- Investigadora peruana ha estudiado la capacidad de adaptación de plantas como la quinua y la maca.
- En conversación con Mongabay Latam habla de sus hallazgos y del significado de la ciencia para la sociedad.
El primer cultivo andino que estudió fue la quinua, pero es la maca —una planta milenaria con propiedades energéticas— la que más la atrajo porque, según dice, “es increíble”. Thais Huarancca estudió química, pero se especializó en fisiología vegetal, en su caso, estudiar el comportamiento de las plantas ante un medio ambiente extremo.
Sus investigaciones le valieron, recientemente, ser finalista en el premio Por las mujeres en la Ciencia, que entrega cada año el Concejo Nacional de Ciencia, Tecnología e Innovación Tecnológica (Concytec), L’Oréal, La Organización de las Naciones Unidas para la Educación, la Ciencia y la Cultura, y la Academia Nacional de Ciencias.
Su siguiente paso será estudiar el tarwi, como parte de sus investigaciones en la Universidad de Pisa, en Italia. Una de las plantas que, según Thais, podría solucionar los problemas alimenticios en Perú. Esta es la conversación con Mongabay Latam.
Lee más |Hernán Ortega: el hombre que colecciona peces para la ciencia
¿Por qué eligió dedicarse a la ciencia?
Fueron mis profesores del colegio quienes me incentivaron y creo que cuando los adultos incentivan la curiosidad del niño, este es más propenso a caer en el camino de la ciencia. Mi decisión fue para responder incógnitas, comprender lo que nos rodea, y contar con herramientas para solucionar problemas en nuestro planeta.
¿Para usted qué es lo mejor de ser científico?
En el camino mi perspectiva ha ido cambiando, pero creo que la mejor satisfacción es interactuar y transmitir a la sociedad todo lo que sabes, porque así te retroalimentas. Las personas de diferentes disciplinas pueden interrelacionarse y encontrar soluciones más completas a los problemas, eso es lo mejor para mí.
¿Cree que es difícil ser científico en Perú?
Actualmente hay interés por incorporar al país a personas que están haciendo ciencia fuera del Perú. Sin embargo, no veo que el gobierno tenga un acercamiento con el mundo científico, porque para hacer ciencia se necesita financiamiento, de lo contrario no es posible, porque es caro. Creo, además, que un país sin educación a la ciencia no progresa.
¿Por qué decidió investigar los cultivos andinos?
Primero, porque en Perú tenemos una vasta flora que debe ser estudiada, de la que hasta ahora solo se conoce un granito de arena. Soy fisióloga vegetal, pero siempre estuvo en mi mente trabajar con la población indígena, entonces, apenas se dio la oportunidad, presenté proyectos con cultivos andinos, plantas que son versátiles y crecen en ambientes naturales extremos. Por ejemplo, en lugares con baja concentración de oxígeno, a altitudes extremas, con enormes exposiciones a radiación ultravioleta, con temporadas de sequía o heladas. Son muy interesantes de investigar para conocer cómo son sus mecanismos de adaptación.
¿En qué consiste la fisiología vegetal?
Estudia el comportamiento de la planta ante un estrés externo o interno. En Perú, yo trabajo con todo lo referente a la radiación ultravioleta en las plantas andinas. ¿Qué pasa si filtro la radiación ultravioleta? ¿crecen igual? ¿cómo cambian su metabolismo? ¿son igual de nutritivas? Todo esto estudia la fisiología vegetal y eso puede tener un impacto en la producción agrícola.
Lee más | En Bogotá existe un lugar donde salvan miles de animales silvestres al año
Quinua, maca y tarwi
¿Cuándo empezó a trabajar con los cultivos andinos?
Empecé con plantas modelo que ni siquiera se usan para comer. El siguiente paso era su aplicación, es decir, pasar a cultivos en su ambiente natural y escogí los andinos porque quería estudiar algo en Perú. Había terminado mi doctorado en Japón y tenía que buscar un tema para mi postdoctorado. Mi ilusión siempre había sido aplicar en Perú todo lo que había estudiado y cuando tuve la oportunidad me decidí por estas plantas. Así nacieron mis estudios sobre maca y quinua.
¿Qué descubrió en esas investigaciones?
Todos esos cultivos tienen mecanismos bastante versátiles y están muy bien adaptados a climas extremos. Estos mecanismos que desarrollan ante el estrés ambiental son fuente de información para entender cómo responden al medio ambiente agresivo y se puede aplicar en diferentes ámbitos. Por ejemplo, esta información puede servir para la selección de variedades más tolerantes y productivas en condiciones extremas o limitantes.
¿Qué cultivo le interesa más?
La maca, porque es increíble. Su crecimiento y desarrollo es muy versátil, en zonas de mucha altitud y alta radiación solar, pero si uno los mueve de su ámbito en los Andes para que crezcan en la costa, presentan otro tipo de desarrollo porque son bien flexibles, como todo organismo vivo. Hemos encontrado diferencias en cuanto a variación ambiental que nos incentiva investigar más este cultivo. Es un monstruo en el mejor sentido. Todavía no sabemos mucho, pero estamos tratando de conocerlo y nos ha impactado lo que hemos visto a nivel de laboratorio, pero también en el campo.
¿Qué otras plantas estudia?
Empecé con la quinua, luego la maca y ahora estoy viendo el tarwi. Estoy aplicando proyectos con esta última planta y espero conseguir financiamiento porque es muy interesante.
¿Usted cree que estas plantas son una respuesta a una posible crisis alimentaria en el mundo?
Creo que puede resolver bastante bien la crisis alimentaria en nuestro país. Son cultivos que permanecen olvidados hasta que una multinacional habla del super food (súper comida), entonces recién nos interesamos en producir para exportar. Sí es bueno a nivel alimenticio, porque definitivamente son alimentos con mucho valor nutritivo, ¿por qué no producir para la población en el país?
¿Considera que estos alimentos no han recibido suficiente atención?
Creo que con el boom gastronómico recién se están conociendo. La agricultura en nuestro país es muy rica, pero tiene que estar de la mano con la tecnología. La experiencia diaria de los agricultores es muy buena, pero explicarles por qué la planta está sufriendo, por ejemplo, y qué hacer para mejorarla sería muy bueno. Yo tengo experiencia en Italia donde trabajamos con agricultores que al inicio no confían mucho en nosotros, los científicos, pero luego, con el tiempo, se dan cuenta que el conocimiento puede solucionar muchos problemas.
Además de los cultivos andinos, ¿en qué otro proyecto trabaja?
Aquí en Italia trabajamos con tomates, variedades que son puntuales en cuanto a espacio geográfico. También trabajo en césped, para mejoramiento técnico aplicado a los deportes, en los estadios, porque en Italia son fanáticos del fútbol. También con otras especies como la caña (Arundo donax) que se puede usar como biomasa para luego ser transformada en biocombustible.
Lee más | Peregocetus: la ballena con cuatro patas capaz de caminar y nadar que vivió en el Perú
Ciencia para cambiar la vida
¿Qué significó para usted estar entre las finalistas del premio mujeres en la ciencia?
Ha sido un reconocimiento a mi esfuerzo.
¿Cree que es una forma de dar más espacio a las mujeres en el campo científico?
Pienso que no hay diferencia. Si es una mujer o no, las posibilidades deben ser iguales. No es como antes, ahora tanto las mujeres como los hombres pueden desenvolverse en la ciencia, en la ingeniería, en cualquier área de estudio.
¿Considera que las investigaciones que hacen los científicos pueden cambiar la vida de las personas?
Creo que sí, que las mejoras, así sean cosas pequeñas, pueden cambiar la vida de las personas. El agricultor por ejemplo piensa que si le pone más fertilizante a su campo sus plantas crecerán mejor, pero no necesariamente es así, al contrario puede generar un daño negativo al medio ambiente. A veces esas cosas no se saben.
¿Recuerda alguna experiencia en que su trabajo haya cambiado la vida de la gente?
Sí, una vez estábamos trabajando con un productor agrícola de calabacitas italianas y esa persona tenía problemas con una plaga. Nosotros teníamos unos plásticos biodegradables y decidimos experimentar en su campo con este material y logramos desorientar al insecto. Simplemente usamos el conocimiento para solucionar un problema. Me gusta esa conexión con la sociedad.
¿Quién ha sido el científico que más la ha inspirado y qué le diría si pudiese hablar con él o ella?
El que más me ha inspirado es Galileo Galilei, el padre de la ciencia moderna. Le diría: “quiero ser tu pupila”.
¿Qué recomendaría a un joven que quiere dedicarse a la ciencia?
Que sea perseverante y no tenga miedo. En realidad, esto es general para cualquier tipo de carrera. Lo importante es que te guste lo que estás haciendo.
Videos Mongabay Latam | La situación ambiental en Perú
Conoce más de la situación ambiental en Perú: cámaras trampa, minería ilegal, narcotráfico y más.
Si quieres conocer más sobre la situación ambiental en el Perú, puedes revisar nuestra colección de artículos. Y si quieres estar al tanto de las mejores historias de Mongabay Latam, puedes suscribirte al boletín aquí o seguirnos en Facebook, Twitter, Instagram y YouTube.