Oso polar junto a los restos de una ballena. Tomado con una cámara remota. © National Geographic Entertainment. Foto: Florian Schulz
Aunque los científicos afirmen que existen innumerables especies amenazadas por los cambios climáticos, los osos polares son el símbolo mundial de la necesidad de frenar las emisiones de gases que provoca el efecto invernadero. Esto, quizás, no resulte sorprendente puesto que, aunque habiten en una región carente de humanos, los osos polares son animales conocidos por el común de la gente. Su pelaje blanco inmaculado contrasta con su habilidad para matar: son los predadores terrestres más grandes del mundo y esto los hace capaces de matar a una foca de un solo soplido. Inexplicablemente adorables cuando son cachorros se vuelven impactantes cuando crecen. Pero eso no es todo. Es más fácil tomar conciencia de los peligros del cambio climático al pensar en estos osos que en otras especies, ya que su hábitat se está derritiendo literalmente.
Pero, ¿cuál es la ciencia que existe detrás de estas víctimas de los cambios climáticos? En la última publicación de National Geographic. Susan McGrath aborda esta pregunta junto con la ayuda de algunos de los mejores expertos en osos polares. Mongabay.com le hizo algunas preguntas sobre su artículo.
Entrevista con Susan McGrath
Mongabay: Los osos polares se han transformado en un símbolo del cambio climático mundial ¿De qué forma tu artículo coincide o difiere con otras investigaciones sobre la situación de los osos polares?
Susan McGrath: El hecho de contar con el aporte de los mejores científicos de osos polares de todo el mundo para redactar el artículo, me permitió presentar el caso sin exageraciones y de la manera más acertada. La situación de los osos polares es tan grave, incluso inquietante, que hasta los factores más simples harían convincente el artículo.
Mongabay: ¿De qué forma la reducción del hielo marino amenaza la vida de los osos polares?
Familia de osos polares © National Geographic Entertainment. Foto: Florian Schulz |
Susan McGrath: Los osos polares se han adaptado a vivir en el hielo y a cazar focas y otras presas durante todo el año. Sus enormes cuerpos necesitan grandes cantidades de energía para sobrevivir. Si se alimentan bien durante el invierno y la primavera, acumulan gruesas capas de grasa que les permiten sobrevivir durante el verano, cuando la caza es mala.
El mejor hábitat para los osos polares son las capas de hielo más delgadas que se encuentran junto a la plataforma continental. Las focas hacen huecos en dichas capas para poder respirar y por los cuales suben cuando quieren descansar, lo que hace de este lugar un territorio de caza para osos. (Si bien los osos son buenos nadadores, ¡no pueden competir con las focas!)
Esta fina capa de hielo es precisamente la que se esta derritiendo año tras año. Como consecuencia, cientos de kilómetros de hielo se convirtieron en agua que separa la tierra de la gruesa y milenaria capa de hielo polar, y en ninguno de estos dos lugares existe comida para los osos.
Mongabay: ¿Cuáles son las otras especies amenazadas por el deshielo ártico?
Susan McGrath: Los científicos dicen que las focas oceladas y las morsas enfrentan el mismo peligro de extinción que los osos, ya que también dependen del hielo para vivir. Al calentarse las aguas del Ártico, muchos peces y otras criaturas acuáticas que provienen de aguas del sur migran hacia el norte y entran en el Ártico donde compiten con las especies del lugar. Así, toda la cadena alimenticia del Ártico puede estar amenazada.
Mongabay: Teniendo en cuenta la trayectoria de emisiones de gases actual, ¿Crees que el oso polar se extinguirá este siglo? , y si sobrevive ¿como sería la población?
Susan McGrath: Muchos científicos norteamericanos de osos polares como Ian Stirling, Andrew Derocher y Steven Amstrup opinan que eso depende de nosotros. Si el mundo sigue funcionando y contaminando de esta manera, el hielo del Ártico se derretirá verano tras verano hasta desparecer, en el 2050. Estamos a menos de 40 años de que eso suceda. Los osos polares desaparecerán.
Sin embargo, aún hay esperanzas.
Si pudiésemos ralentar el ritmo de los cambios y reducir la emisión de gases, algunas fracciones de hielo se mantendrían sin derretir y los osos podrían vivir en esas áreas. Si fuésemos persistentes con los cambios positivos el mundo se iría enfriando de a poco nuevamente y así, la placa de hielo aumentaría. Al haber un cambio favorable, la población de osos polares se empezaría a expander.
Mongabay: Junto con el derretimiento del hielo polar aparecieron varios gobiernos y compañías que buscan explotar las reservas de gas y petróleo del Ártico. ¿De qué forma esta industrialización del Ártico impacta en la vida de los osos polares y del resto de la vida salvaje?
Susan McGrath: La industrialización de un área salvaje causa la degradación y destrucción del hábitat. La explotación de petróleo y gas produce derrames de petróleo, tráfico de petroleros, ruidos nocivos, actividad humana y la utilización de maquinaria pesada. La cadena alimenticia se ve afectada en su totalidad: menos algas, menos consumidores de algas y menos peces pequeños para que coman los peces más grandes. Así sucesivamente hasta completar toda la cadena.
Cuando estudias un animal cuyo hábitat se esta derritiendo a pasos agigantados y a esto le agregas otros peligros, sólo estás acumulando certezas de que dicho animal se va a extinguir.
Mongabay: ¿Cuál es la mejor forma de salvar los osos polares?
Susan McGrath: Los osos polares están enfrentando la extinción por culpa de los trastornos climatológicos causados por el ser humano. Estos animales desaparecerán, a menos que tomemos una decisión y empecemos a dar pasos positivos para revertir esta situación.
Entonces, debemos ayudar a ahorrar energía en nuestros hogares y durante nuestra vida cotidiana. Conducir menos, apagar las luces cuando abandonamos un lugar, reemplazar focos incandescentes por fluorescentes compactos, desenchufar todos los cables de alimentación cuando no estemos utilizando los artefactos eléctricos y toda esa clase de cosas.
Quizás más importante, deberíamos transmitir un mensaje fuerte a nuestros representantes políticos para que vean que nos preocupamos por animales como los osos polares y que no queremos que simplemente desaparezcan. Más allá de nuestra ideología política individual, derecha, izquierda o central, debemos estar bien plantados. Esto significa dar pasos seguros para reducir el uso de combustibles fósiles.
Oso polar en su hábitat. © National Geographic Entertainment. Foto: Florian Schulz