Gato Andino. © Jim Sanderson, PhD/Small Wild Cat Conservation Foundation
El escurridizo Gato Andino (Leopardus jacobita), que hasta finales de los años 90 era conocido sólo mediante escasas fotos, fue descubierto detrás de la cordillera de Los Andes, la cual le da su nombre. De acuerdo a los investigadores, el Gato Andino se asemeja en apariencia al leopardo de las nieves de Asia que vive a 3.000 metros de altitud (9.800 pies), con la diferencia que el Gato Andino tiene el tamaño de un gato doméstico. Sin embargo, los científicos han descubierto que este gato salvaje, que aparece en la lista roja de especies en peligro de extinción de la UICN, también habita la estepa patagónica en altitudes de tan sólo 650 metros (2.100 pies).
“Estos registros revelan las altitudes más bajas en las que se han encontrado Gatos Andinos” dijo Andrés Novaro, conservacionista de la Wildlife Conservation Society (WCS) y autor del informe que aparece en CATNews. “De acuerdo a estudios genéticos que están siendo llevados a cabo por Daniel Cossios, esta población parece representar un linaje evolutivo distinto de aquel que habita las tierras altas”.
Vizcacha montesa: la presa principal del Gato Andino. Foto: Alexandre Buisse. |
La presencia del Gato Andino se confirmó luego de realizar varias entrevistas, recolectar heces y analizar la piel de gatos cazados por locales. Los investigadores creen que el Gato Andino habita dónde esté su presa; la vizcacha montesa (Lagidium viscacia), un roedor que se asimila a un conejo y es de la familia de las chinchillas.
Es sorprendente que la estepa patagónica sea hogar de cuatro especies de gatos salvajes: el Gato Montés (Leopardus geoffroyi), el Gato de los pajonales (Leopardus pajeros), el jaguarundi (Puma yagouaroundi), y el Gato Andino, que es el que está en mayor peligro de extinción.
“Esta nueva población de Gatos Andinos es un descubrimiento importante ya que es una especie muy rara y escurridiza”, informó Mariana Varese, directora del WCS’s Latin America and Caribbean Program. “Determinar el área de distribución del Gato Andino en la estepa patagónica le va a permitir a los conservacionistas crear los cimientos para futuros planes de conservación de la especie”.
El Gato Andino se enfrenta a miles de amenazas día a día, como los habitantes de la zona que los matan porque tienen la creencia que poseen poderes sobrenaturales y que son un peligro para el ganado, la actividad industrial como la perforación de pozos petrolíferos, la construcción de nuevas carreteras, la caza de vizcachas montesas para el consumo humano, y los cambios climáticos que generan el derretimiento de los glaciares de los cuales depende todo el ecosistema.
Existen aproximadamente 36 especies de gatos salvajes en el mundo. A más de la mitad, 22 de ellas, se las conoce como “gatos pequeños” los cuales son poco conocidos por la gente y ayudados por la comunidad de conservación.
Para más información sobre el Gato Andino y los esfuerzos por salvarlo: Small Cat Conservation Alliance.