Noticias ambientales

Expedición virtual: El Soldado, un pequeño estero con un impresionante paisaje en el noroeste de México

Vista aérea del estero El Soldado. Foto: Guillermo Soberón

  • A pesar de sus pequeñas dimensiones, el estero El Soldado es considerado un sitio único en el noroeste de México por la amplia variedad de especies que lo habitan.

El humedal es pequeño en extensión, pero resguarda una gran biodiversidad. Al sur del estado de Sonora, en el noroeste de México, el estero El Soldado atrae miradas por los cientos de aves que habitan, sobrevuelan y se reflejan entre los tonos azules y verdes de su espejo de agua.

A unos 20 kilómetros de la ciudad de Guaymas, este Sitio Ramsar de 349.89 hectáreas, ubicado dentro de un Área Natural Protegida declarada en 2006, es una laguna costera reconocida como única entre los esteros del Golfo de California. Es el hogar de 408 especies, de las que 121 son invertebrados, 80 son peces, 75 aves, 11 reptiles, 9 anfibios, 9 mamíferos y 103 plantas.

Además, destaca por contar con una comunidad de manglar integrada por tres especies: el mangle negro (Avicennia germinans), que es el más abundante de la zona y que forma pequeños bosques tierra adentro; mangle rojo (Rhizophora mangle), ubicado de forma adyacente al cuerpo de agua, y mangle blanco (Laguncularia racemosa), vecino del mangle rojo en comunidades más sumergidas.

Hoy 2 de febrero se conmemora el Día Mundial de los Humedales, creado en 1997 para hacer conciencia sobre la importancia de estos ecosistemas para el planeta. En Mongabay Latam te traemos un recorrido por el asombroso paisaje de uno de ellos, en compañía de Guillermo Soberón, fotógrafo y videógrafo originario de la zona, quien capturó la belleza de los diversos escenarios de este lugar durante un recorrido de cuatro días.

Primera parada: el paisaje

De acuerdo con la Comisión Nacional de Áreas Naturales Protegidas (Conanp), el estero El Soldado es el más saludable y floreciente en el extremo norte del Golfo de California. Está conformado por seis sistemas naturales: lagunar costero, estuarino, comunidad de manglar, dunas costeras, matorral espinoso y parte de la zona litoral que colinda con el estero.

“Hay mucho que ver: desde las aves, los atardeceres, la luna y toda la diversidad. Cada vez que vas es distinto porque, siendo un estero, cambia mucho con cada marea y cada temporada del año”, dice Soberón, quien tiene una larga historia con el estero, pues su padre es oceanógrafo y promotor de la protección de este sitio.

La belleza de su paisaje está enmarcada por el cerro del Soldado, con un espacio aprovechado para actividades ecoturísticas, senderismo y rutas en bicicleta, además de paseos en kayak.

Vista aérea del bosque de manglar. Foto: Guillermo Soberón

 

El estero El Soldado y el Cerro Bacochibampo. Foto: Guillermo Soberón

 

La neblina sobre el estero. Foto: Guillermo Soberón

 

La boca del estero es dinámica y en comunicación permanente con el mar. Foto: Guillermo Soberón

 

Los colores del atardecer sobre la boca del estero. Foto: Guillermo Soberón

Lee más | Nación Comcaac: el grupo tortuguero indígena que está salvando a las tortugas marinas en el noroeste de México

Segunda parada: las aves

Además de la presencia de las aves residentes, en este refugio natural se ha podido contabilizar más de 120 especies debido a la llegada anual de aves migratorias, pues aquí encuentran alimento, reposo y espacio para anidar. Este fue el motivo por el que la Comisión Nacional para la Conservación de la Biodiversidad (Conabio) decretó al estero como un Área de Importancia para la Conservación de las Aves (AICA No. 78).

Grupo de pelícanos blancos americanos (Pelecanus erythrorynchos) en las aguas oscuras del estero. Foto: Guillermo Soberón

 

Martinete coronado (Nyctanassa violacea). Foto: Guillermo Soberón

 

Garceta grande (Ardea alba). Foto: Guillermo Soberón

De acuerdo con los registros del Centro de Ecología y Desarrollo Sustentable del Estado de Sonora (Cedes), el estero es visitado en verano por aves migratorias en grupos de 500 a 800 individuos y, durante el invierno, parvadas de hasta 3000 individuos procedentes de Canadá y  Estados Unidos; o del sur del continente, desde Chile o Perú.

Pelícano pardo (Pelecanus occidentalis). Foto: Guillermo Soberón

 

Ibis blanco americano (Eudocimus albus). Foto: Guillermo Soberón

 

Gaviota occidental (Larus occidentalis). Foto: Guillermo Soberón

Nueve de las aves del estero cuentan con protección especial: la garza ceniza (Ardea herodias), el halcón peregrino (Falco peregrinus), la gaviota patas amarillas (Larus livens), la cigüeña coco (Mycteria americana), el rascón limícola (Rallus limicola), los charranes mínimo (Sterna antillarum) y elegante (Sterna elegans), la garza rojiza (Egretta rufescens) y la gaviota ploma (Larus heermanni); estas dos últimas, además, se encuentran en la categoría de casi amenazadas en la lista roja de la Unión Internacional para la Conservación de la Naturaleza (UICN).

Lee más | Expedición virtual en el desierto de Sonora: un viaje por la Reserva de la Biósfera El Pinacate y el Gran Desierto de Altar

Tercera parada: su espejo de agua

El espejo de agua tiene una superficie de 185 hectáreas y está comunicado con la bahía de San Francisco. Para Soberón fue especial el trabajo en la zona pues, a pesar de conocerla desde hace muchos años, encontró espacios que no había explorado antes.

“En el espejo de agua, que es la parte más amplia del estero, el agua es muy somera y es donde ves más aves”, explica el fotógrafo. “Es un punto muy interesante para eso, ya que el manglar también es un refugio importante y muy estratégico, entonces encuentras una gran diversidad de ellas: me sorprendieron, porque no esperaba tener tanta cercanía con las aves como logré tenerla”.

Vista del cerro y el espejo de agua. Foto: Guillermo Soberón

 

El estero y el espejo ofrecen una vista impresionante del atardecer. Foto: Guillermo Soberón

 

La luna llena sobre el espejo de agua. Foto: Guillermo Soberón

Lee más | Expedición virtual: así es la vida bajo el mar en el Archipiélago de Humboldt en Chile | FOTOS

Cuarta parada: la vegetación

Los manglares son esenciales para las aves terrestres y acuáticas del estero, pues ahí se reproducen o reposan entre su follaje y su raíces, además de alimentarse de los organismos que se encuentran en ellos.

Una acercamiento a los manglares. Foto: Guillermo Soberón

 

Los bosques de manglar en el estero El Soldado. Foto: Guillermo Soberón

 

En la zona predominan los matorrales y arbustos, pero también hay diversidad de cactáceas, como la choya (Cylindropuntia). Foto: Guillermo Soberón

Quinta parada: las presiones

Con el paso de los años, el crecimiento urbano ha rodeado una parte del estero. Esto, de acuerdo con la Conanp, significa presiones muy fuertes para el ecosistema. Además del desarrollo turístico habitacional, que incluye una marina, un campo de golf y al menos tres centenares de casas habitación, también hay carreteras y construcciones más recientes.

“No soy quién para hablar de impactos ambientales, pero creo que es de sentido común que este desarrollo que se está dando es potencialmente peligroso”, agrega el fotógrafo. El estero es aledaño a condominios y se están haciendo desarrollos en esa área cerca del estero que, aunque no transgreden los límites del área natural protegida, sí me preocuparía que toda esta urbanización ahuyentara a las especies marinas o resultara en contaminación”.

Condominios aledaños al estero El Soldado. Foto: Guillermo Soberón

 

Carretera San Carlos – Guaymas. Foto: Guillermo Soberón

“Me ilusionaría que, tal vez, si la gente ve lo importante y lo bello que es el estero, se preocupara por él, en caso de que hubiera una eventualidad, y que lo protegiera”, concluye Soberón.

*Imagen principal: Vista aérea del estero El Soldado, en Sonora, México. Foto: Guillermo Soberón

———

Videos  | Perú: El devastador impacto del derrame de petróleo

Si quieres conocer más sobre la situación ambiental en Latinoamérica, puedes revisar nuestra colección de artículos.

YouTube video player

Facebook | Manejo forestal: el camino para construir un futuro lejos de la amapola

Salir de la versión móvil