Página de inicio | Acerca de | Ayuda | Contacto | RSS | Twitter
Página de inicio |  Noticias ambientales |  La selva |  Pescados tropicales |  Fotografías |  Para niños  |  Madagascar |  Ayuda  |  Acerca de  |  Inglés

La selva

Bosques lluviosos tropicales del mundo
Los bosques lluviosos tropicales constituyen un mundo aparte, y su importancia para el ecosistema global y la existencia humana es inmensa. En términos de diversidad biológica, los bosques lluviosos tropicales son una reserva natural de diversidad genética, que nos ofrece una gran variedad de plantas medicinales, alimentos de alta cosecha y un sinnúmero de productos forestales. Estos bosques son un hábitat importante para animales migratorios y sostienen el 50 por ciento de las especies que existen en la Tierra, así como una gran diversidad de culturas indígenas únicas. Los bosques lluviosos tropicales juegan un papel importante en la regulación global del clima, además de mantener una precipitación regular y amortiguar las inundaciones, sequías y erosión. Además, almacenan una vasta cantidad de carbono, mientras que producen una cantidad significativa de oxígeno en el mundo.

Regiones biogeográficas de los bosques—en donde se sitúan los bosques lluviosos
La mayoría de los bosques lluviosos tropicales se encuentran en cuatro regiones biogeográficas: la Afrotropical (continente africano, Madagascar e islas dispersas), la Australiana (Australia, Nueva Guinea y las islas del Pacífico), la Indomalaya (India, Sri Lanka, continente asiático y sureste de Asia) y la Neotropical (Sudamérica, América Central y las islas del Caribe).

Tipos de bosque
Los bosques lluviosos se encuentran en todo el mundo, no sólo en las regiones tropicales, sino también en regiones templadas como Canadá, Estados Unidos y la ex-Unión Soviética. Estos bosques, al igual que los tropicales, reciben abundante lluvia durante todo el año y se caracterizan por tener un dosel cerrado y una gran diversidad de especies. Carecen de calor y luz solar durante todo el año, lo cual se asocia con los bosques lluviosos tropicales. Sin embargo, esta página se enfoca en los bosques lluviosos tropicales y estos son los únicos tipos de hábitats que se discutirán aquí.

Estructura del bosque lluvioso tropical
Los bosques lluviosos tropicales del mundo son sumamente diversos, aunque comparten entre ellos algunas características como clima, precipitación, estructura del dosel, relaciones simbióticas complejas y diversidad de especies. No todos los bosques lluviosos conservan necesariamente las mismas características y la mayoría carece de límites claros, por lo que se puede mezclar con el manglar, el bosque húmedo, el bosque de montaña o el bosque tropical caducifolio que colindan con él.

Relaciones simbióticas en el bosque lluvioso
Los bosques lluviosos se caracterizan por tener una estructura única en la vegetación, que consiste en varias capas verticales, incluyendo el dosel de las coronas emergentes, el dosel de las coronas continuas, el sotobosque, el estrato arbustivo y el estrato del suelo. El dosel de las coronas continuas se refiere a la cubierta densa, formada por las hojas y ramas de árboles cercanos entre sí. El dosel superior se encuentra de 100-130 pies sobre el suelo del bosque y es interrumpido por árboles emergentes dispersos, que miden 130 pies o más, y que conforman el dosel de las coronas emergentes. Por debajo de la cubierta del dosel se encuentran múltiples niveles de hojas y ramas, conocidos colectivamente como sotobosque. La parte más baja del sotobosque, que mide de 5-20 pies (1.5-6 metros) de altura, se denomina estrato arbustivo y está conformado por arbustos y árboles jóvenes.

Diversidad del bosque lluvioso
A pesar de que cubre menos del 2 por ciento de la superficie terrestre, se estima que aloja al 50 por ciento de los seres vivos del planeta. El número de criaturas que habita en este tipo de bosques es tan grande—una estimación de 5-50 millones de especies— que resulta casi incomprensible. Estos números sugieren que el grado de conocimiento que tenemos acerca de los bosques es limitado. Por ejemplo, mientras que los bosques templados están dominados normalmente por media docena de especies de árboles o menos (90 por ciento de las especies del bosque), un bosque lluvioso tropical puede llegar a tener más de 480 especies de árboles en una sola hectárea (2.5 acres). Un solo arbusto en el Amazonas podría tener más especies de hormigas que las islas británicas en conjunto. La diversidad de bosques lluviosos no es casualidad, sino que es el resultado de una serie de circunstancias únicas.

Diversidad del bosque lluvioso - Papel del clima, energía solar y estabilidad
El clima húmedo y caliente juega un papel importante en los tipos de bosque lluvioso. Como regla general, la diversidad y productividad del ecosistema se incrementan con la cantidad de energía solar disponible para el sistema. La energía es capturada por las hojas del dosel vía fotosíntesis, convertida en azúcares simples y transferida a través del sistema energético del bosque, mediante las hojas y frutas que son ingeridas o descompuestas por varios organismos. La medida principal de producción primaria neta en el ecosistema es la fijación de carbono por las plantas. Los bosques lluviosos tropicales tienen el mayor promedio de producción primaria neta de cualquier ecosistema terrestre, lo que significa que un acre de bosque lluvioso almacena más carbono que un acre de cualquier otro tipo de vegetación. El clima húmedo añade otro ingrediente esencial para la gran diversidad: el agua.

Estructura del dose, suelos, efecto del área en la biodiversidad
El sistema del dosel, característico de los bosques lluviosos tropicales, incrementa la diversdad mediante la creación de nuevos nichos en la forma de nuevos recursos alimenticios, nuevos refugios, nuevos lugares para esconderse y nuevas áreas para interactuar con otras especies. De hecho, se estima que del 70-90 por ciento de la vida en los bosques lluviosos se encuentra en los árboles. Uno de los mejores ejemplos de un nicho en el dosel que multiplica la diversidad son las epífitas, muchas de las cuales forman ecosistemas diminutos propios. Las bromelias tanque del bosque del nuevo mundo pueden almacenar más de ocho litros (dos galones) de agua en zonas de captación formadas en sus hojas rígidas, volteadas hacia arriba. Estos depósitos de agua sirven como criaderos de renacuajos y larvas de insectos, que son animales adaptados específicamente a la vida en este diminuto y obscuro nicho. Además, proveen de agua a millones de distintos habitantes del dosel. Más de 28,000 especies de epífitas son reconocidas por la ciencia, aunque muchas más aún no han sido catalogadas.

Variación a corto plazo, eras de hielo, ecotonos
Los bosques lluviosos y su diversidad no permanecen en un estado constante, sino que son el producto de una serie de impactos, inlcuyendo incendios, caídas de árboles, tala a pequeña escala e incluso flujo de lava. Estos eventos pueden incrementar la diversidad del bosque, ya que confieren a algunas especies oportunidades para crecer en la ausencia del dosel. El crecimiento de nuevas especies de árboles da oportunidades para la supervivencia de sus simbiontes (por ejemplo nuevos polinizadores o dispersores de semillas).

Diversidad de imagen - Biodiversidad del bosque lluvioso
Debido a que las plantas crecen durante todo el año en los bosques lluviosos tropicales, deben defenderse constantemente de un arsenal de depredadores que las acechan. Durante el curso de millones de años de evolución, las plantas han desarrollado una variedad de defensas mecánicas y bioquímicas. Las defensas mecánicas como espinas y pelos urticantes parecen ser un tipo secundario de protección, además de los compuestos químicos producidos por las plantas, como alcaloides, taninos y aminoácidos tóxicos.

Las artes del engaño - MIMETISMO Y CAMUFLAJE en el bosque lluvioso
Existen tres tipos de mimetismo, utilizados tanto por el depredador como por la presa: mimetismo batesiano, mimetismo mülleriano y automimetismo. Mimetismo se refiere a las semejanzas que existen entre diferentes especies de animales y camuflaje se refiere a una especie animal que se parece a un objeto inanimado.

Dosel del bosque lluvioso—Introducción
Se estima que del 70-90 por ciento de la vida del bosque lluvioso se encuentra en los árboles, por encima del suelo sombreado. El bosque lluvioso tropical primario está dividido verticalmente en por lo menos cinco estratos: el dosel de las coronas emergentes, el dosel de las coronas continuas, el sotobosque, el estrato arbustivo y el estrato del suelo. Cada estrato tiene sus propias especies de plantas y animales que interactúan con el ecosistema circundante. El dosel de las coronas emergentes se eleva de 20-100 pies sobre el resto del dosel.

Dosel del bosque lluvioso—Investigación & estudio
Hasta hace relativamente poco tiempo, el conocimiento acerca de este rico estrato era escaso, hasta que los científicos descubrieron medios eficaces para poder estudiarlo. Sin embargo, aún con técnicas modernas de estudio, muchas especies, sistemas y relaciones en el dosel siguen siendo un misterio y aún queda mucho por descubrir.

Dosel del bosque lluvioso—copas emergentes
Este estrato consiste en árboles gigantes emergentes que sobresalen del dosel circundante. Estos árboles son inmensos, por lo menos en cuanto a estándares tropicales, algunos rebasan los 213 pies (65 metros) de altura y tienen troncos horizontales que miden más de 100 pies (30 m). Estos árboles viven en un clima diferente al del resto de los árboles del dosel. El aire es mucho más seco, y un viento moderado sopla a través de sus ramas. Estas especies emergentes aprovechan el viento para dispersar sus semillas. Normalmente, las semillas de estas especies son ligeras y están equipadas con algún tipo de mecanismo que les permite ser transportadas por los vientos a grandes distancias de los árboles parentales.

Dosel del bosque lluvioso—Árboles del dosel
El dosel es la región que posee una mayor riqueza dentro del bosque lluvioso y su grosor varía de 10-40 pies (3-12 m). Muchas especies consideradas como habitantes del suelo, se han adaptado a la vida en el dosel —como gusanos, cangrejos, ranas, canguros, osos hormigueros y puerco espines—en donde se alimentan de las abundantes frutas, semillas y hojas, o del gran número de animales que es atraído por la comida. La vida de las plantas en el dosel es casi igual de rica que la de los animales, debido a la variedad de epífitas y lianas.

Dosel del bosque lluvioso—Epífitas
Existen más de 15,000 epífitas únicamente en la región tropical y más de 30,000 en el mundo entero, así como una gran cantidad de especies que aún no han sido catalogadas. El término epífita describe a una planta, que al igual que un parásito crece en el hospedero, pero a diferencia del mismo no toma nutrimentos del árbol y depende de los nutrimentos del aire, precipitación y de la composta que yace en las ramas de los árboles. El modo de vida de las epífitas les confiere a estas plantas ventajas en el bosque lluvioso, permitiéndoles tener acceso a la luz directa del sol, a un mayor número de animales polinizadores del dosel y a la posibilidad de dispersar sus semillas a través del viento. Las epífitas deben de ser familiares para los habitantes de los climas templados, ya que muchas plantas caseras y "plantas aéreas" son epífitas del bosque lluvioso.

Dosel del bosque lluvioso—Enredaderas y lianas
Las enredaderas y las lianas (enredaderas leñosas) son abundantes en el dosel y conforman una proporción significativa de la vegetación del bosque lluvioso tropical. Existen más de 2,500 especies de enredaderas, pertenecientes a alrededor de 90 familias [distribución de lianas]. Estos organismos van desde las enredaderas homogénas pequeñas que crecen en los árboles, hasta las lianas del grosor de un árbol, que parecen colgar independientes en la mitad del bosque. Algunas de las lianas leñosas exceden los 3,000 pies de largo. La liana ratán, es bien conocida por su uso en los muebles y cuerdas. El ratán también produce frutas grandes comestibles —una de las favoritas de los primates.

Dosel del bosque lluvioso—Animales
La increíble diversidad de recursos alimenticios y de nichos únicos en los árboles del dosel, mantiene a una gran variedad de especies animales. Los animales se congregan normalmente alrededor de los árboles con flores, lo que convierte a estos sitios en los mejores lugares para observar la vida silvestre durante la floración. En áreas como ésta, en donde la comida es abundante, los animales marcan su territorio, pero debido a que el follaje afecta la visión de las exhibiciones territoriales, la mayoría de los animales utiliza señales sonoras. De esta manera, algunos de los animales más ruidosos del mundo son habitantes del dosel. Muchos primates emiten aullidos y gritos, mientras que las aves utilizan cantos para marcar territorio.

Dosel del bosque lluvioso—Locomoción animal
Debido a que existen claros entre las ramas del dosel, los animales de este estrato deben ser capaces de atravesar estas discontinuidades con la ayuda de diferentes medios. La mayoría de las especies del dosel escalan, saltan o vuelan de árbol en árbol y están equipados con los mecanismos apropiados que les permiten tener éxito. Algunas especies han tenido adaptaciones importantes que les han permitido planear. La forma dominante de locomoción en el dosel es un producto de la estructura del bosque y de su historia evolutiva, por lo que difiere en cada bosque lluvioso continental.

Dosel del bosque lluvioso—Murciélagos
Los mamíferos más abundantes del bosque lluvioso no son los habitantes del suelo, sino los murciélagos. Los trópicos tienen la variedad más amplia de murciélagos, siendo este el grupo de mamíferos más diverso del bosque tropical, que constituye más del 50 por ciento de las especies de mamíferos. Los murciélagos varían en tamaño, y van desde las zorras gigantes voladoras que tienen una envergadura de seis pies (1.8 m), hasta los diminutos murciélagos abejorro de Tailandia, el mamífero más pequeño del mundo, que pesa menos que un penique americano. Los lugares que eligen los murciélagos tropicales como refugio y sus hábitos alimenticios son igual de diversos e incluyen fruta, néctar, sangre e incluso carne.

Dosel del bosque lluvioso—Primates
Los primates son característicos de cada región biogeográfica de bosque lluvioso, excepto Australasia. Dentro de este orden existen alrededor de 200 especies vivas y más de 50 géneros. Se piensa que los primates evolucionaron de ancestros insectívoros hace 100-65 millones de años. Los antiguos primates eran parecidos a los lémures y tarseros de la actualidad. Los primates superiores aparecieron hasta hace 37-23 millones de años. Estos últimos incluyen monos, simios, chimpancés y humanos. Las especies no humanas se dividen generalmente en monos del viejo y del nuevo mundo.

Dosel del bosque lluvioso—Otros mamíferos y aves
De las más de 10,000 especies de aves que existen en el mundo, la mayoría se encuentra distribuida en los trópicos. El 50 por ciento de todas las especies de aves habita en la cuenca del Amazonas y en Indonesia.

Dosel del bosque lluvioso—Anfibios, reptiles, invertebrados
Las ranas son el anfibios más abundante del bosque lluvioso. A diferencia de las ranas de los climas templados, que normalmente limitan sus hábitats a sitios cercanos a los cuerpos de agua, las ranas tropicales son más abundantes en los árboles, y únicamente algunas se encuentran cerca de los cuerpos de agua que hay en el suelo del bosque. Esto se debe a que las ranas tienen que mantener su piel siempre húmeda, ya que casi la mitad de su respiración se lleva a cabo a través de ella. La elevada humedad del bosque lluvioso y las frecuentes tormentas confieren a las ranas tropicales mucha más libertad para moverse entre los árboles y de este modo escapan de muchos depredadores que se encuentran dentro de las aguas del bosque lluvioso.

Suelo del bosque—el sotobosque
El suelo del bosque lluvioso tropical primario rara vez se ve como la jungla densa y enredada que se muestra en las películas y las historias de aventuras. De hecho es exactamente lo contrario: el suelo se encuentra relativamente libre de vegetación, debido a la profunda obscuridad creada por el dosel, que probablemente se encuentra a 100 pies (30 m) de altura. El dosel no sólo bloquea la luz solar, sino que también disminuye el viento y la lluvia. Durante una tormenta, el visitante del bosque lluvioso no sentirá inmediatamente el agua, porque gran parte de ésta es desviada y colectada por varias plantas del dosel. La protección que confiere el dosel del bosque al suelo, lo convierte en un lugar calmado, en donde la brisa más sutil sopla durante una tormenta tropical.

Suelos y ciclos de nutrimentos
Más de dos terceras partes del bosque lluvioso del mundo y tres cuartas partes de la Amazonia se consideran "desiertos mojados", ya que crecen en suelos de laterita roja y amarilla, la cual es ácida, carece de nutrimentos y es similar a la arcilla. Muchos suelos de los bosques tropicales son muy viejos y están empobrecidos, especialmente en regiones —como la cuenca del Amazonas— en donde no ha habido actividad volcánica reciente que acarree nuevos nutrimentos. Los suelos del Amazonas están tan expuestos, que carecen de minerales como fósforo, potasio, calcio y magnesio que provienen de las "rocas", pero son ricos en óxido de aluminio y óxido de hierro, lo que le da una coloración distintiva rojiza o amarillenta a los suelos tropicales y los hace tóxicos en grandes cantidades. Bajo estas condiciones, uno se pregunta cómo es que estos suelos tan pobres son capaces de soportar un crecimiento tan vigoroso.

Semillas y frutas
Muchas de las semillas y frutas producidas en los árboles del dosel caen al suelo y proveen de alimento a roedores, aves y peces, creando un banco natural de semillas en la hojarasca. Una vez que las semillas llegan al suelo, se pueden observar dos estrategias de crecimiento. La primera es producir semillas grandes con reservas alimenticias, que le permiten sobrevivir al brote bajo condiciones de luz tenue en el sotobosque. El segundo método, característico de muchas especies pioneras, es producir una gran cantidad de semillas pequeñas que germinan únicamente bajo determinadas condiciones (normalmente claros de luz). Cuando se abre un claro de luz, estas semillas germinan y los brotes crecen rápidamente para tapar nuevamente el hueco en el dosel.

Claros de luz, brotes, arbustos
La mayoría de los bosques remanentes que existen en el mundo no tienen la apariencia de los clásicos bosques lluviosos con árboles de coronas emergentes, un interior abierto y prácticamente nada de crecimiento en el suelo. En lugar de esto, la mayoría de los bosques lluviosos han sido afectados recientemente por tormentas, incendios, tala y derrumbes, por lo que tienen áreas dispersas que se encuentran en diferentes estados de sucesión.

Mamíferos del suelo del bosque
Como resultado del escaso crecimiento vegetal en el suelo, el bosque lluvioso tropical es capaz de mantener a pocos herbívoros grandes, y como consecuencia una población aún más pequeña de grandes depredadores. La mayoría de los animales que habitan en el suelo, son criaturas pequeñas o medianas que se alimentan de fruta caída, semillas, retoños y presas pequeñas.

Mamíferos del Sotobosque
Debido a la escasez de presas grandes, los grandes depredadores son relativamente raros en el bosque lluvioso. Muchos de estos carnívoros se han adaptado para enfrentar la escasez de grandes presas terrestres, al cazar y complementar su alimentación con animales más pequeños como peces, roedores, aves y reptiles. Los felinos constituyen el grupo más grande de mamíferos depredadores del sotobosque. Todas las regiones boscosas, con excepción de la región de Australasia, tienen sus propias especies de felinos silvestres.

Aves del suelo del bosque
La mayoría de las aves del suelo del bosque son insectívoras y elusivas, ya que aunque se camine sigilosamente por el bosque es común asustarlas. Los bosques asiáticos son el hogar de los pavo reales y los gallos de la jungla (de los cuales descienden las gallinas domésticas), además del famoso pavo real común de la India y Sri Lanka. El pavo real común vive la mayor parte del año en bandandas, pero a principios de la primavera (época de reproducción), un solo macho forma un harén con un número de hembras que va de dos a cuatro. Únicamente los machos tienen un plumaje llamativo y elaborado. El pavo real verde tiene una mayor distribución a través del sureste de Asia y es más grande, con un plumaje predominantemente verde y azul metálico.

Reptiles y anfibios del suelo
Los depredadores vertebrados más abundantes del suelo boscoso son los reptiles, dentro de los cuales se encuentran las serpientes y los lagartos. Las serpientes del bosque más famosas son las constrictoras gigantes, los pitones (viejo mundo y Australasia) y las boas (nuevo mundo). Muchos de estos reptiles son arborícolas, acuáticos y relativamente pequeños. La mayoría de las serpientes del suelo boscoso son pequeñas o medianas, nocturnas y medianamente venenosas. Se alimentan de una amplia gama de anfibios, mamíferos, aves pequeñas e insectos. Muy pocas especies representan una amenaza para el ser humano, aunque algunas son conocidas por infringir mordidas frecuentemente. Algunos ejemplos bien conocidos son la víbora de cuatro narices, la cuaima (nuevo mundo) y las cobras (viejo mundo).

Invertebrados del suelo
Los invertebrados son los animales más abundantes y diversos del bosque lluvioso. Estos animales han invadido cada nicho imaginable e inimaginable, y cada uno juega un papel único, aunque pobremente entendido, dentro del ecosistema. Por ejemplo, los invertebrados son esenciales en el suelo para el proceso de descomposición. Estas especies se alimentan de plantas rotas, sustancias de las mismas y partículas orgánicas. Los gusanos de tierra, las termitas y otros organismos, fragmentan partículas grandes para que las bacterias, los hongos y los microorganismos las pueden utilizar.

Aguas del bosque lluvioso
Los bosques lluviosos tropicales poseen algunos de los ríos más grandes del mundo, como el Amazonas, Madeira, Mekong, Negro, Orinoco y Zaire (Congo), debido a la tremenda precipitación que reciben sus cuencas. Estos mega-ríos son alimentados por un gran número de tributarios de menor tamaño, arroyos y arroyuelos. Por ejemplo, tan solo el Amazonas tiene alrededor de 1,100 tributarios, 17 de los cuales miden más de 1,000 millas de largo. Aunque los grandes ríos tropicales son bastante uniformes en apariencia y composición del agua, sus tributarios son muy variables. Muchos ríos y arroyos tropicales tienen niveles altos y bajos de agua, dependiendo de la época del año en la que se encuentren.

Tipos de ríos
Las personas que visitan por primera vez el Amazonas y otros grandes ríos tropicales, se impresionan al ver el color café lodoso del agua, que pareciera estar contaminada. Sin embargo, este color no es el resultado de descargas residuales ni de contaminantes, sino de la gran carga de sedimentos que acarrea el agua. A causa de las fuertes lluvias tropicales, todos los días toneladas de sedimentos son acarreadas hacia los ríos desde las montañas y las áreas boscosas circundantes. La carga de sedimentos es aún mayor donde la deforestación ha dejado el suelo desprovisto de su cubierta vegetal protectora, y enormes cantidades de suelo se erosionan por las lluvias.

Ríos, arroyos y arroyuelos
Es común que los ríos tropicales de los bosques lluviosos asombren a los visitantes primerizos con su tamaño y abundancia. La habilidad de los ríos tropicales para bifurcarse en grandes brazos, formando islas gigantes que pueden ser fácilmente confundidas con el continente, es aún más impresionante. A veces es prácticamente imposible distinguir cuál es la bifurcación principal del río.

Inundación, nivel alto y bajo de agua
Las inundaciones estacionales son características de muchos ríos tropicales, aunque muy pocos son comparables con el igapó (bosque pantanoso) y el várzea (bosque de inundación) de la cuenca del Río Amazonas, en donde grandes extensiones de bosque lluvioso aumentan su nivel de agua hasta 40 pies durante la época de inundaciones. Las inundaciones menos severas ocurren en agosto y septiembre, mientras que las más fuertes ocurren en abril y mayo. Los tributarios que drenan la cuenca de Guyana, fluyen en junio y los tributarios que drenan la cuenca brasileña fluyen en marzo o abril. Debido a que las lluvias están desfasadas en ambas cuencas, el pico de descargas de la ribera izquierda (cuenca de Guyana) y la derecha (cuenca brasileña) se compensan de alguna manera, lo que tiende a moderar los niveles altos y bajos de agua en la corriente principal, aunque es posible que los tributarios tengan variaciones extremas.

Praderas flotantes
Las plantas flotantes tienen ventaja sobre las que se encuentran en el fondo, ya que siempre tienen acceso a la luz del sol y pueden utilizar fácilmente los nutrimentos que provienen de los ríos blancos. Las plantas que están sumergidas, tienen dificultades para capturar suficiente luz solar en las aguas fangosas para la fotosíntesis.

Vida silvestre en la ribera del bosque lluvioso
Las especies de plantas riparias (ribera) son escasas en el bosque. Tienden a parecerse a las plantas colonizadoras del los claros y a las especies de los bordes, que crecen bien bajo condiciones de luz intensa en áreas abiertas. La diversidad de especies de plantas riparias es baja y los ríos se encuentran limitados por paredes de enredaderas que cubren a los árboles, debido al acceso de la luz intensa tropical. La presencia de esta vegetación es muy espesa y los antiguos exploradores del Amazonas se referían al bosque lluvioso como una "jungla impenetrable."

Importancia de los ríos de los bosque lluviosos para la gente
Los ríos tropicales han jugado siempre un papel esencial en la ecología de los bosques lluviosos, pero también han sido importantes en las vidas de los habitantes y forasteros del bosque. Antes de la llegada de los europeos, las civilizaciones dispersas y las sociedades pequeñas se asentaron a lo largo de los cuerpos de agua, que les servían como medio de transporte y comunicación, de ruta para el comercio y como una fuente de pescado y agua dulce. Sin embargo, estos asentamientos fueron los primeros en desaparecer, ya que se vieron afectados directamente por la guerra, o indirectamente por el impacto de las enfermedades europeas.

Amenazas para los ríos y lagos tropicales
Actualmente las aguas de los bosques tropicales se encuentran severamente amenazadas por proyectos hidroeléctricos, erosión por deforestación, sobrepesca, y envenenamiento por derrames de petróleo y químicos. Los efectos de la degradación de estás aguas son extensivos e involucran daños económicos globales, al medio ambiente y a la gente local.

Habitantes del bosque lluvioso
Desde hace tiempo, los bosques lluviosos tropicales han sido el hogar de indígenas que desarrollaron civilizaciones y culturas basadas en el medio ambiente circundante. Las grandes civilizaciones como los mayas, incas y aztecas, desarrollaron sociedades complejas e hicieron grandes contribuciones para la ciencia. Al depender de la naturaleza y carecer de la tecnología para dominar su ambiente, los nativos aprendieron a observar sus alrededores y a entender la complejidad del bosque lluvioso. A través de las generaciones, esta gente ha logrado comprender la importancia de vivir dentro de su ambiente, y depende de los múltiples beneficios renovables que el bosque le ofrece.

Habitantes del bosque africano
En la actalidad, el bosque lluvioso africano es hogar de una de las tribus más famosas, los "pigmeos", del bosque de Ituri al norte de Zaire. Los pigmeos más altos, conocidos como los Mbuti, raras veces rebasan los cinco pies (1.5 m). Además de los Mbuti, existen otros tres grupos africanos importantes: los Aka (República Centroafricana y el norte del Congo), los Baka (sur de Camerún) y los Twa (cuenca central del Río Zaire). Juntos, estos grupos suman de 130,000 a 170,000 habitantes, distribuidos en una gran extensión de bosque. El resultado de su amplia distribución es una baja densidad poblacional; en los Mbuti existe en promedio menos de una persona por cada milla y media cuadrada (cuatro kilómetros cuadrados).

Habitantes del bosque asiático
Asia es la región que posee la mayor población sobre la Tierra, y las presiones demográficas han obligado a la gente a migrar a los bosques, en donde interfieren con la vida de los pocos habitantes nativos que quedan. Los habitantes originales del sureste asiático eran australoides de piel obscura, cabello rizado y nariz ancha. Algunos de ellos migraron a Australia y eran cazadores, no agricultores, aunque utilizaban una gran variedad de plantas como alimento, medicina y otros productos útiles. Los nativos han sido desplazados a los extremos del bosque lluvioso, debido a las oleadas de inmigración. Actualmente, los nativos del bosque lluvioso asiático, se encuentran únicamente en áreas remotas del bosque de la península malaya, Borneo, las islas Andaman, Filipinas (isla de Palawan) y Nueva Guinea.

Habitantes del bosque americano
Los bosques lluviosos americanos fueron en algún tiempo el hogar de algunas de las civilizaciones más desarrolladas de la antiguedad, incluyendo a los incas (Andes), mayas (América Central) y aztecas (América Central). Estas culturas crearon grandes metrópolis y desarrollaron la agricultura y las ciencias. Sin embargo, esto cambió con la llegada de los europeos a finales del siglo quince y dieciséis.

Habitantes del bosque en la actualidad
Desde tiempos remotos, los bosques lluviosos tropicales han tolerado a los humanos. Aunque la vida en el bosque no puede ser calificada como fácil, los habitantes han logrado adaptarse a la vida en estos sitios y a sus sistemas. Es por ello que los habitantes del bosque constituyen un enorme acervo de conocimiento acerca del hábitat. Los nativos conocen las propiedades medicinales de las plantas y entienden el valor del bosque como un ecosistema intacto. Cuando el bosque es destruido, estos indígenas pierden sus hogares y a su cultura. Los conflictos con los colonizadores, que traen consigo enfermedades y animales domésticos, han reducido las poblaciones nativas de muchos sitios.

Fuerzas detrás de la pérdida de los bosques lluviosos tropicales
Como lo han descrito las primeras siete secciones de este sitio, los bosques lluviosos tropicales son ecosistemas increíblemente ricos, que juegan un papel fundamental en el funcionamiento básico del planeta. Los bosques lluviosos son el hogar de probablemente el 50 por ciento de las especies del mundo, lo que los convierte en un acervo extenso de recursos biológicos y genéticos. Además, los bosques lluviosos ayudan a mantener el clima constante, ya que regulan los gases atmosféricos, estabilizan la precipitación, evitan la desertificación y tienen muchas otras funciones ecológicas.

Amenazas naturales de los bosques lluviosos
A lo largo de su existencia, los bosques lluviosos tropicales se han visto afectados por fuerzas naturales como incendios, sequías y tormentas. Estos eventos ocurren al azar y pueden dañar grandes extensiones de bosque lluvioso. Sin embargo, el daño causado por las fuerzas naturales generalmente es diferente al causado por los seres humanos, ya que la pérdida de bosque no es completa y algunas partes del ecosistema continúan funcionando. Normalmente el bosque se puede regenerar rápidamente a partir de los remanentes sobrevivientes del ecosistema. En pocos años, la diversidad del bosque puede igualar o exceder la diversidad que existía antes del disturbio. Algunos estudios sugieren que estos eventos periódicos son un ingrediente esencial en la diversidad del bosque. Sin estos sucesos, los científicos creen que algunos bosques no podrían alcanzar su estado dinámico completo. Los científicos han encontrado que las tasas de recambio del bosque pueden ser cortas (65-135 años).

Amenazas humanas para los bosques lluviosos
La causa principal de la destrucción del bosque lluvioso hoy en día se debe a las actividades humanas que, a diferencia de los daños naturales, son implacables y devastadores. Aunque gran parte de esta deforestación es conducida por fuerzas económicas nacionales e internacionales, la mayor parte no tiene un objetivo a largo plazo, sino que es el resultado de las actividades de subsistencia a nivel local. Muchos de los efectos de la destrucción del bosque lluvioso, inducida por los humanos, probablemente son irreversibles en nuestra época.

Actividades de subsistencia
Por lo menos el 60 por ciento de la deforestación en los trópicos es causada por actividades de subsistencia a nivel local, realizadas por gente que utiliza los recursos del bosque lluvioso para su supervivencia. Al no tener dinero, ni poder político para adquirir propiedades en tierras productivas, estos colonos transitorios se establecen a lo largo de caminos contruidos en los bosques por compañías constructoras o de extracción. Después de cortar árboles para obtener material de construcción, estos grupos utilizan la técnica de roza, tumba y quema para limpiar el bosque circundante y destinarlo a la agricultura de corto plazo. En primer lugar, se eliminan los arbustos del sotobosque, y posteriormente los árboles que no se utilizan para obtener material de construcción. El área se deja secar durante algunos meses y posteriormente se quema. En la tierra se siembran cultivos de plátanos, palma, mandioca, maiz o arroz. Después de uno o dos años, la productividad del suelo disminuye, y los agricultores transitorios aumentan la presión y talan extensiones adicionales de bosque para obtener más tierra cutlivable a corto plazo. Los campos viejos de cultivo, que ahora son infértiles, permanecen como desperdicio o se utilizan algunas veces para que el ganado a baja escala paste.

Reestructuración económica
En años recientes, la globalización económica ha traído cambios profundos en los países de todo el mundo. Generalmente ha existido una tendencia a descentralizar al gobierno y a disminuir el papel que juega el gobierno en la vida diaria de los ciudadanos. En países en vías de desarrollo, el cambio ha aumentado la tensión sobre los recursos forestales, que normalmente son tratados como propiedad del estado. Ya sea determinado por la economía del mercado o dictado por un comando de economía, el manejo del bosque ha sido responsabilidad de los servicios públicos forestales. Las compañías de explotación forestal han negociado a través de esta burocracia, lo que asegura generalmente algún tipo de control sobre el reparto de las tierras forestales.

El impacto de la producción de petróleo en el bosque lluvioso
La extracción de petróleo es responsable de la deforestación, degradación y destrucción de las tierras alrededor del mundo entero. El proceso de extracción de peróleo involucra la liberación de subproductos tóxicos de perforación a los ríos locales, mientras que las tuberías rotas y las fugas dan como resultado derrames persistentes de petróleo. Además, la construcción de caminos para tener acceso a sitios remotos en donde hay petróleo, abre las puertas a los colonizadores y a los urbanizadores para que accedan a tierras salvajes.

Tala en el bosque lluvioso
La tala es una de las actividades más sobresalientes y mejor conocidas que degradan y destruyen al bosque lluvioso. A pesar de que las técnicas de tala han ido mejorado y del creciente conocimiento y preocupación internacional acerca de los bosques lluviosos, la tala no sustentable de los bosques lluviosos tropicales sigue siendo prevalente—gran parte de ella se lleva a cabo ilegalmente por organizaciones criminales.

Impacto ambiental de la minería en el bosque lluvioso
El Oro, cobre, diamantes, gemas y otros minerales preciosos son recursos importantes que se encuentran en los bosques lluviosos del mundo. Extraer estos recuros naturales es normalmente una actividad destructiva que daña al ecosistema del bosque lluvioso y causa problemas con la gente que vive en la cercanía de las actividades mineras o río abajo.

Incendios en el bosque lluvioso
Los bosques lluviosos son cada vez más susceptibles ante los incendios forestales, debido a la degradación por la tala selectiva, fragmentación y actividades agrícolas. A los científicos les preocupa que gran parte del Amazonas corre el riesgo de quemarse, y en el futuro se podrían observar incendios similares a los que dañaron Indonesia en años recientes de El Niño.

Amenazas humanas para los bosques lluviosos—Guerra
La guerra se puede considerar una bendición o una maldición para el bosque lluvioso, dependiendo del curso de los eventos que rodean a la guerra, y de la situación que había antes de que estallara el conflicto.

Impacto de la agricultura en el bosque lluvioso
El uso agrícola que se le da a algunos bosques lluviosos es un error, debidido a que éstos tipos de hábitat presentan condiciones deficientes de nutrimentos y ácidas del suelo. Sin embargo, muchos proyectos de agricultura comercial se siguen realizando en este tipo de bosques, y muchas zonas son convertidas en pastizales para el ganado, después de que los suelos se han agotado. Algunas regiones situadas en los llanos de inundación, como la parte baja del Amazonas (várzea), son más apropiadas para la agricultura comercial, debido a que las inundaciones anuales acarrean nutrimentos.

Pastizales para el ganado
La mayoría de la destrucción comercial que se llevó a cabo en la cuenca del Amazonas, desde la década de los 60 hasta principios de los 90, no se debió a la tala o a la minería, sino a los rancheros que críaban ganado y a los inversionistas, quienes quemaron enormes extensiones de bosque lluvioso antes de sembrar áreas con pastos africanos para pastura. En Brasil, el gobierno atribuyó el 38 por ciento de la deforestación desde 1966-1975 a la ganadería de gran escala. La ganadería ha sido ampliamente extendida en algunas partes de América Central, encabezada por Costa Rica, que tiene una de las tasas más altas de deforestación en Latinoamérica. Durante la década de los 70 y principios de los 80, algunos tramos de bosque lluvioso fueron quemados y convertidos en pastizales para abastecer la demanda americana de carne.

Hidroeléctrica, cacería ilegal
Los grandes proyectos hidroeléctricos, financiados por el apoyo internacional y organizaciones para el desarrollo, como el Banco Mundial, han traído como consecuencia la pérdida extendida de bosque. Además de inundar grandes extensiones de bosque lluvioso (las presas del Amazonas generalmente son ineficientes ecológicamente, porque grandes extensiones de bosque se inundan debido a la llaneza de la cuenca) y exterminar a la fauna silvestre, las presas destruyen los hábitats acuáticos y afectan a las poblaciones de peces, desplazan a los indígenas y aumentan la cantidad de carbono en la atmósfera (conforme la madera sumergida se pudre).

Leña, caminos, clima
La FAO estima que el 40 por ciento del mundo (2.6 miles de millones de personas) utilizan leña o carbón como fuente principal de energía para cocinar y producir calor. El consumo de leña se ha incrementado en un 250 por ciento desde 1960 (la población mundial se incremetó únicamente en un 90 por ciento desde 1960).

Deuda
En la década de 1980, 1990 y principios del año 2000, la deuda fomentó la tala comercial en algunos países en vías de desarrollo que se encontraban en zonas tropicales. Carentes de dinero, estos países utilizaron sus recursos naturales como el medio más fácil y más rápido para saldar su deuda y los intereses generados. Sin capital de inversión o mano de obra calificada, y en un esfuerzo por incrementar el capital necesario, los productos forestales no renovables que se encotraban disponibles (riqueza mineral, madera, petróleo y energía hidroeléctrica) con frecuendia fueron agotados.

Impacto de la población y la pobreza en los bosques lluviosos
La fuerza suprema que se encuentra detrás de la deforestación es la sobrepoblción humana; tanto la población de las regiones templadas que demanda recursos derivados de los bosques lluviosos tropicales, como la población en expansión de las naciones en vías de desarrollo, quienes explotan el bosque lluvioso para su supervivencia. En la actualidad la población mundial es de aproximadamente 6,510,000,000 (6.51 mil millones) de personas. Cada minuto nacen 145 personas en el planeta, cada día 208,000 y cada año 76,000,000.

Consumo
El consumo desmedido de los países ricos, contribuye con la destrucción del bosque lluvioso en los países tropicales. Por ejemplo, durante la década de 1970 y 1980, la demanda americana de carne barata desencadenó la tala de vastas extensiones de bosque lluvioso en América Central y Brasil. De manera similar, la demanda de algunos productos forestales, como la madera dura tropical y el aglomerado barato de madera, incita a las compañías a explotar las reservas forestales. Japón transforma cada año miles de acres de bosque lluvioso en estructuras para bloques de cemento (desechadas después de que el cemento se seca) y palillos chinos. El cultivo de mandioca en Tailandia para alimentar al ganado europeo se incrementó más de diez veces, de 1965 hasta mediados de la década de los 80, lo que provocó la deforestación extensiva en el noreste de Tailandia.

Consecuencias globales de la deforestación en los trópicos
La decadencia de los bosques lluviosos del rededor del mundo continúa. ¿Hace esto realmente una diferencia? ¿Por qué es preocupante la desaparición de algunas plantas, animales, hongos y microorganismos? Los bosques lluviosos poseen una temperatura y una humedad difíciles de alcanzar, además de poseer insectos y fauna silvestre evasiva.

Efectos a nivel local y nacional
Los efectos más inmediatos de la deforestación se dan a nivel local. Con la pérdida de bosque, la comunidad local modifica el sistema que les brinda servicios valiosos, aunque frecuentemente menospreciados, como asegurar el flujo regular de agua, además de limpiar y proteger a la comunidad de las inundaciones y la sequía. El bosque actúa como un tipo de esponja, que absorve la precipitación durante las tormentas tropicales, retiene los suelos y libera agua a intervalos regulares de tiempo. Este tipo de regulación de los bosques lluviosos ayuda a moderar los efectos destructivos de las inundaciones y la sequía, que ocurren con la tala de los bosques.

Erosión del suelo
La pérdida de árboles, que retienen el suelo con sus raíces, provoca que la erosión se continúe extendiedo en los trópicos. Muy pocas áreas tienen suelos de buena calidad, pero éstos son deslavados rápidamente por las fuertes lluvias después de la tala. De este modo, los campos de cultivo se vienen abajo y la gente debe invertir en la importación de fertilizantes o decide talar una extensión adicional de bosque. Costa Rica pierde alrededor de 860 millones de toneladas de suelo valioso al año, mientras que la Gran Isla Roja, Madagascar, pierde tanto suelo por la erosión (400 tons/ha) que sus ríos tienen el color rojo de la sangre, lo que tiñe al Océano Índico circundante. Algunos astronautas afirman que Madagascar pareciera estarse desangrando, una descripción apta para un país con una grave degradación ambiental y una economía agrícola en decadencia, que depende de sus suelos. La tasa de incremento en la pérdida de suelo, después de la tala de bosque es impresioante; un estudio en Costa de Marfil, encontró que las pendientes forestadas pierden 0.03 toneladas de suelo al año por hectárea; las pendientes cultivadas pierden al año 90 toneladas por hectárea y los suelos desnudos pierden 138 toneladas per hectárea.

Pérdida de especies, extinción y enfermedades
Un bosque completamente funcional tienen una gran capacidad para regenerarse. La caza exhaustiva de las especies del bosque lluvioso tropical reduce el número de especies necesarias para la continuidad y regeneración del bosque. Por ejemplo, en África Central, la pérdida de especies, como gorilas, chimpancés y elefantes, reduce la capacidad de dispersión de las semillas y retarda la recuperación de los bosques dañados. La pérdida del hábitat en los trópicos también afecta la regeneración de las especies de sitios templados. Las aves migratorias norteamericanas, importantes dispersores de semillas en sitios templados, disminuyeron de 1-3 por ciento anualmente de 1978-1988.

Pérdida de recursos renovables, conflicto con la fauna silvestre
La deforestación puede hurtar las ganancias renovables potenciales, mientras que las tierras productivas de valor están siendo sustituidas por maleza y pastizales. Los bosques tropicales constituyen una fuente importante de recursos que pueden contribuir significativamente con el crecimiento económico nacional en una base continua.

Papel climático de los bosques
Los bosques lluviosos tropicales juegan un papel vital en el funcionamiento de los sistemas naturales del planeta. Los bosques regulan el clima local y global, mediante la absorción y creación de precipitación y el intercambio de gases atmosféricos. Por ejemplo, el Amazonas crea del 50-80 por ciento de su propia precipitación a través de la transpiración. La tala de los bosques lluviosos cambia la reflexión que ocurre en la superficie de la Tierra, lo que afecta al clima global por el cambio en los patrones del viento y las corrientes oceánicas, además de cambiar la distribución de la precipitación. Si los bosques continúan siendo destruidos, los patrones globales del clima pueden volverse más inestables y extremos.

Papel atmosférico de los bosques
Los bosques lluviosos juegan un papel importante en la fijación de carbono en la vegetación, por medio de la fotosíntesis. La vegetación y los suelos de los bosques del mundo contienen alrededor del 125 por ciento del carbono atmosférico. Cuando los bosques se incendian, degradan o talan, ocurre lo contrario: se liberan grandes cantidades de carbono a la atmósfera, como bióxido de carbono, junto con otros gases invernadero (óxido nitroso, metano y otros óxidos de nitrógeno). Los incendios de los bosques liberan alrededor de dos mil millones de toneladas de bióxido de carbono a la atmósfera cada año, o alrededor del 22 por ciento de las emisiones antropogénicas de bióxido de carbono.

Extinción
La mayor pérdida provocada por la destrucción actual, que tendrá los efectos más duraderos, será la extinción masiva de especies, que constituyen la biodiversidad de la Tierra. Aunque en el pasado han habido grandes extinciones, ninguna ha ocurrido tan rápido o ha sido causada principalmente por las acciones de una sola especie. La tasa de extinción actual puede ser de 1,000 a 10,000 veces mayor que la tasa de extinción biológica normal, o histórica, que va de 1-10 especies extintas al año.

Cómo conservar los bosques lluviosos tropicales
Los bosques lluviosos tropicales están desapareciendo de la faz de la Tierra. A pesar de la creciente preocupación internacional, los bosques lluviosos continúan siendo destruidos a un paso que excede los 80,000 acres (32,000 hectáreas) por día. Los bosques lluviosos del mundo cubren actualmente una superficie de alrededor de 2.5 millones de millas cuadradas (6 millones de kilómetros cuadrados), un área del tamaño aproximado de los 48 Estados Unidos juntos o de Australia, y representa alrededor del 5 por ciento de la superficie de la tierra. Gran parte de esta área remanente ha sido alterada por las actividades humanas, y dejó de mantener su biodiversidad original.

Conservando los Bosques Lluviosos Mediante la Agricultura y el Desarrollo Sustentable
En la búsqueda de una "solución" al problema de la deforestación de los bosques lluviosos tropicales —ya sea mediante bonos de canje deuda por naturaleza, reservas extractivas, tala selectiva, ecoturismo, u otras estrategias— el destino final de los bosques reside en las manos de la población rural. Aunque algunos argumentan que los bosques lluviosos pueden ser "conservados" restringiendo el crecimiento económico, es necesario comprender que los parques y reservas naturales no persistirán a menos que las comunidades rurales se convenzan de la importancia de la conservación.

Conservando los Bosques Lluviosos Mediante el Desarrollo Sustentable—Productos Forestales
Existen numerosos productos forestales que pueden ser recolectados de manera renovable a pequeña escala por la población rural. Aunque los campesinos pobres aun deben superar su ignorancia acerca de los productos forestales sustentables y las dificultades para su distribución, la cosecha de productos forestales sin destruir los bosques puede ser mas rentable a largo plazo que la otra alternativa: destruir el bosque y usar la tierra para agricultura de subsistencia por unos cuantos años antes de volver a talar otra área o vender la madera (asumiendo que no ha sido talada recientemente) a una compañía maderera. Varios estudios respaldan la económica del uso forestal sustentable. Uno de ellos realizado en la Amazonía peruana encontró que la tala de un fragmento de bosque de hectárea generaba 1,000 dólares. La producción anual neta de la cosecha sustentable de frutos y caucho, fue estimada en 422 dólares después de deducir los costos de colecta y transporte, con un valor neto de 6,300 dólares por hectárea, usando una tasa de descuento del 5% (Peters y otros, 1989).

Ecoturismo
El ecoturismo se está convirtiendo rápidamente en una de las principales opciones de los países en desarrollo para atraer recursos extranjeros mediante la conservación de sus bosques lluviosos. Los ecoturistas pagan por ver la belleza natural de un país y no la destrucción causada por la explotación a corto plazo. El dinero gastado directamente en la economía local ayuda a dar valor económico a la preservación del bosque. Los nativos, junto con el gobierno, pueden ver la importancia de mantener el bosque intacto. La mayoría de los turistas están dispuestos a pagar directamente para ayudar a la conservación mediante donativos y cuotas de entrada a parques naturales.

Conservando los Bosques Lluviosos Mediante el Desarrollo Sustentable—Productos a Gran Escala
Cerca del 40% de la deforestación de los bosques lluviosos es ocasionada por intereses comerciales: tala, ganadería, agricultura, minería, hidroeléctricas y otras industrias. Hoy en día estas empresas dependen principalmente de la explotación inmediata de las áreas boscosas y el traslado a nuevos fragmentos después de haber agotado rápidamente los recursos. En ocasiones estas industrias son impulsadas por gobiernos empobrecidos que buscan ingresos de manera fácil y rápida. Estos gobiernos miran hacia el bosque como un medio para inyectar divisas extranjeras para pagar sus deudas y mejorar su economía en el corto plazo —ignorando el abatimiento de este importante capital natural. Al hacerlo, estos gobiernos pueden estar retrasando el crecimiento futuro y continuar empobreciendo a las generaciones venideras.

Conservando el Bosque Lluvioso con Productos Forestales Secundarios
Existe una gran potencial para desarrollar los productos forestales secundarios a gran escala para contribuir al ingreso local y nacional a través del mercado internacional. Algunos productos del bosque pueden ser domesticados y cultivados ampliamente en tierras altamente perturbadas y antiguamente cubiertas de bosque. Muchos de estos productos están mejor adaptados al ambiente tropical y producen mayor ganancia económica con menores costos fiscales y ambientales.

Conservando los Bosques Lluviosos con Plantas Medicinales
Las plantas no solo sirven de alimento y como reservorio genético. Cada vez más, las plantas y en menor grado los animales del bosque lluvioso son la fuente de compuestos útiles para propósitos medicinales. El bosque lluvioso se ha catalogado como el más grande laboratorio químico donde cada especie experimenta con varias defensas químicas para asegurar su sobrevivencia en el duro mundo de la selección natural. Estas especies han estado sintetizando estos compuestos durante millones de años para protegerse contra los depredadores, infecciones, plagas y enfermedades. Esto hace de las especies del bosque lluvioso un excelente acervo modelos químicos con los cuales los investigadores pueden crear nuevas medicinas.

Conservando el Bosque Lluvioso con Compuestos Medicinales y Plaguicidas Naturales
Si se le da la oportunidad puede ser que algún día el bosque lluvioso proporcione la cura para el SIDA, el cáncer de páncreas, las infecciones de estafilococos resistentes a los antibióticos, la fiebre de Lassa o la enfermedad de Alzheimer. Desafortunadamente, a medida que disminuye la cobertura del bosque primario a una tasa de 1-2% cada año, se estima que el 20-25% de las especies vegetales del planeta estarán extintas para el año 2015. Quizá en algún remoto valle andino destinado a la destrucción, viva una extraña orquídea que ha desarrollado un químico anti viral que elimina el VIH, detiene al cáncer o desacelera el envejecimiento. Además, los curanderos que propician mucho del acercamiento para la identificación de estas plantas y sus usos, están desapareciendo aun más rápido a medida que sus aldeas buscan un estilo de vida más occidental. Generalmente los curanderos son ancianos y cuando mueren su gran conocimiento de los usos tradicionales de las plantas del bosque se pierde con ellos

Tala Sustentable en el Bosque Lluvioso—Generalidades
En la mayoría de los países tropicales los bosques son propiedad del gobierno y la propiedad privada frecuentemente está prohibida. Generalmente la madera se obtiene bajo concesiones otorgadas a compañías privadas, las cuales, al no tener derechos legales sobre la tierra, eluden realizar inversiones en prácticas de manejo forestal. Por lo tanto, no es de sorprender que un estudio reciente encontró que menos de un 0.1 por ciento de los bosques tropicales son manejados de manera sustentable y que menos del uno por ciento del area usada para la actividad forestal se encuentra bajo algún tipo de manejo. Aún así, los países tropicales ven a la madera como una gran fuente de ingresos y continúan otorgando enormes concesiones por debajo de su valor de mercado. La silvicultura es importante para la economía global ya que contribuye con el 2% del Producto Interno Bruto a nivel mundial (llegando a 4% del PIB en los países en desarrollo) y alcanzando el 3% del comercio internacional; también es vital para las economías locales de muchos países.

Tala Sustentable en el Bosque Lluvioso—Certificación de la madera y restricciones al comercio
Aunque casi el 80% de la madera tropical se consume internamente por los países productores, su consumo por parte de Estados Unidos y otras naciones industriales juega un papel importante en la deforestación tropical. Estados Unidos, con menos de 5% de la población mundial total, consume 17% de la producción internacional de madera y es el tercer importador de maderas tropicales, con compras por 1 a 1.5 millones de metros cúbicos equivalentes a $800 millones de dólares al año. Las mejores acciones para reducir el daño causado por la actividad maderera son la imposición de restricciones estrictas, o incluso prohibiciones, sobre las importaciones de ciertas maderas finas tropicales; desarrollar formas más sustentables de extracción de la madera; certificar la madera con respecto a su origen y si se extrajo de manera sustentable; e iniciar el uso de productos alternativos a las maderas tropicales.

Tala de Bajo Impacto
Aunque muchas compañías dicen practicar la "tala sustentable", virtualmente ninguna la realiza. Pocas empresas replantan árboles después de talar, especialmente cuando la legislación forestal requiere de un periodo de 35 años de recuperación después de la tala, lo cual es mucho más tiempo que las concesiones otorgadas por 15 a 20 años. Sin embargo, el daño al bosque circundante y al ecosistema en su conjunto puede ser reducido drásticamente mediante la adopción de ciertas prácticas de tala de bajo impacto entre las que se incluyen: 1) cortar las plantas trepadoras y lianas antes de derribar árboles; 2) dirigir la caída de los árboles para causar el menor impacto posibles en el bosque circundante; 3) establecer zonas de amortiguamiento de corrientes de agua y áreas de protección de cuencas; 4) usar tecnología avanzada que reduzca el daño al suelo causado por la extracción de los troncos; 5) planificar cuidadosamente para evitar crear una cantidad excesiva de caminos que den acceso a los colonizadores; 6) reducir la pérdida de madera en las áreas de corte (se desperdicia entre el 25 y el 50% de la madera en un parche de tala determinado); 7) limitar la pendiente o inclinación de los caminos para prevenir la erosión excesiva.

Reduciendo el Impacto de la Ganadería en el Bosque Lluvioso
El aclareo para crear terrenos de pastoreo y la especulación sobre la tierra es la principal causa de la perdida de bosque tropical, sobre todo en Latinoamerica. El ganado es un inversión atractiva para los granjeros de la Amazonía debido a que representa una fuente de capital de alta liquidez con bajos costos marginales una vez que se ha clareado el bosque. El ganado también se utiliza para reclamar la propiedad sobre terrenos boscosos "no ocupados" que pueden ser usados para superar la inflación.

Reduciendo el Impacto Ambiental de la Extracción Petrolera en el Bosque Lluvioso
En términos generales, la industria petrolera tiene un historial ambiental poco presumible, pero este es aún peor en las regiones boscosas tropicales que contienen ricos depósitos de petróleo. Los ejemplos más notorios de desastres forestales causados por compañías petroleras son los de Shell en Nigeria y Texaco en Ecuador. Ambas compañías han degradado el ambiente y afectado a la población local e indígena con sus actividades. Las operaciones de Texaco en Ecuador fueron responsables del derrame de 17 millones de galones de petróleo hacia los biológicamente ricos ríos tributarios del Alto Amazonas, mientras que Shell colaboró con el antiguo régimen dictatorial de Nigeria en la represión y persecución de sus habitantes.

Aumento de la Productividad y Rehabilitación de Hábitats Degradados
Para reducir la pérdida de los bosques lluviosos tropicales no solo debemos preocuparnos por la transformación de los ecosistemas naturales, sino también por el uso más racional de las áreas que ya están taladas y degradadas. Para aminorar la pérdida futura de bosque se debe incrementar y sostener las productividad de granjas, pastizales, plantaciones y matorrales además de restaurar especies y ecosistemas en hábitats degradados. Al reducir las malas prácticas de uso de la tierra y mejorando y consolidando las ganancias en las tierras ya desarrolladas se puede disminuir la necesidad de seguir deforestando aún más el bosque.

Conservando el Bosque Lluvioso que Queda
El tercer componente para resolver el problema de la deforestación es destinar terrenos para la conservación. Tal como este sitio ha tratado de dejar en claro, la conservación no funcionará si no consideran las realidades económicas. El destino de los parques y reservas se encuentra en gran medida en las manos de sus habitantes y la conservación de los bosques tropicales mediante cualquier tipo de sistema de áreas protegidas solamente puede alcanzarse con el mejoramiento de sus condiciones de vida. Algunos estudios han mostrado que la deforestación y la invasión de los parques naturales generalmente disminuyen a medida que mejora la calidad de vida. En las secciones previas se han discutido los medios con los cuales se pueden elevar las condiciones de vida de la población rural. Esta sección final se centra en los mecanismos mediante los cuales podremos preservar algunas de las áreas boscosas remanentes. Existen dos componentes principales: el establecimiento de prioridades, mediante investigación y valoración económica, acerca de que áreas conservar, y la organización de los esfuerzos de conservación.

Determinación de la Ubicación de Reservas en el Bosque Lluvioso
Además de tomar en cuenta las áreas con alta diversidad y a las especies con mayor riesgo de extinción, los diseñadores de parques naturales deben considerar otros factores antes de decretar un Árdea protegida. Siempre es importante el monitoreo de las actividades humanas dentro de las tierras que se pretende proteger. La presencia de caminos, la ubicación de asentamientos humanos actuales y futuros, y el uso de la tierra y sus recursos son factores de importancia para determinar si es pertinente proteger esas tierras. Si la población rural no esta contenta con el acceso limitado a los parques naturales, es muy probable que no respeten los limites de las reservas. Aparte de esto, los planificadores generalmente intentan estimar el potencial económico del manejo de los bosques conservados, como una alternativa a la deforestación. La distribución espacial y la calidad del hábitat también es de gran importancia. Es obvio que cuando se puede elegir entre un hábitat natural y otro degradado, es mejor proteger el Árdea con la mejor calidad de hábitat. Los investigadores también examinan la distribución de las especies para determinar los limites de las áreas.

El Tamaño de las Reservas del Bosque Lluvioso
A medida que los bosques son decretados como reservas, generalmente en las regiones de mayor diversidad, surge la pregunta acerca de cual debe ser su tamaño. Obviamente debería protegerse tanta tierra como sea posible, pero en las ultimas dos décadas ha existido un tema controversial dentro la biología de la conservación: establecer una reserva grande o varias reservas pequeñas. Las fuertes disputas entre las dos corrientes del debate SLOSS ('single large or several small' o una grande y varias pequeñas) ha provocado la perdida de tiempo, dinero, recursos y credibilidad, y ha divido a grupos que deberían estar unidos en la conservación del ambiente del planeta.

Financiamiento de la Conservación del Bosque Lluvioso Tropical
Ahora que hemos priorizado cuales son las áreas forestales que deben designarse como reservas, debemos enfocarnos en la implementación y administración de éstas áreas protegidas. Estos tres pasos requieren de un amplio espectro de participantes, desde agricultores locales hasta consejos de administración de corporaciones multinacionales, pasando por altos funcionarios de gobierno. Sin cooperación cualquier sistema de áreas protegidas está destinado al fracaso.

Organización de los Esfuerzos de Conservación del Bosque Lluvioso
Para cubrir adecuadamente las complejas necesidades de conservación de los bosques lluviosos es indispensable balancear los esfuerzos de conservación entre los sectores local, nacional e internacional. La autoridad sobre los bosques y sus recursos debe iniciar a nivel local en las comunidades con los gobiernos municipales supervisando los parques. Las agencias estatales —con la guía y asistencia de instituciones intergubernamentales y organismos no gubernamentales (ONGs)— necesitan formular estrategias amplias de conservación y proporcionar conocimiento referente a la protección y manejo de áreas protegidas. También se requiere la cooperación entre los participantes para fusionar la información científica, económica y social que permita formular un plan general de uso y conservación de los bosques.

El papel de los países en desarrollo en la conservación de los bosques lluviosos
Cada vez más, las naciones en desarrollo están adoptando planes ambientales con los que buscan lucir bien ante los ojos de las organizaciones financieras internacionales y finalmente se están dando cuenta de los efectos negativos de la deforestación para sus propios habitantes y economías. En 1996, México anunció su primer programa nacional de medio ambiente cuyo objetivo era salvar el 10 por ciento remanente de sus bosques.

El Papel de las Instituciones Intergubernamentales en la Conservación
Hasta hace poco el concepto de desarrollo sustentable era extraño para las dos principales organizaciones financiadoras de proyectos de desarrollo: el Banco Mundial (BM) y el Fondo Monetario Internacional (FMI). El Banco Mundial es un banco de desarrollo multilateral que presta dinero para ayudar a los países a desarrollarse económicamente mediante el financiamiento de infraestructura y nuevas industrias. Históricamente ha financiado muchos proyectos que han resultado en la destrucción de los bosques lluviosos. El FMI comparte un antecedente similar.

Los Movimientos Populares en la Conservación de los Bosques
Las ONGs son una fuerza que impulsa los esfuerzos de conservación hoy en día. Estos grupos sin fines de lucro financian y apoyan todos los aspectos de la conservación desde la investigación inicial hasta las iniciativas de protección del área, su implementación mediante esquemas de manejo y de conservación comunitaria hasta la construcción de alianzas entre oficinas de gobierno e intereses privados. Ellos apoyan y coordinan los movimientos populares, promueven la comunicación entre todas las partes y patrocinan iniciativas educativas tanto en los países desarrollados como en los que están en vías de desarrollo.

Comunicación, Qué Pueden Hacer los Individuos Para Conservar el Bosque Lluvioso
Uno de los componentes esenciales para conservar los bosques lluviosos del mundo es mantener una línea abierta de comunicación entre todas las partes. La comunicación que incluya a los pueblos indígenas, comunidades rurales, intereses comerciales, gobiernos, científicos y conservacionistas es esencial para comprender cuál es el mejor medio para balancear la conservación y el desarrollo. La información generada en las conferencias puede usarse para ayudar a diseñar un plan que sea aceptado por todos los involucrados. Ningún grupo debe de ser excluido o subrepresentado y se deben revisar todos los esfuerzos para mantener el libre acceso a las conferencias. Éstas se deberían realizar regularmente y tener algún tipo de cuerpo legislativo de tal manera que las decisiones tomadas puedan ser implementadas. Hasta el momento ninguna conferencia se ha realizado bajo éstas condiciones ideales, pero a decir verdad el problema global de la conservación de los bosques lluviosos es un concepto relativamente reciente.

Organizaciones Internacionales para la Conservación
En la actualidad las organizaciones internacionales para la conservación actúan como consultores ambientales para los gobiernos y las grandes corporaciones interesadas en disminuir la contaminación, establecer áreas protegidas y conservar la biodiversidad. Algunas organizaciones como la Unión Internacional para la Conservación (IUCN), Conservación Internacional (CI), la Sociedad para la Conservación de la Vida Silvestre (WCS), y el Fondo Mundial para la Naturaleza (WWF) actúan como mediadores entre políticos, poblaciones locales, científicos y grupos activistas que promueven la conservación. Estas organizaciones emprenden y apoyan una amplia gama de actividades relacionadas con la conservación, desde organizar conferencias internacionales hasta establecer en las comunidades proyectos de conservación para lograr decretos de parques y reservas. Estas organizaciones integran los hallazgos científicos más recientes en los esfuerzos de conservación, tomando en cuenta las realidades económicas.

El papel de los pueblos indígenas en la conservación del bosque lluvioso
Los bosques tropicales han sido habitados por los humados durante decenas de miles de años, y las actividades humanas a escala tradicional de hecho pueden ayudar a promover la diversidad del bosque. Las tribus indígenas rara vez sobrexplotan los recursos que les proporciona su subsistencia, y practican cuidadosamente la rotación de cultivos y la cosecha sustentable de productos forestales y de fauna silvestre. Aún así, estos pueblos son acusados con frecuencia por la destrucción de los bosques lluviosos. La creación de reservas en ocasiones ha despojado de sus tierras a estos habitantes tradicionales y en algunas partes los guardaparques restringen injustamente sus actividades. Con menor frecuencia cada día, los pueblos tribales eran y son ignorados cuando los gobiernos nacionales otorgaban concesiones a empresas extranjeras para realizar actividades petroleras, mineras y forestales. Los indígenas no se han obtenido beneficios adquiridos por los empresarios forestales.

Conservando los Bosques Lluviosos Tropicales
La prohibición del comercio de madera o el establecimiento de reservas no será suficiente para salvar los bosques lluviosos tropicales que aún quedan en el mundo. Para poder preservar estos bosques, se deben abordar y reconocer las razones subyacentes de carácter social, económico y político que producen la deforestación. Una vez identificados estos problemas, se puede tomar una decisión acerca de lo que se debe hacer. Si se decide salvar al bosque, entonces un buen punto de partida es la creación de reservas de usos múltiples que promuevan el desarrollo sustentable y la educación de los habitantes locales. Actualmente cerca del 6% de los bosques que quedan en el mundo se encuentran protegidos, lo cual significa que más del 90% todavía están disponibles para quien los tome. Sin embargo, ni siquiera este 6% esta a salvo si no se toman las medidas adecuadas hacia un desarrollo sustentable. Si deseamos, como humanidad, salir de la actual situación ambiental sin consecuencias graves a largo plazo, debemos fomentar los proyectos de reforestación y restauración donde quiera que sea posible.



Nueva Guinea
    Nueva Guinea: Nueva Guinea, la segunda isla más grande del mundo, alberga uno de los bosques lluviosos tropicales más extensos, y uno de los últimos. También aloja a algunos de los moradores de bosque más tradicionales, entre los que hay gente que ha tenido poco o ningún contacto con el mundo exterior (se estima que son 44 los grupos en la Papúa indonesia con los que no se ha tenido contacto). La isla también es rica en recursos naturales, incluyendo madera, minerales, una industria pesquera de alta mar y depósitos energéticos.



La Amazonía







Excepto donde sea indicado expresamente, todo el contenido de este sitio web ha sido escrito por Rhett A. Butler. Este sitio web ha sido traducido por Genoveva Trejo Macías.


MONGABAY.COM
Mongabay.com intenta aumentar el interés y el aprecio por las tierras y la vida silvestre, mientras examina el impacto de creciente tendencia en clima, tecnología, economía y las finanzas en conservación y desarrollo.

Es Usted bilingue ? Le interesan los asuntos ambientales ? Mongaby esta buscando voluntarios interesados en traducir articulos del Ingles al Español. El trabajo de traduccion sera acreditado. Si les interesa apoyarnos, por favor cominiquense con Rhett.





Las selvas

Los bosques lluviosos
La Estructura
La Diversidad
El dosel
El suelo
El bosque líquido
Las indígenas
Deforestación
Consecuencias
Cómo conservar
Amazonia
Borneo
Congo
Para los niños
Otras lenguas
Fotos
Noticias


Página de inicio
Noticias ambientales
La selva
Pescados tropicales
Fotos
Para niños
Madagascar
Lenguas
Acerca de
Ayuda
Contacto RSS/XML







Página de inicio |  Noticias ambientales |  La selva |  Pescados tropicales |  Fotografías |  Para niños  |  Madagascar |  Ayuda  |  Acerca de  |  Inglés



Copyright Rhett Butler 2009