Una nueva investigación en Tailandia descubre que las aves y los murciélagos son esenciales para los trabajos de reforestación
Los proyectos de restauración de bosques tropicales son lugares de investigación apasionantes para los científicos que estudian los factores que afectan la recuperación del ecosistema. Allí intentan comprender la sucesión de comunidades vegetales, es decir, el proceso de recuperación después de que un terreno despejado queda abandonado para permitir que vuelva a crecer de forma natural. Uno de los componentes más importantes de este proceso de recuperación es la dispersión de semillas, ya que las semillas provenientes de bosques cercanos permiten que en un hábitat deforestado vuelvan a crecer plantas y árboles autóctonos.
Los animales juegan un papel muy importante en la dispersión de semillas en los trópicos, en especial las aves y los murciélagos de la fruta. Ambos animales crean una “lluvia de semillas” a lo largo de diferentes hábitats ya que comen frutas en un lugar y depositan las semillas en otros por medio de las heces. En las áreas en proceso de regeneración, se cree que la lluvia de semillas ocurre, principalmente, cuando los murciélagos vuelan sobre campo abierto y cuando las aves se posan en arbustos y árboles. Algunas técnicas para la restauración de bosques incluyen despejar los arbustos y árboles remanentes antes de plantar árboles nuevos con el objetivo de reducir la competencia. Sin embargo, un estudio nuevo en el periódico de acceso público de mongabay.com, Tropical Conservation Science, cuestiona esta práctica y afirma que sin los arbustos y árboles remanentes las aves no se acercarán a la zona.
El bulbul de cola amarilla (Pycnonotus goiavier) fue una de las aves dispersoras de semillas registrada en el estudio. Foto: Lip Key/Creative Commons 2.0
Con la guía de Tuanjit Sritongchuay, de la Universidad Prince of Songkla, los investigadores colocaron sesenta trampas con semillas en un espacio abierto de veinte hectáreas, en el sur de Tailandia, compuesto por diferentes microhábitats que abarcaban desde arbustos hasta árboles. Más tarde, compararon las diferencias en la abundancia de semillas y en la riqueza de especies. También contaron las aves y los murciélagos que observaron durante los días de recolección de semillas y anotaron las plantas sobre las que las aves se posaron.
Descubrieron que los diferentes microhábitats contenían diferentes cantidades de semillas y de riqueza de especies de semillas. La mayor cantidad de lluvia de semillas se encontró debajo de los arbustos, mientras que la mayor riqueza de especies de semillas se encontró debajo de los árboles. Dos familias de aves, bulbules y diceidos, fueron los principales dispersores de semillas debajo de árboles y arbustos, mientras que los murciélagos hicieron lo propio sobre las praderas.
El bulbul, la clase de ave más abundante que se observó durante el estudio, es un dispersor eficiente de semillas porque deposita la mayor cantidad de semillas lo más alejado de la planta madre.
“Al menos algunas especies de bulbules en nuestra zona de investigación pasaron importantes cantidades de tiempo tanto en bosques intactos como en áreas deforestadas, lo que los convierte en especies ideales para la dispersión de semillas desde los bosques hasta las zonas deforestadas”, escriben los investigadores.
Se cree que este comportamiento en los bulbules es el resultado de que estas aves prefieren lugares elevados para posarse mientras buscan alimento.
Por el contrario, los diceidos se encuentran principalmente en los arbustos.
“Esto puede deberse al tamaño pequeño de los diceidos (4-8 gramos), lo que les permite alcanzar y utilizar ramas frágiles de arbustos que no pueden soportar el peso de aves más grandes y menos maniobrables, como los bulbules”, sostiene el estudio.
Los investigadores también observaron pocas aves de otras familias en los bosques, lo que indica que los bulbules y los diceidos juegan un papel fundamental en la dispersión de semillas para la regeneración de ecosistemas en esta región en particular.
“Este patrón espacial de lluvia de semillas concuerda con otros estudios que indican que arbustos y árboles aislados juegan un papel importante en facilitar el movimiento de las aves en campo abierto”, afirma el estudio y agrega que “mantener árboles frutales y arbustos en áreas de restauración de bosques puede ofrecer un ‘trampolín’ para las aves dentro de los ecosistemas boscosos fragmentados y, a su vez, podría atraer mayor cantidad de dispersores, en especial bulbules”.
Curiosamente, los científicos suponen que el predominio de los murciélagos dispersores de semillas en prados es el resultado de diferentes comportamientos de defecación: los murciélagos suelen defecar durante el vuelo, mientras que las aves defecan cuando están posadas.
“Dado que los murciélagos fueron los principales dispersores en campo abierto, tanto en nuestra área de estudio como en otros lugares, preservar las poblaciones de murciélagos de la fruta podría ser esencial para asegurar el futuro de comunidades vegetales en regiones de bosques tropicales, en especial en zonas deforestadas que necesitan ser restauradas”, sugieren los investigadores.
Estos descubrimientos podrían ayudar a mejorar los trabajos de reforestación en el Sudeste Asiático, donde las tasas de deforestación son las más altas del mundo.
Citas:
- Sritongchuay, T., Gale, G. A. Stewart, A., Kerdkaew, T. and Bumrungsri, S. 2014. Seed Rain in Abandoned Clearings in a Lowland Evergreen Rain Forest in Southern Thailand . Tropical Conservation Science Vol.7 (3):572-585.