- Carter es el fundador de ‘Aliança da Terra’ (Alianza de la Tierra), una organización brasileña sin fines de lucro que trabaja directamente con los ganaderos de la Amazonía para reducir el impacto ambiental y social de sus operaciones.
- Wortman, que previamente ganó un Emmy por su documental Nefertiti Resurrected, tiene la intención de elegir "personajes de la vida real", como lo es John Carter, junto con actores profesionales para contar la verdadera historia de "aquellos que luchan por salvar [la Amazonía] y los que luchan por tomarla".
- Además de ser un western y una historia de amor, Wortman dice que la película es "un resumen de lo que está pasando en Brasil en este momento: la incursión de la primera ola. Por eso se llama Frontier”.
Frontier es un próximo largometraje del director y productor Matthew Wortman que está siendo catalogado como “un western moderno y real.” Cuenta la historia de John Cain Carter, un ranchero de Texas y excomando de las Operaciones Especiales que llega a Brasil con su esposa e hijo buscando comenzar una nueva vida en la selva amazónica.
“Al llegar lleno de sueños idealistas para salvar la selva tropical, John Carter se sorprende al encontrar su tierra invadida por ocupantes ilegales, bosques ilegalmente quemados y talados y, una fuerza policial corrupta no dispuesta a tomar medidas”, según materiales de prensa para la película.
Carter es el fundador de Aliança da Terra (Alianza de la Tierra), una organización brasileña sin fines de lucro que trabaja directamente con los ganaderos de la Amazonía para reducir el impacto ambiental y social de sus operaciones. En una entrevista en el 2007 con Mongabay, Carter explicó que la misión principal del grupo es dar a los productores los incentivos correctos del mercado para reducir su impacto en el bosque.
Wortman, que anteriormente ganó un Emmy por su documental Nefertiti Resurrected, tiene la intención de elegir “personajes de la vida real”, como lo es John Carter, junto con actores profesionales para contar la verdadera historia de “aquellos que luchan por salvar [la Amazonía] y los que luchan por tomarla”.
Frontier se estrenará en el verano de 2017, pero la idea de la película llegó por primera vez a Wortman una década antes cuando estaba en Brasil dirigiendo una pieza para la BBC llamada Global Harvest (Cosecha Mundial en español), que trataba de cómo Brasil estaba superando a Estados Unidos en la producción agrícola y cómo este país iba a alimentar al mundo.
“Estaba buscando una historia para terminar la película con un mensaje real y optimista y pasé por varias historias hasta que mi investigador dijo: ‘Hay una historia loca sobre este tejano que vive en el Amazonas'”, dijo Wortman a Mongabay . “Y pensé: ‘Bueno, esto suena interesante’. Así que fui a conocerlo [a John Carter], y me cautivó, realmente él es una figura muy carismática. Creo que es un visionario”.
Wortman pidió ver a los ocupantes ilegales que vivían en la tierra de Carter: “Así que me mostró sus campamentos y creo que fue en ese momento cuando de repente pensé: ‘Wow esta es realmente una historia fenomenal y es algo de lo que el mundo no sabe gran cosa’. La gente piensa que saben sobre la Amazonía, pero tienen una perspectiva muy estrecha al respecto.”
Wortman, aun siendo muy consciente de lo problemático que es usar a un estadounidense como personaje principal para contar la historia de lo que está sucediendo en la Amazonía brasileña, dice que creyó que ello podría traer más atención a la situación en la Amazonía ─y ayudar así a desafiar las ideas de la gente acerca de lo que realmente está sucediendo.
“No es bueno hacer películas que nadie quiera ver, y tengo miedo de decir que el mercado sigue liderado por Norteamérica”, continuó Wortman. “Pero lo que me encantó de la historia fue el hecho de que de verdad desafía la percepción de las personas acerca de las cosas, y también en Brasil, porque, ya sabes, aquí está el gringo que viene a Brasil diciéndole a todo el mundo que piensa que él sabe más que el resto. Y en realidad, la historia no es sobre eso. Este es un hombre, como dice John, que se educa en la Amazonía. Él ha venido de un pasado militar y su primera respuesta es como la de un soldado. Y luego tiene que darse cuenta de que en realidad no es bueno pelear con la gente. En realidad, la única solución, al final del día, será reunir a estos grupos dispares para resolver estos problemas que están ocurriendo”.
Otro aspecto clave de la historia es la esposa de John, Kika, quien viene de un largo linaje de ganaderos amazónicos. Ella fue instrumental en ayudar a reunir todos los intereses dispares en la Amazonía. De hecho, de acuerdo con Wortman, Frontier es en última instancia sobre el matrimonio de John y Kika.
“Eso es lo que viene a primer plano, es John y Kika como pareja y cómo van a sobrevivir en esta situación extrema”, dijo Wortman. “Vemos lo que está pasando en la Amazonía a través del prisma de su matrimonio”.
Wortman dice que inicialmente se acercó al proyecto con algunas de las mismas preconcepciones que espera que su audiencia tenga: que los ganaderos y otros productores de bienes en el Amazonía son los malos y los responsables de todos los incendios forestales y la deforestación y la ocupación de tierras. Esa era la historia que Wortman pensaba que iba a mostrar, antes de que se diera cuenta de la verdadera historia que lo esperaba.
“Es gracioso porque, ya sabes, vas a entrar como cineasta y tienes una especie de acercamiento al estilo Tarantino”, dijo Wortman. “Crees que va a ser así y dices ‘Oh, sí, bien, esto va a ser bastante especial’”. La cosa con John y Kika es que escribir esto ha sido un proceso muy exigente, donde cualquier inconsistencia o cualquier cosa que no es veraz o si el detalle no es preciso es sacado del largometraje. Por supuesto que no querría hacer una película de otra manera, pero ha sido todo un proceso. Y en realidad como cineasta tienes que tener el coraje para contar de lo que realmente se trata”.
Wortman dice que esta pareja, John y Kika, entraron en el Amazonía con los ojos bien abiertos y, desde el punto de vista de la audiencia, parecen estar entrando en un paraíso donde podrán hacer su propia vida alejada de todo. “Así creé esta pequeña ventana al paraíso pero después del primer día todo empieza a ir mal”, dijo. “Hay madereros en su tierra talando el bosque, y hay invasores y precaristas. Él trata de sacar a los invasores, pero lo que se revela detrás de esa situación es un siniestro sindicato del crimen organizado donde primero ponen a los invasores en el predio para tratar de extorsionar a los propietarios de tierras”.
Aquí es, presumiblemente, cuando las particularidades de las películas western entran en juego. Por ejemplo cuando John y Kika se ven obligados a defenderse de un intruso tras otro en una región sin ley que hace recordar al Viejo Oeste. Pero el verdadero enemigo no es quien uno pensaría que es inicialmente. “Volé directamente al ojo de la tormenta. Usted tiene este tipo de clichés, de las cosas a las que la gente se aferra: que los ganaderos y productores son las personas malas. Y en realidad eso es lo que me gusta de esta historia. Aquí hay un ranchero que viene con soluciones para salvar el bosque o para prevenir deforestación. Y para volver a la parte romántica de la película, John y Kika, lo que les sucedió en Mato Grosso en esos siete años es un microcosmos de lo que está sucediendo en toda la cuenca amazónica. Así que contando la historia, diciéndola a través de dos individuos muy cerca de la cámara, vemos la historia y un vistazo del telón de fondo que es la quema del bosque”.
Además de ser un western y una historia de amor, Wortman dice que la película es “un resumen de lo que está pasando en Brasil en este momento: la incursión de la primera ola. Por eso se llama Frontier. La primera ola viene y me temo que las personas que pagan el precio son las tribus indígenas. También el que paga el precio es el bosque. El bosque no vale nada, y de esto trata la historia. Conoces a John, esto es lo que me mostró cuando hice ese documental. Cogió un poco de pasto y lo levantó y dijo: ‘Matthew, esto vale cuatro veces más que eso’ y señaló el bosque. ‘Lo primero que se destruye es el bosque, porque lo talas, lo siembras, le pones pastizal, ganado, y tu evaluación de la tierra sube al menos cuatro veces’. Y luego la segunda ola que viene es la próxima generación, las hijas e hijos de los ganaderos originales. Brasil aún no ha alcanzado la frontera porque en ese momento es una zona sin ley. No hay gobierno, no hay policías. Y es por eso que hay historias terribles de invasores, ocupantes ilegales de tierras y asesinatos de indígenas porque el gobierno aún no sabe del todo lo que está pasando”.
El objetivo, al final, es ser tan fiel como sea posible a lo que está pasando en Brasil con el fin de mostrar a la gente la compleja realidad de lo que está sucediendo en la selva amazónica. “Esta no es una película anti-Brasil, esta es una película pro-Brasil”, dice Wortman. “Conseguir ese equilibrio es una gran lucha”.
Esta historia fue publicada por primera vez en la web en inglés el 9 de noviembre de 2016.