una tarea descomunal: conocer cuántas especies de árboles hay en el mundo y, sobre todo, determinar su estado de conservación.
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8. Mujeres que resisten: el arduo camino para defender el ambiente y el territorio en la Amazonía de Colombia
Colombia es el país donde se han registrado la mayor cantidad de amenazas y asesinatos a personas defensoras del ambiente y de los derechos humanos, según los reportes de Global Witness. Las amenazas de muerte, el desplazamiento de las personas de sus comunidades y el exilio son algunas de las consecuencias que enfrentan quienes viven en lugares donde se han establecido actividades como la minería, la deforestación, la extracción de hidrocarburos o los cultivos ilícitos.
Las cuatro historias que forman parte de este especial narran la vida de cuatro mujeres que crecieron en la Amazonía colombiana, en un territorio lleno de vida, pero que se fue transformando con la presencia de actividades extractivas.
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7. Comunidades bajo el agua: la crecida del mar amenaza con desaparecer tierras costeras del mapa
El aumento del nivel del mar, causado por la crisis climática, ha desplazado a miles de personas en América Latina. En Panamá, Colombia, Puerto Rico, Guatemala y México, comunidades costeras han resultado afectadas por el incremento del nivel del mar y la erosión que esto conlleva.
La falta de información, la inacción de las autoridades y las decisiones a corto plazo empeoran el panorama.“Ese miedo al futuro que ustedes sienten cuando escuchan sobre el cambio climático, nosotros lo estamos viviendo”, dice Aurea Sánchez Hernández, habitante de la comunidad de El Bosque, en el estado Tabasco, en México, donde el océano se ha tragado más de 500 metros de playa y ha derribado cerca de 70 casas.
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6. Menonitas en Perú: deforestación continúa sin freno ni permisos pese a orden de paralización fiscal
Tres colonias menonitas establecidas en la localidad de Tierra Blanca, en la región amazónica de Loreto, han causado la deforestación de 4,956 hectáreas desde su arribo en 2017, según un análisis satelital realizado por Mongabay Latam. Lo que antes era bosque se ha convertido en parcelas con cultivos de soya, arroz, maíz y crianza de ganado.
Pese a que a fines de 2020, el Ministerio Público dictó una orden para que las colonias menonitas cesen las actividades de desbosque, el grupo religioso asegura que puede realizar agricultura en esos bosques y, por ello, en 2022 reanudó las actividades de tala del bosque. Los menonitas enfrentan procesos legales por la deforestación.
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5. Un exclusivo hotel construido sin permisos y sobre un terreno disputado por usurpación presiona la reserva nacional de Paracas
El Hotel Boutique Atenas, ubicado en la zona de amortiguamiento de la Reserva Nacional de Paracas, fue construido sobre un predio que actualmente es disputado en un juicio por usurpación agravada sin contar con los permisos obligatorios del Servicio Nacional de Áreas Protegidas.
Antes del 2021, en esa zona había un campamento que era de una veintena de maricultores que se habían instalado allí, con casetas de madera, desde 1995, cuando la Empresa Nacional de Puertos, según las partidas registrales, era dueña de esos terrenos. Esas casetas, que los maricultores usaban para vigilar su producción de concha de abanico (Argopecten purpuratus) en los lotes marinos que el Ministerio de la Producción (Produce) les había concesionado, fueron destruidas.
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4. Herencia tóxica: 3452 desechos de la explotación petrolera contaminan hasta hoy el Perú
En Perú, los derrames de petróleo son constantes tanto en la Amazonía como en el mar del norte del país. Una investigación que realizó Mongabay Latam reveló que las zonas afectadas por la actividad petrolera suman 3452 sitios, entre los años 2013 y septiembre de 2023. De estos lugares afectados 3264 pasivos y 188 sitios impactados.
De esos 3264 pasivos ambientales, 25 presentan tres indicadores de contaminación en los niveles más altos: riesgo a la salud, riesgo físico y riesgo a la calidad ambiental. Veinte de ellos se encuentran en Piura, cuatro en Tumbes y uno en Loreto. Además, existen 74 casos con nivel alto de riesgo a la salud, 134 casos con nivel alto de riesgo físico y 51 con nivel alto de riesgo a la calidad ambiental.
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3. Devastación imparable: 30 áreas protegidas amazónicas de Colombia y Perú acorraladas por la minería y el narcotráfico
En la Amazonía de Colombia y Perú, el narcotráfico y la minería ilegal y legal ocupan al menos 51 396 hectáreas dentro y alrededor de las áreas naturales protegidas, un área que casi equivale a la extensión de la ciudad de Cali.
Un análisis geoespacial realizado por Mongabay Latam demostró que en Perú, el 57% de las áreas protegidas en la Amazonía están amenazadas por el narcotráfico y minería, mientras que en Colombia la cifra crece a 62,5%. La inseguridad en estas áreas protegidas impide las labores de conservación de guardaparques y comunidades.
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2. Chile: La fórmula de minera Quiborax para saltarse las reglas en el Salar de Surire
La empresa minera Quiborax fue denunciada por intentar eludir la evaluación ambiental. La denuncia surgió luego de que la Corporación Nacional Forestal (Conaf) determinara que Quiborax estaba incumpliendo una serie de restricciones ambientales en el salar de Surire, considerado Monumento Natural por ser una de los principales sitios en América del Sur para la reproducción de tres especies de flamenco.
La empresa ha negado las acusaciones y asegura que Conaf está malinterpretado la norma. Sin embargo, un equipo periodístico de Mongabay Latam y Ciper analizó una filtración de más de un millón de correos electrónicos enviados entre altos ejecutivos de Quiborax que, luego de ser cotejadas con documentos oficiales, confirman la elaboración de un plan para flexibilizar las restricciones establecidas en los permisos ambientales y poder extraer mineral desde zonas restringidas.
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1. Los vuelos de la muerte: líderes indígenas asesinados en un territorio invadido por 67 narcopistas
El narcotráfico se ha instalado en el corazón de la Amazonía peruana. Una investigación de Mongabay Latam rastreó, durante un año, un total de 128 pistas de aterrizaje ilegales en seis regiones de la Amazonía peruana: Ucayali, Huánuco, Pasco, Cusco, Madre de Dios y Loreto. El trabajo de verificación posterior permitió confirmar que 67 de estas pistas de aterrizaje clandestinas se ubican en solo tres de estas regiones.
Cada uno de esos trazos ilegales en el bosque fue detectado o corroborado por Earth Genome, una organización basada en California, Estados Unidos, especializada en el análisis satelital del territorio con la que Mongabay Latam se unió para trabajar esta investigación. Los expertos desarrollaron una herramienta de búsqueda que utiliza inteligencia artificial (IA) para detectar pistas de aterrizaje clandestinas.
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Imagen principal: árbol de shihuahuaco. Foto: Max Cabello.