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#EnCorto: más de 20 mil registros de animales con cámaras trampa en la Orinoquía y el Magdalena Medio, en Colombia

Puma. (Puma concolor). Foto: Instituto Humboldt Colombia.

Puma. (Puma concolor). Foto: Instituto Humboldt Colombia.

  • El Instituto Humboldt realizó uno de los monitoreos de biodiversidad más completos que se han hecho con cámaras trampa en las regiones del Magdalena Medio y la Orinoquía. Sus resultados confirmaron la presencia de 232 especies de aves, mamíferos y reptiles.

El Instituto de Investigación de Recursos Biológicos Alexander von Humboldt instaló 600 cámaras en diferentes lugares del Magdalena Medio y la Orinoquía a finales del 2020. Este ejercicio de fototrampeo simultáneo —que obtuvo numerosas fotografías y videos— ha sido uno de los más grandes que se ha realizado en Colombia.

Sus resultados arrojaron 20 332 registros de diferentes animales y permitieron la identificación de 232 especies: 173 de aves, 54 de mamíferos y 5 especies de reptiles.

Entre sus hallazgos, los especialistas de la institución destacan que la identificación de especies amenazadas o endémicas habla de un buen estado de conservación en varios de los sitios muestreados, porque estas especies son de las más sensibles ante la intervención humana.

¿Qué más mostraron sus registros? Te lo explicamos en tres claves.

Caracara quebrantahuesos. (Caracara cheriway). Foto: Instituto Humboldt Colombia.
Caracara quebrantahuesos (Caracara cheriway). Foto: Instituto Humboldt Colombia.

Los resultados

Las cámaras trampa se instalan en lugares estratégicos de tránsito de animales y se activan automáticamente para tomar fotografías o videos. Sus capturas se convierten en el material que los investigadores utilizan para estudiar la biodiversidad local. Así, su función es ideal para recolectar datos sin interferir con la fauna y, en algunos casos, sirve para identificar individualmente a los animales, pues al cotejar varias fotografías se pueden encontrar características específicas de cada individuo como manchas y cicatrices.

De esta forma, el Instituto Humboldt obtuvo información de 567 de las 600 cámaras trampa que estuvieron funcionando entre octubre de 2020 y enero del 2021. Fueron 315 170 fotografías, de las cuales 124 919 contenían registros de fauna, incluyendo animales domésticos y la presencia de humanos.

A pesar del gran número de cámaras, los territorios a analizar eran tan grandes que los investigadores debieron enfocarse en sitios particulares.

Zorro cangrejero (Cerdocyon thous). Foto: Instituto Humboldt Colombia.
Zorro cangrejero (Cerdocyon thous). Foto: Instituto Humboldt Colombia.

Ampliar el conocimiento

Las cámaras trampa resultan una herramienta muy útil para el estudio de los mamíferos terrestres, por ejemplo, para comprobar lo que los modelos de distribución predicen, para incorporar nuevos registros o comportamientos no descritos.

Estas fueron algunas de las múltiples especies encontradas: en Magdalena Medio, se observaron seis de las que no se tenía registro en la zona estudiada, entre ellos el mono maicero (Cebus versicolor) y la zarigüeya gris (Philander opossum); también se registró una especie En Peligro de extinción (EN), el mono cariblanco (Cebus versicolor), y dos especies Casi Amenazadas (NT), el margay (Leopardus wiedii) y la nutria de río (Lontra longicaudis).

Danta (Tapirus terrestris). Foto: Instituto Humboldt Colombia.
Danta (Tapirus terrestris). Foto: Instituto Humboldt Colombia.

En el Piedemonte de Casanare, de las 34 especies de mamíferos observadas, 19 de ellas todavía no estaban en los registros aunque se presumía que podían tener presencia en la zona, como la zarigüeya lanuda (Caluromys lanatus) y el puercoespín arborícola (Coendou prehensilis).

En el Piedemonte del Meta se registraron tres especies en estado Vulnerable (VU), como el oso hormiguero (Myrmecophaga tridactyla) y el armadillo gigante (Priodontes maximus).

Por último, en la región del Río Tillavá se registraron tres especies en estado Vulnerable: el oso palmero (Myrmecophaga tridactyla), la danta (Tapirus terrestris) y el ocarro (Priodontes maximus), reconocido como el armadillo más grande del mundo.

Los objetivos

Angélica Diaz Pulido, investigadora del Programa de Evaluación y Monitoreo de la Biodiversidad del Instituto Humboldt, explicó que con el cúmulo de información obtenida los investigadores realizarán distintos análisis para saber dónde están ubicadas las especies en el territorio y así identificar dónde es más efectivo invertir en programas y estrategias de conservación.

“Estos datos y el análisis de la intervención humana en la biodiversidad nos sirven para identificar umbrales de pérdida de biodiversidad, corredores de conectividad en estos territorios a una escala mucho más fina de lo que podríamos hacer solo con información cartográfica”, concluyó la especialista.

Ocelote. (Leopardus pardalis). Foto: Instituto Humboldt Colombia.
Ocelote (Leopardus pardalis). Foto: Instituto Humboldt Colombia.

Lee el reportaje completo aquí.

*Imagen principal: Puma captado por una cámara trampa (Puma concolor). Foto: Instituto Humboldt Colombia.

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