- Tras meses de polémica por los posibles impactos ambientales de esta obra de importancia para la seguridad nacional, Parques Nacionales y la Armada de Colombia llegaron a varios acuerdos. Las obras están próximas a comenzar.
- Muchos de los puntos controversiales quedaron zanjados, sin embargo, algunos científicos siguen inconformes con la decisión. Parques Nacionales considera que las modificaciones hechas al proyecto son positivas y que construir la subestación es importante para hacerle control a los delitos ambientales.
Desde 2016 se desató una fuerte polémica en el Parque Nacional Natural Gorgona, ubicado en el océano Pacífico colombiano. La decisión del Gobierno Nacional de construir una subestación de la Armada en la isla puso en alerta a los científicos quienes empezaron a cuestionar el lugar donde se pensaba construir y la instalación de un gran radar que podría afectar, entre otros, los sistemas de localización de las poblaciones de murciélagos.
Por otro lado, la Armada esperaba que los estudios y aprobaciones avanzaran lo más pronto posible pues el mar que rodea a la isla de Gorgona se había convertido en una ruta importante para el narcotráfico, la trata de personas, el contrabando de armas e incluso delitos ambientales como pesca ilegal y tráfico de especies y madera. A pesar de esto, Parques Nacionales, el comité Científico del Parque Gorgona y la Armada no pudieron llegar a un acuerdo. De hecho, el asunto se complicó tanto que duras y constantes críticas empezaron a darse entre todos los involucrados, a tal punto que los científicos enviaron varias cartas al entonces presidente Juan Manuel Santos, para que tomara una postura y zanjara la situación.
Finalmente, y casi dos años después de que se anunciara la construcción de la subestación, las partes se pusieron de acuerdo y las obras están próximas a comenzar.
- La isla colombiana de Gorgona fue declarada Parque Nacional Natural en 1984. Foto de Patrick del Castillo, PNN
Lee más | Colombia: un país que quiere sacar sus mares del olvido
Acuerdos en Gorgona
El asunto empezó a desenredarse en junio de este año tal como lo publicó Semana Sostenible. La directora de Parques Nacionales, Julia Miranda, manifestó en el artículo que “siempre he creído que la presencia permanente de la Armada nos va a fortalecer en nuestro ejercicio de autoridad ambiental, además del control que se hará de los demás temas ilícitos. Para nuestro trabajo es fundamental, no solo por Gorgona, también para Malpelo y para Sanquianga, entonces serán tres áreas protegidas del sistema de Parques Nacionales que se verán beneficiadas por la presencia de la Armada, por la tecnología que va a haber, con la operación del radar, de la antena de comunicaciones”.
Evelio Enrique Ramírez, vicealmirante y jefe de operaciones de la Armada, le dijo a Mongabay Latam que el proyecto va muy adelantado en el tema de los permisos y que han ido solucionando unos temas ambientales que eran fundamentales para darle vía libre. “La zona es un punto neurálgico donde necesitamos tener presencia y contar con una base de lanzamiento de las operaciones en el mar a partir de las unidades de reacción rápida que tenemos. Esperamos que el año entrante ya tengamos construida esta estación, la cual estará dotada de unos sistemas de detección de radares que permitirán la identificación de embarcaciones que estén en el área haciendo cualquier tipo de actividad ilícita” Esto les permitirá, según dice, actuar de manera oportuna y responsable.
Pero, ¿qué fue lo que cambió para que ahora la construcción de la subestación sea un hecho? El cambio en el proyecto fue bastante fuerte, según reconoce Carolina Jarro, subdirectora de Gestión y Manejo de Áreas Protegidas de Parques Nacionales Naturales de Colombia. “El muelle ya no se construirá en el lugar que se había planteado al principio, una zona donde Parques y un gran número de científicos aseguramos que hay manglar y ecosistemas muy bien conservados. Ahora se hará donde nosotros siempre hacemos la entrada de nuestras embarcaciones, esto nos servirá también a nosotros para nuestra operación. Logramos llegar a ese acuerdo con la Armada”, le dijo a Mongabay Latam.
- En el área continental de la isla se registran más de 200 especies, entre aves, reptiles, mamíferos y anfibios. Foto: Héctor Chirimia Gonzales, PNN.
La construcción de la subestación también cambió de lugar y se levantará en una zona donde hay una vieja infraestructura deteriorada y dos casas, una donde opera la Policía y otra donde opera, por el momento, la Armada.
Otro punto crítico que generaba tensión era el tema de movilización de combustibles fósiles en la isla por los riesgos que podría generar sobre flora y fauna un incidente o mal manejo de estos materiales. “Se acordó que la energía se produzca en la parte baja de la isla y que desde allí se mande a la zona alta donde va a estar instalado el radar”, cuenta Jarro.
Y es que a pesar de que todavía hay quienes se oponen a la construcción de la subestación y no quieren la instalación del radar, desde Parques Nacionales aseguran que esto los beneficiará como autoridad ambiental, sobre todo para el control a la pesca ilegal. Es más, se va a firmar un convenio con la Armada para que los apoyen de una manera más fuerte en ese control y vigilancia.
Como lo manifestó el vicealmirante Ramírez, las obras aún no han empezado pero esperan que el arranque se dé muy pronto. Lo primero que se va a construir y quizás lo más demorado será el muelle pues tienen que hacer de nuevo la caracterización y el levantamiento de información que se había hecho para la primera zona propuesta.
- Foto de Patrick del Castillo, PNN.
Lee más |Galápagos: población sigue creciendo y científicos temen impacto en la biodiversidad
La historia del inconformismo
Los expertos del Comité Técnico Científico del Parque Nacional Natural Gorgona, manifestaron sus objeciones desde que se conoció el otorgamiento de la licencia para la construcción de la subestación. A esto también se añadieron los reparos de la Academia Colombiana de Ciencias Exactas, Físicas y Naturales.
Ernesto Guhl, uno de los miembros de esta última organización, dijo en ese entonces que las zonas insulares y marinas del Parque Nacional Natural Gorgona estaban amenazadas por el proyecto de construir una subestación de guardacostas para control del narcotráfico y que algunos de los puntos más preocupantes eran que el proyecto constaba de un muelle que afectaría una zona coralina frágil y una altísima torre para un radar en la cumbre del Cerro de la Trinidad, el más alto y visible de la isla.
Además, manifestó que el proyecto contaba con una licencia ambiental que fue expedida sin la entrega previa a la Autoridad Nacional de Licencias Ambientales (ANLA) de los estudios de soporte necesarios, donde su ejecución quedó condicionada al suministro posterior de las informaciones necesarias para conocer y evaluar sus impactos socioambientales y determinar si su ejecución es viable, teniendo en cuenta la fragilidad e importancia de los ecosistemas del parque. La licencia fue muy poco difundida y se conoció por casualidad.
- Gorgona es reconocida en el ámbito ecoturístico por el avistamiento de ballenas jorobadas. Foto de Michael Dawes, PNN.
El Comité Científico envió varias cartas al expresidente Juan Manuel Santos. La primera de ellas fue del 26 de julio de 2017 en la que se quejan de que altos mandos de la Armada demeritaran sus apreciaciones técnicas. “Si decide usar Gorgona como cuartel de guardacostas, esperaremos que se asumirán las consecuencias ambientales y políticas de esa decisión. Nosotros preferiríamos que dejaran a Gorgona tranquila como lo que es y se destaca mundialmente: un área para la protección de nuestro patrimonio natural”, dice la carta, donde también recuerdan las recomendaciones que le hicieron a Parques Nacionales en febrero de 2017.
En octubre de ese mismo año, el Comité Científico ─entre los que se encuentran profesionales de la Universidad del Valle, la Universidad de los Andes, la Universidad Javeriana de Cali, la Universidad de Antioquia, la Universidad Nacional sede Medellín Invemar, la Fundación Malpelo, Fundación Yubarta, Fundación Squalus, Fundación Ecomares, Asociación Calidris, WWF, Conservación Internacional, CIMAD, Paleoexplorer, entre otros─ envió una nueva carta a Juan Manuel Santos en la que expresaban su sorpresa al no tener una respuesta por parte del gobierno nacional. “Una solución a todo este problema radicaría en que la Armada identifique otro lugar en la extensa costa Pacífica colombiana, con 1300 km de longitud, para ubicar su proyecto y respetar así la integridad del PNN Gorgona, que es un símbolo y valioso patrimonio natural de todos los colombianos y un factor de seguridad nacional al contribuir a generar una oferta saludable de bienes y servicios ecosistémicos”, dice un apartado del documento.
En medio de ires y venires, y a pesar de no dejar tranquilos a todo los científicos, las nuevas modificaciones que se hicieron al proyecto han respondido a algunos de los puntos más álgidos que estaban en debate. Habrá que esperar a 2019 para comprobar los beneficios, no solo en seguridad sino en materia ambiental, que pueda traer la subestación de guardacostas de la Armada en el Parque Nacional Natural Gorgona.