Transoceánica highway in Peru’s Madre de Dios
La cuenca del Amazonas tiene 96.5 mil de kilómetros de caminos, de los cuales cerca de dos-tercios no están pavimentados, así lo reporta un nuevo atlas comprehensivo de la región, la cuál contiene la selva más grande del mundo.
El reporte, publicado en Español por la Red Amazónica de Información Socioambiental Georreferenciada (RAISG), un grupo de 11 organizaciones de la sociedad civil e instituciones de investigación en ocho países y un departamento, fue publicado esta semana para coincidir con las charlas climáticas en Doha, dónde los bosques tropicales — especialmente el Amazonas — han sido el escenario principal por su potencial rol en ayudar a mitigar el cambio climático.
El atlas señala que el 71 por ciento de los caminos de la región están en Brazil, seguido por Perú (6.2 por ciento) y Bolivia (4.5 por ciento). La Guayana Francesa tiene muy pocos. Ecuador tiene la mayor densidad de caminos, muchos de los cuales son usados para la exploración de petróleo.
El reporte destaca los caminos debido a su tradicional grán relación con la deforestación. Los caminos permiten el acceso a los colonos, especuladores de tierras, ganaderos, granjeros, y mineros y madereros ilegales. Estos caminos frecuentemente son construídos por industrias de extracción que impulsan la deforestación: minería, explotación de la energía, y la tala comercial.
El reporte señala varios proyectos viales recientes que han generado preocupación entre los ambientalistas y los grupos de derechos indígenas. Por ejemplo, la carretera Transoceánica que ahora une la Amazonia Brasileña con los puertos del Pacífico en Perú ha sido ligada a un fuerte aumento de la tala y la minería en la región de Madre de Dios, en Perú. Mientras tanto, un controversial proyecto vial en Bolivia habría separado la zona forestal del TIPNIS, que es un área importante para la conservación y los grupos indígenas, hasta que fué cancelado a principios de este año.
El atlas también señala otros desarrollos en el Amazonas, incluyendo la expansión de la exploración y la extracción de petróleo y gas, una proliferación en proyectos hidroeléctricos, y un auge de la minería.
CITATION: RAISG 2012. Amazonía bajo presión [PDF-Spanish}