Bosque de palosanto en Madagascar.
El palosanto talado ilegalmente durante el caos que siguió al golpe de estado ocurrido en Madagascar en 2009 continúa saliendo del país de contrabando hoy en día, socavando los esfuerzos realizados para hallarle un destino legal, informa la revista MADAGASCAR CONSERVATION & DEVELOPMENT.
Según el artículo – firmado por Patrick O. Waeber del Instituto Federal Suizo de Tecnología de Zurich (ETH) y Lucienne Wilmé del Jardín Botánico de Missouri-, grandes cantidades de troncos de palosanto han desaparecido de los depósitos del noreste de Madagascar durante los últimos meses. Los troncos se transfieren ilegalmente a grandes buques anclados en mar abierto mediante embarcaciones de menor tamaño.
“Durante el año pasado una nueva actividad ilegal se ha instaurado en la zona: troncos inventariados procedentes de la tala ilegal han sido sustraídos de los depósitos en que se almacenaban de forma lenta pero constante”, escriben.” A principios de 2013, los traficantes de Maroantsetra visitaron la península de Masoala y generosamente ofrecieron 1 millón de ariary malgaches (450 dólares) a cada familia del lugar por hacer la vista gorda al tráfico de palosanto. Simultáneamente, grandes buques anclaron a suficiente distancia de la costa para no ser detectados y recogieron los troncos de palosanto transportados hasta ellos por barcos menores durante la noche. Espoleados por la pasmosa ineptitud de las autoridades legales locales, este proceso ha continuado incluso a plena luz del día, con los barcos nodriza atreviéndose a acercarse hasta hacerse visibles desde la costa. Es posible que a día de hoy los depósitos de madera almacenada ya hayan sido completamente desvalijados.”
La cama de palosanto de un millón de dólares. |
Las exportaciones de palosanto están oficialmente prohibidas en Madagascar desde 2010. Desde entonces y hasta el año 2012 los comerciantes de madera presionaron a las autoridades para levantar la prohibición sobre una cifra aproximada de 500.000 toneladas de palosanto almacenado. Pero desde entonces, Waeber y Wilmé apuntan que “misteriosamente” no se ha vuelto a hablar del tema. La razón, según ellos, es que la mayor parte del palosanto almacenado ya ha salido del país.
La tala ilegal de palosanto se multiplicó en Madagascar tras el golpe de estado de 2009, que derrocó al líder elegido democráticamente Marc Ravalomanana. Durante el conflicto los bosques más biodiversos del país – bosque viejo primario- fueron saqueados. La tala ilegal vino acompañada del auge del comercio de carne de caza destinada a restaurantes, principal culpable de la caza indiscriminada de lemures y otras especies amenazadas.
La mayor parte de la madera de palosanto procedente de Madagascar tiene como destino China, en donde es utilizada para la confección de muebles de lujo.
El lémur de collar blanco y negro habita en los bosques donde la tala de palo de rosa se llevó a cabo en el período 2009-2010
CITATION: Waeber and Wilmé. Madagascar rich and intransparent. MADAGASCAR CONSERVATION & DEVELOPMENT VOLUME 8 | ISSUE 2 — NOVEMBER 2013 PAGE 52