- Hasta ahora, se creía que las boas constrictoras mataban a sus presas exprimiendo el aire de sus pulmones.
- Los científicos han descubierto recientemente que cuando una serpiente aprieta a su presa lo que hace es restringir el flujo de sangre y oxígeno hacia los órganos vitales del animal.
- El Dr. Scott Boback, investigador líder, dice que se sintió obligado a llevar a cabo esta investigación porque "es una de esas dudas que de alguna manera siempre quedó sin respuesta en el mundo de la herpetología".
Hollywood y Youtube nos han mostrado muchas imágenes de serpientes constrictoras matando a sus presas, pero hasta ahora, se creía que estábamos viendo cómo la serpiente exprimía el aire de los pulmones de su víctima.
Recientemente, algunos científicos han refutado este mito, y en cambio mostraron que cuando una serpiente aprieta a su presa en realidad está restringiendo el flujo de sangre y oxígeno hacia los órganos vitales del animal.
El equipo de investigación encabezado por el Dr. Scott Boback, profesor adjunto de Biología en Dickinson College, en Carlisle, Pensilvania, publicó hace poco su descubrimiento en la revista The Journal of Experimental Biology.
Boback describió los hallazgos a mongabay.com y dijo que son “esclarecedores y sorprendentes”.
“Nuestros resultados sugieren que las boas someten y matan a sus presas durante la constricción al afectar de manera significativa el sistema cardiovascular de la presa”, informaron los investigadores. La constricción rápidamente lleva a cambios en la química de la sangre, el potasio en sangre se eleva y se produce acidosis. “Los órganos tales como el hígado, el cerebro y el corazón serían los primeros en sucumbir a la rápida hipoxia tisular (deficiencia de oxígeno que alcanza los tejidos corporales)”. También hubo “evidencia directa de que el músculo cardíaco de hecho se ve afectado por tal isquemia”. La disminución de la irrigación sanguínea sucede, de manera sorprendente, dentro de los primeros 30 segundos de constricción.
“En el momento en que la serpiente aplicó presión, la presión sanguínea disminuyó inmediatamente, de forma muy rápida, y tan pronto como disminuía la presión sanguínea, hubo cambios inmediatos en la actividad eléctrica cardíaca”, dijo Boback. “Todo sucedió muy rápido”.
El Dr. Boback le dijo a Mongabay que el objetivo del equipo de investigación era “medir los parámetros fisiológicos internos de la presa para averiguar cuáles son las consecuencias de tener una serpiente enroscada alrededor”.
El Dr. Scott Boback sintió la obligación de llevar a cabo esta investigación porque “es una de esas dudas que de alguna manera siempre quedó sin respuesta en el mundo de la herpetología: ¿cómo matan las serpientes a sus presas?”.
Durante casi un año los investigadores examinaron las funciones cardiovasculares de 24 ratas anestesiadas antes, durante y después de ser comprimidas por boas constrictoras. Los científicos controlaron el flujo sanguíneo de referencia de las ratas y luego permitieron que la serpiente las mordiera y constriñera para determinar el impacto de esta acción en el sistema circulatorio de las presas.
Este experimento no fue tan simple de llevar a cabo como puede parecer. El Dr. Boback comentó que su equipo enfrentó muchos desafíos y “superó muchos obstáculos”.
“Para poder monitorear la presión en las arterias y venas se debe colocar un catéter vascular dentro de una arteria y una vena, y es como intentar poner un cabello humano dentro de otro cabello humano”, explicó. “Y por supuesto, es un animal vivo que está anestesiado, así que no se dispone de mucho tiempo. Nunca había hecho esto antes y sentía mucha presión”.
Boback cree que la información que él y su equipo recopilaron puede ayudar a los científicos a entender mejor cómo evolucionaron estas serpientes. “A pesar de que solo intentábamos dar respuesta a una cuestión empírica acerca de cómo las serpientes matan a sus presas, lo que en realidad estábamos averiguando es cómo habría evolucionado en las serpientes en general la habilidad de someter y matar a su presa de forma segura. Esto también tiene consecuencias para los depredadores en general”.
Citas:
Boback, S.M., McCann, K.J., Wood, K.A., McNeal, P.M., Blankenship, E.L., Zwemmer, C.F. (2015). Snake constriction rapidly induces circulatory arrest in rats. The Journal of Experimental Biology 218, 2279-2288.