Según informa Survival International. Brasil ha lanzado una campaña militar para desalojar a los taladores ilegales que trabajan al borde de la reserva indígena en la que habita el pueblo Awá. Los Awá viven en la selva amazónica, en la zona noreste de Brasil, también son conocidos como Guajá y tan sólo son 450. Una cuarta parte de la tribu ha elegido voluntariamente vivir en aislamiento.
El ejército brasileño ha enviado a cientos de soldados, además de tanques y helicópteros, para desmantelar los campamentos ilegales de explotación forestal. Según Survival International, se han cerrado ocho aserraderos en la región. La campaña actual ha tenido lugar después de que 50.000 personas pidieran al Ministro de Justicia brasileño que actuara. Además, el año pasado, un juez brasileño, Jirair Aram Meguerian, ordenó que todos los forasteros abandonaran el territorio Awá en marzo de este año.
Los problemas actuales para los Awá empezaron el los 60 cuando se construyó una vía de tren cerca de su territorio para explotar hierro de la mina Carajas. La mina y la vía del tren llevaron consigo a colonizadores que devastaron al pueblo indígena con enfermedades y conflictos. A pesar de que se estableciera una reserva indígena en 2003, los Awá siguen enfrentándose a incontables invasiones por parte de leñadores ilegales, que incluyen violencia y asesinatos. Survival International, que lleva tiempo organizando campañas para que el gobierno ayude a los Awá, ha nombrado a esta tribu como “la más amenazada del mundo”. Más de 50.000 personas han firmado una petición para el Ministro de Justicia de Brasil.
Aun así, Survival International afirma que el ejército debe entrar en la reserva indígena y desalojar a todos los taladores y hacendados del parque.
Soldados brasileños se encuentran con la deforestación ilegal en el Amazonas. Foto de: Exército Brasileiro.