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Los cementerios quilombolas robados en la Amazonía y la investigación que lo reveló todo | VIDEO

  • El aceite de palma es un ingrediente omnipresente en productos que van desde el chocolate hasta galletas o labiales, pero su producción en un rincón de la Amazonía brasileña puede estar vinculada a un acaparamiento de tierras de comunidades tradicionales, entre ellas cementerios.
  • Los fiscales del estado de Pará han citado la investigación de Mongabay en sus procedimientos que examinan los conflictos entre las comunidades quilombolas que buscan el reconocimiento de su territorio y las zonas ocupadas por Agropalma, la segunda empresa exportadora de aceite de palma más grande del país.

En noviembre de 2021, fui al estado de Pará, en la Amazonía brasileña, para investigar las acusaciones de acaparamiento de tierras en territorios tradicionales, lanzadas contra uno de los principales exportadores de aceite de palma de Brasil. La fecha no fue fortuita. Estuve allí para presenciar un momento histórico, el Día de los Muertos, cuando los quilombolas, descendientes de esclavos afrobrasileños fugitivos, encendían velas para sus ancestros en el Cementerio de Nuestra Señora de la Batalla después de décadas de no haberlo hecho.

¿Por qué no habían podido ir allí en tanto tiempo? Porque este cementerio está ubicado en un área oficialmente ocupada por la compañía Agropalma, el segundo exportador de aceite de palma más grande del país. Forma parte de la “reserva legal” de la empresa, la parte del terreno que un propietario privado debe mantener en su estado natural, según se reveló en una investigación que duró un año.

“Cuatro de nuestros hijos están enterrados aquí… Luego [de que la empresa] se hiciera cargo, no nos han permitido venir más”, eso me dice entre lágrimas el agricultor Benonias Batista, mientras les enciende velas a sus hijos en el Cementerio de Nuestra Señora de la Batalla.

Los quilombolas también acusan a la empresa de plantar palmas aceiteras sobre las tubas del Cementerio de Livramento y dicen que solo queda un cuarto de este en la actualidad. “Plantaron palmas aceiteras encima de la tumba de [mi abuela]”, me cuenta Raimundo Serrão en el cementerio sobre la orilla del río Acará, donde está rodeado por la plantación de palmas aceiteras de Agropalma.

En este video es posible conocer el viaje que se realizó para investigar estas acusaciones de acaparamiento de tierras y otros problemas relacionados con el aceite de palma denunciados por las comunidades locales, como la contaminación del agua por los efluentes de aceite de palma de Agropalma y las amenazas de desplazamiento producto de la pavimentación de una carretera de camiones para la industria del aceite de palma.

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Los cementerios que se muestran en el video están localizados en una zona que ha sido objeto de una batalla legal durante seis años. Los fiscales y defensores públicos del estado de Pará acusan a Agropalma de fraude, incluida la creación de una oficina de registro de tierras falsa, para ocupar una superficie total de unas 58 000 hectáreas. Los títulos de propiedad de Agropalma sobre estas áreas fueron cancelados por fallos judiciales. Sin embargo, a pesar de haber admitido que los títulos habían sido falsificados, la empresa asegura que no estuvo involucrada en el plan y pretende volver a comprar las tierras al estado.

Mientras tanto, el reconocimiento de los derechos sobre las tierras de los quilombolas sigue sin resolverse, tal como reveló esta investigación.

La fiscal del estado Ione Nakamura, quien ha llevado el caso desde 2021, me dijo en un mensaje telefónico que la investigación de Mongabay era muy “minuciosa y completa” y que la había incluido en los procedimientos que analizan los conflictos entre las comunidades quilombolas que buscan reconocimiento de su territorio y de las zonas ocupadas por Agropalma “para respaldar futuros litigios”.

Nakamura afirmó que también envió la investigación a otros fiscales que están estudiando los impactos medioambientales causados por el uso de plaguicidas en las plantaciones de palma aceitera, para “que se agregue a esos procedimientos que investigan los impactos medioambientales en esos territorios”.

El año pasado, una investigación que duró 18 meses que publiqué sobre la contaminación causada por el aceite de palma en Pará ayudó a los fiscales federales a obtener una decisión judicial, para examinar los impactos medioambientales del uso de plaguicidas en las plantaciones de palma aceitera en las comunidades indígenas y el medioambiente en el estado. Esta investigación ganó el segundo premio de la Sociedad de Periodistas Medioambientales de Estados Unidos a la excelencia en periodismo de investigación y el tercer premio en los Fetisov Awards a excelencia en periodismo medioambiental.

* Imagen principal: Miembros de la comunidad quilombolas atraviesan el río para llegar al Cementerio de Nuestra Señora de la Batalla el Día de los Muertos. Foto: cortesía de Elielson Pereira da Silva.

* Karla Mendes es editora de plantilla para Mongabay en Brasil. Sígala en Twitter: @karlamendes

* Artículo original: https://news.mongabay.com/2022/12/video-stolen-quilombola-cemeteries-in-the-amazon-and-the-probe-that-revealed-it-all/

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