Noticias ambientales

¿Cómo coexisten los felinos de Sumatra?

Al menos seis especies de felinos viven, y al parecer armoniosamente, en la isla indonesia de Sumatra. El tigre de Sumatra (Panthera tigris sumatrae) está en peligro crítico de extinción y varias de las otras especies de felinos de la isla son especies amenazadas, según la UICN. Pero con la excepción del tigre de Sumatra, se sabe poco acerca de las diferentes distribuciones de los felinos y sus preferencias de hábitat. Un estudio estudio reciente publicado en la revista científica Journal of Zoology examina cómo cinco de las especies de felinos de Sumatra consiguen coexistir y las implicancias para su conservación en una isla con tasas altas de pérdida de bosque y degradación de hábitat.

 

A Sumatran tiger captured by camera trap. Photo credit: WWF-KemenLHK.
Un tigre de Sumatra fotografiado por una cámara trampa. Foto: WWF-KemenLHK.

“[Los felinos] desempeñan un papel significativo ecológicamente como depredadores”, le explicó a mongabay.com Sunarto Sunarto, ecologista de Virginia Tech y la WWF Indonesia e investigador principal del estudio. “Tienen control e influencia sobre la cantidad de población y también sobre el comportamiento de otros animales, especialmente sobre el grupo de sus presas potenciales, y esto afecta además a la vegetación y al ecosistema en general, incluyendo el paisaje”.

Las cámaras trampas, unas herramientas útiles para documentar especies tímidas y sigilosas, se han usado activamente en la investigación de tigres en Sumatra central durante varios años. Sunarto y sus colegas utilizaron datos recolectados por las cámaras trampas instaladas principalmente para la investigación de tigres. Esto incluye fotografías no solo de tigres y cachorros de tigres, sino también fotografías “accidentales” de animales de presa y otros carnívoros.

Part of the study area in central Sumatra. Photo credit: WWF-KemenLHK.
Parte del área del estudio en Sumatra central. Foto: WWF-KemenLHK.

El estudio se llevó a cabo en un área de 3 millones de hectáreas de Sumatra central que incluye cinco áreas protegidas importantes. Los investigadores instalaron 104 estaciones de toma en cuadros predeterminados en cinco áreas forestales (tres dentro de las áreas protegidas y dos afuera) y dejaron las cámaras activas constantemente durante tres meses. Además instalaron otras 65 cámaras trampa de manera oportunista, que grabaron continuamente entre uno y tres meses. Recolectaron fotografías de un total de alrededor de 13 000 noches.

En cada una de las cinco áreas de bosques los investigadores calcularon la “tasa de trampa” (una medida de nivel de actividad) para felinos, otros carnívoros, presas potenciales y humanos. Reunieron información sobre el hábitat alrededor de cada cámara a través de software de mapeo y la utilizaron para hacer modelos del uso del hábitat de cada especie de felino. Luego emplearon estos modelos para comparar cómo las especies de felinos usaron los diferentes hábitats a lo largo del tiempo.

Las fotos confirmaron la presencia de cinco especies de felinos en el área del estudio: tigres de Sumatra, panteras nebulosas de Borneo (Neofelis diardiCatopuma temminckii), gatos jaspeados (Pardofelis marmorata) y gatos de Bengala (Prionailurus bengalensis).

A marbled cat, seemingly aware of the camera trap taking its photo. Photo credit: WWF-Indonesia/PHKA.
Un gato jaspeado, aparentemente consciente de la presencia de la cámara trampa que lo está fotografiando. Foto: WWF-Indonesia/PHKA.
A marbled cat, captured in the early hours of the morning. Photo credit: WWF-KemenLHK.
Un gato jaspeado, fotografiado en las primeras horas de la mañana. Foto: WWF-KemenLHK.

Las panteras nebulosas y los gatos de Bengala estuvieron presentes y distribuidos en los cinco bloques de muestra, los gatos jaspeados en cuatro, los tigres en tres y los gatos dorados solamente en dos.

Las cinco especies fueron fotografiadas en solo una de las áreas protegidas: la reserva Rimbang Baling Wildlife Reserve. Se registraron cuatro especies en las otras dos áreas protegidas y en una de las áreas no protegidas. Y solamente dos especies, las panteras nebulosas y los gatos de bengala, se registraron en la otra área no protegida.

Los investigadores plantearon la hipótesis de que las especies de felinos de tamaño similar podrían evitarse entre sí, a menos que tuvieran características morfológicas o capacidades físicas diferentes que les permitieran cazar presas de diferentes especies o utilizar diferentes áreas del hábitat.

A Sunda clouded leopard, captured at night by camera trap. Photo credit: WWF-KemenLHK.
Una pantera nebulosa de Borneo, fotografiada de noche por una cámara trampa. Foto: WWF-KemenLHK.
A Sunda clouded leopard captured by camera trap. Photo credit: WWF-KemenLHK.
Una pantera nebulosa de Borneo fotografiada por una cámara trampa. Foto: WWF-KemenLHK.

Como se predijo, las especies de masa corporal similar fueron los que menos coincidieron en sus rangos de hábitat. Por ejemplo, el tigre, el más grande de los felinos, coincidió mínimamente con el felino que le sigue en tamaño, la pantera nebulosa, y el gato dorado tuvo la siguiente tasa menor de coincidencia con la especie más similar en tamaño, el gato de Bengala.

Para explicar sus resultados, los investigadores describen seis mecanismos que los felinos podrían usar para evitar la competencia y coexistir pacíficamente: frecuentar lugares diferentes , frecuentar elevaciones diferentes, pasar tiempo en los árboles en lugar de en el suelo, hacer uso de otras características de micro hábitat diferentes, estar activos en momentos diferentes y tener como objetivo presas de diferentes tamaños.

Los investigadores compararon pares de especies de felinos y contabilizaron cuáles de los seis mecanismos parecen utilizar para compartir el hábitat. Por ejemplo, los tigres, que trepan árboles solo ocasionalmente, podrían evitar la competencia con las panteras nebulosas que son excelentes trepadoras y excelentes cazadoras cuando están en los árboles. Y los gatos jespados parecen preferir elevaciones mayores que los gatos de Bengala, las especies de tamaño más similar.

A leopard cat, captured uncharacteristically during the day by camera trap. Note the camera trap on the tree trunk in the background. Photo credit: WWF_PHKA_VATech.
Un gato de Bengala, fotografiado de manera inusual durante el día por una cámata trampa. Note la cámara trampa en el tronco del árbol en la parte de atrás. Foto: WWF_PHKA_VATech.
An Asiatic golden cat captured by camera trap. Photo credit: Tiger Team_WWF.
Un gato dorado asiático fotografiado por una cámara trampa. Foto: Tiger Team_WWF.

Los autores escriben que su estudio tiene implicancias importantes para la conservación y el manejo de las diferentes especies de felinos en el área del estudio y posiblemente para otras áreas. Por ejemplo, descubrieron que tanto tigres como gatos de Bengala pueden vivir en densidades altas y en bosques de tierras bajas, dejando potencialmente poco espacio para otros felinos. Si las áreas protegidas en elevaciones altas no están disponibles, las especies de felinos más pequeños podrían tener problemas para persistir.

Los autores notan que los bosques que quedan en Sumatra, incluyendo los degradados, todavía tienen un valor alto de conservación para felinos y otras especies silvestres.

“[Incluso] el tigre de Sumatra en peligro crítico de extinción puede lograr una abundancia alta en dichos bosques, probablemente porque las presas todavía se mantienen en estas áreas”, escriben los autores. “[A pesar] de la idea generalizada de que los animales de bosques tropicales necesitan bosques intactos, sugerimos que, además de áreas forestales intactas, la protección de bosques secundarios e incluso degradados es altamente beneficioso para mantener a los felinos cada vez más amenazados de Sumatra”.

An adult male Sumatran tiger captured by camera trap. Photo credit: WWF_PHKA_VATech.
Un tigre de Sumatra macho adulto fotografiado por una cámara trampa. Foto: WWF_PHKA_VATech.

Citas

Sunarto, S., Kelly, M. J., Parakkasi, K. and Hutajulu, M. B. (2015), Cat coexistence in central Sumatra: ecological characteristics, spatial and temporal overlap, and implications for management. Journal of Zoology, 296: 104–115. doi: 10.1111/jzo.12218

 

Salir de la versión móvil