- Desde el año 2014 se han presentado denuncias por el ingreso ilegal al territorio de este frágil ecosistema.
- Son el hábitat de la flor de Amancaes, una especie que se encuentra en peligro de extinción por el gran impacto de la expansión urbana.
Las invasiones de las Lomas de Amancaes no es un problema reciente. Desde el año 2014, representantes de la Asociación Protectores Ambientales de la Flor y Lomas de Amancaes (PAFLA), organización creada para proteger este ecosistema costero, han presentado una serie de denuncias por el ingreso ilegal registrado en diferentes sectores de las lomas.
Una nueva invasión ocurrió en diciembre del año pasado. De acuerdo con una de las redes sociales del Circuito Ecoturístico de Lomas de Amancaes en esa ocasión el ingreso de invasores ocurrió en los sectores Las Brisas y Vista Alegre.
Las Lomas de Amancaes forman parte de un paisaje costero que se extiende por los distritos de Rímac, Independencia y San Juan de Lurigancho, y que fue incluido en la Lista de Ecosistemas Frágiles del Ministerio de Agricultura y Riego, en octubre de 2013. Son el hábitat de la flor de Amancaes (Ismene amancaes), una especie que se encuentra en peligro de extinción por el gran impacto de la expansión urbana.
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1. El problema de las invasiones
Desde el año 2014, representantes de la Asociación Protectores Ambientales de la Flor y Lomas de Amancaes (PAFLA), organización creada para proteger este ecosistema costero, han presentado una serie de denuncias por las invasiones registradas en diferentes sectores.
“Las invasiones son sistemáticas. Un día colocan una choza y al día siguiente otra. Aprovechan la noche para subir sus materiales y a la mañana siguiente ya están instalados. Uno cada día, así avanzan”, señala Haydee Cerrón, presidenta de la PAFLA y dirigente del sector Horacio Zeballos.
Cerrón y su hija Cecilia Janampa Cerrón son las creadoras del circuito ecoturístico Lomas de Amancaes, un paseo de aproximadamente tres horas que guía por este paisaje costero a los visitantes para observar farallones rocosos rodeados de mitos, taras, cactus, ortigas negras, caihuas, papas y tomates silvestres, entre otras especies que florecen entre agosto y diciembre.
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2. La construcción de una nueva vía
Las obras del proyecto Ampliación y mejoramiento de los sistemas de agua potable y alcantarillado para el esquema San Juan de Amancaes han incrementado el riesgo en las lomas, debido a que se abrió una nueva vía para facilitar el transporte de los materiales, explica la presidenta de la PAFLA.
Juan Diego Del Castillo, presidente del Centro Urbes, organización que trabaja en la resiliencia social y ecológica en ciudades peruanas y que participa del proyecto de conservación de las Lomas de Amancaes desde el año 2014, menciona que la nueva pista tiene entre 4 y 5 metros de ancho, un riesgo para la conservación de las lomas, pues facilita la llegada de los invasores a zonas a las que no llegaban vehículos.
El abogado Carlos Soria, asesor de PAFLA explica que las invasiones están ocurriendo desde el 9 de diciembre del año pasado y que se está poniendo más grave cada día. También se refirió al proyecto de agua como un punto de quiebre en la conservación del ecosistema, debido a la trocha que se ha abierto para subir los materiales. “Nadie se opone a la instalación del servicio de agua, es más, todos lo quieren. El problema es que la vía está sirviendo para que ingresen los invasores. Para hacer este proyecto se debió utilizar burros en el traslado de los materiales como se hizo hace algunos años cuando se instalaron torres de transmisión eléctrica, intervención que no dañó el ambiente”.
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3. Ubicación inadecuada
La ubicación de la obra también ha sido cuestionada porque está dentro del área declarada como ecosistema frágil. “Los dos tanques se construirán dentro del área reconocida como ecosistema frágil, es decir, al interior de las Lomas de Amancaes”, explica Del Castillo.
El presidente del Centro Urbes añadió que en el Estudio de Impacto Ambiental, en la sección de la línea de base biológica, no se incluyen referencias al ecosistema de lomas. “No han identificado que cerca del área donde se instalarán esos tanques existen plantas de tara y mito. Si se trabajara de manera adecuada, esos árboles deberían ser trasladados, pero nada de eso se está haciendo. Hay serios vacíos en el estudio”.
Haydeé Cerrón dijo que no está en contra de la instalación de agua, que ella también espera la obra porque solo cuenta con el recurso entre dos y tres horas por día, pero está convencida de que abastecer del servicio a quienes lo necesitan no debe convertirse en una forma de destruir el patrimonio natural que tanto les ha costado proteger.
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4. Ecosistema frágil
Las Lomas de Amancaes figuran en la lista de los 10 ecosistemas frágiles de lomas del Serfor con una extensión de 237.45 hectáreas. En la resolución de su reconocimiento se especifica que prestará asistencia técnica especializada a las autoridades competentes para garantizar la conservación del citado ecosistema frágil.
Se trata de ecosistemas cuyas características particulares han permitido el desarrollo de especies de flora y fauna únicas. Brindan servicios ecosistémicos importantes como el aprovisionamiento de madera, regula el ambiente mediante la captura de agua de las neblinas, evita la erosión de las quebradas mediante la vegetación que sostiene el terreno con sus raíces y funciona como un banco de germoplasma.
Las Lomas de Amancaes albergan alrededor de 1500 especies vegetales y animales. Una de ellas es la tara (Caesalpinia Spinosa) que ofrece diversos beneficios. Es una especie que se adapta a suelos pobres y crece en zonas semiáridas con requerimiento bajo de agua. La tara también ofrece beneficios comerciales. Adicionalmente, la vegetación de las lomas atrae una amplia diversidad de fauna como gorriones, halcones peregrinos, cernícalos, turtupilines, gekos, lagartos e infinidad de insectos.
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5. Invasiones en todas las lomas de Lima
Rodrigo Arce Rojas, especialista en ecosistemas forestales, se refirió a las invasiones de las lomas como un problema que está afectando a todos los ecosistemas de este tipo en Lima. “Hemos perdido lomas en Zapallal, hasta hace 20 años existían, ahora ya no hay nada”.
El experto agregó que su conservación no solo debe depender de los recursos que estos ecosistemas nos pueden ofrecer, pues su sola existencia es ya en sí un valor, además de todas las relaciones de vida silvestre que existen en estos territorios.
Lamentó también que estos ecosistemas tan frágiles estén desapareciendo sobre todo en una ciudad como Lima, donde tanta falta hacen las áreas verdes. “Ver estas lomas en setiembre, cuando están en su esplendor, es un regalo para el espíritu”, asegura.
El abogado Carlos Soria, asesor de PAFLA también mencionó el caso de otras lomas invadidas. Dice que en las lomas de Mangomarca, Carabayllo y Villa María del Triunfo está sucediendo lo mismo. “En Mangomarca son cinco cerros y solo queda un pequeño sector de uno de ellos. En Lima tenemos 19 lomas sobre un territorio de aproximadamente 57 mil hectáreas, pero las estamos perdiendo”, aseguró.