Un nuevo estudio publicado en la revista científica estadounidense Proceedings of the National Academy of Sciences concluye que los chinos residentes al norte del río Huai verán reducida su esperanza de vida en 2.500 millones de años debido a la amplia utilización del carbón en la región.
Dicho estudio, en el cual se han implicado investigadores del Massachusetts Institute of Technology (MIT) de Boston (EE.UU), China e Israel, estima el impacto en la esperanza de vida de las partículas producidas por la calefacción alimentada por carbón. En el proceso, los autores idearon una regla de oro para los efectos sobre la contaminación del aire: “por cada 100 microgramos de partículas suspendidas por metro cúbico en la atmósfera, se reduce en tres años la esperanza de vida al nacer”, según un comunicado del MIT.
Los investigadores también compararon los efectos de la política energética sobre la esperanza de vida. Los habitantes del sur del río Huai — la “línea divisoria” convencional entre el norte y el sur en China — experimentaron tasas más bajas de mortalidad asociadas a enfermedades relacionadas con la exposición a las partículas. ¿Y por qué esta diferencia? Pues porque el Gobierno proporcionó al norte del país carbón gratuito para calderas de combustible, no pudiéndose decir lo mismo del sur.
“No se trata de que el Gobierno se propusiera causar eso”, sentencia Michael Greenstone, coautor del estudio y economista del MIT. “Esa fue la consecuencia no deseada de una política que debía haber parecido muy sensata.”
“Hasta donde podemos contar, no existen otras políticas que sean diferentes al norte o al sur del río,” añadió, apuntando que son similares otros tipos de contaminación entre ambas regiones.
Barcazas que transportan carbón en Shanghai. Año 2006
Greenstone afirma que los resultados dan más peso si cabe a la necesidad de reducir el uso del carbón.
“Lo que este informe ayuda a revelar es que pueden haber razones locales e inmediatas para China y otros países en vías de desarrollo para depender menos de los combustibles fósiles. El planeta no va a resolver el problema de los gases de efecto invernadero sin la participación activa del gigante asiático. Esto debería darnos un motivo para empezar a actuar hoy.”
El estudio vio la luz después de que China adoptara un marco para limitar las emisiones de carbón. Actualmente limitado a un puñado de ciudades, el Gobierno chino espera que el programa pueda llegar a reducir las emisiones del país, las más altas de cualquier país de la Tierra.
CITA: Yuyu Chen, Avraham Ebenstein, Michael Greenstone, y Hongbin Li. Evidence on the impact of sustained exposure to air pollution on life expectancy from China’s Huai River policy. PNAS, 12 de Julio de 2013.