Los activistas medioambientales han puesto en marcha una gran campaña en contra de 20 de las mayores empresas alimenticias de aperitivos que utilizan el aceite de palma en sus productos. La campaña, liderada por la Red de Acción de la selva tropical (RAN en inglés) afirma que los gigantes de la alimentación hacen que el aceite de palma que usan impulse la deforestación o empeore los conflictos sociales.
La campaña, iniciada hoy con la publicación de un informe y una protesta en la Junta Directiva de Chicago, donde los activistas de la RAN pusieron una pancarta que decía “Parad el conflicto del aceite de palma, no a las selvas tropicales”, habla de la disminución de las poblaciones de orangutanes, las emisiones de gases de efecto invernadero procedentes de la conversión de los bosques tropicales y turberas en plantaciones, los abusos laborales, y los enfrentamientos violentos entre las comunidades y los promotores como consecuencias negativas de la expansión desenfrenada del aceite de palma. La RAN asegura que estos problemas presentan riesgos considerables para las marcas líderes. Algunas de ellas son: Conagra Foods, Dunkin ‘Donuts, General Mills, PepsiCo, Hormel Foods, y Krispy Kreme. Si bien muchas de estas empresas se han comprometido a usar sólo aceite de palma certificado por la Mesa Redonda del Aceite de Palma Sostenible (RSPO en inglés) con plazo de hasta 2015, el informe sostiene que la RSPO no está haciendo lo suficiente para proteger los bosques o para asegurar que no haya conflictos sobre el aceite de palma
“Mientras que algunas empresas están empezando a tomar medidas para abordar el problema del aceite de palma, ninguna de ellas ha adoptado y aplicado plenamente las garantías adecuadas para eliminar el aceite de palma en sus cadenas de suministro y la contaminación de sus productos”, dice el informe. “A través de sus cadenas de suministro, estas grandes empresas mundiales de alimentación tienen el poder de impulsar una transformación en la forma de aceite de palma que comúnmente se produce. El aumento de la presión ciudadana y de los consumidores sobre estas empresas es un ingrediente clave para el éxito”.
Otras campañas de consumo de la RAN tuvieron éxito en el pasado, lo que ha llevado a las empresas a adoptar políticas más estrictas de abastecimiento de la madera, papel y otros productos. Pero el aceite de palma ha sido un objetivo desafiante para los activistas en general, dada su alta rentabilidad y la ubicuidad como grasa de bajo coste. Además, los derivados de aceite de palma se pueden encontrar en la mitad de los alimentos procesados en supermercados los Estados Unidos, y pocas personas son conscientes de que los están consumiendo. Otro obstáculo mayor ha sido el hecho de que la gran mayoría del aceite de palma se consume en la India, Indonesia, China, Malasia y Pakistán, países que representan un gran mercado de este aceite.
Para los ecologistas, el uso extendido de aceite de palma en los productos de consumo en Occidente les da ventaja en sus campañas. Si pueden convencer a las compañías más grandes del mundo para que adopten criterios más estrictos de abastecimiento, y pagar una prima para un aceite de palma más ecológico, esperan que estas normas puedan ser mejores prácticas para los productores.
“El aceite de palma se encuentra en casi el 50 por ciento de los alimentos envasados en los estantes de las tiendas de comestibles, y trágicamente, también es la causa principal de la extinción del orangután y la destrucción de los bosques en Indonesia y Malasia. “El Snack Food 20 puede y debe resolver su problema con el conflicto del aceite de palma antes de que sea demasiado tarde para el gran simio rojo “, indica Gemma Tillack, defensora superior de Agroindustria de la RAN, en un comunicado. “La Red de Acción de la Selva Tropical ha desarrollado una hoja de ruta clara para las empresas, de manera que puedan eliminar el aceite de palma de sus productos, y estamos listos y dispuestos a trabajar con el Snack Food 20 ahora para que esto ocurra.”
La campaña llega en lo que podría ser un momento crucial para la industria del aceite de palma. En el plazo de dos meses, la Mesa Redonda del Aceite de Palma Sostenible (RSPO) convocará su reunión anual celebrada en Medan, Indonesia. Una parte de los productores de Malasia está amenazando con utilizar esta reunión como una plataforma para abandonar la RSPO y unirse a un nuevo plan respaldado por el gobierno de Malasia, mencionando la insatisfacción con el proceso de certificación y primas bajas para el aceite de palma certificado Potencialmente, este éxodo podría debilitar la iniciativa justo después de que revisara sus criterios y de que se viera su récord de captación.
Por tanto, ni la RAN ni Greenpeace, que también publicaron un informe sobre aceite de palma, están pidiendo a las empresas a abandonar la RSPO, que ofrece garantías ambientales más fuertes que el estándar propuesto de Malasia. La diferencia es que estas organizaciones piden a las empresas que establezcan políticas que vayan más allá de las normas de la RSPO. Y están tratando de reunir a los consumidores para que hagan lo mismo.
“Las empresas que quieran comprar sólo aceite de palma responsable deben adoptar las políticas independientes y globales de adquisición de aceite de palma, que van más allá de las normas de la RSPO”, afirma el reporte de la RAN. “Resolver el problema del aceite de palma requiere de la construcción pública fuerte y la demanda del mercado para el aceite de palma responsable y la eliminación de la demanda del aceite de palma. El objetivo es crear puntos de inflexión que incrementen la viabilidad económica del aceite de palma responsable y transformar la infraestructura global de las cadenas de suministro de aceite de palma”.
En respuesta, la RSPO calificó el informe de RAN como “un escaparate de las consecuencias más destructivas y devastadoras del aceite de palma producido de manera no sostenible o convencional.”
En un comunicado por correo electrónico a Mongabay.com, el cuerpo del aceite de palma concluye que “La RSPO se creó como una solución para abordar exactamente estos inconvenientes”.
“El informe señala puntos mucho más importantes para que el sector sea más sostenible – la mayoría de los cuales están incrustados en los Principios y Criterios de la RSPO, y también en el Código de Conducta. Esto incluye toda la gama de cuestiones ambientales y sociales, que exigen (entre otros) el uso del consentimiento libre, previo e informado para desarrollar nuevas plantaciones en tierras de los pueblos locales, donde se puede demostrar que hay derechos legales, consuetudinarios o de usuario. ”
La deforestación causada por la producción de aceite de palma en Borneo. Pulsa en la imagen para ver más fotos
RAN: aceite de palma Conflicto septiembre 2013.