- En esta sección, Killen continúa diseccionando la historia de las migraciones, esta vez en Bolivia. A decir del autor, la configuración actual de dicho país y sus dimensiones finales se consolidaron luego de la Guerra del Chaco y de la cesión de tierras de Acre a Brasil.
- Desde entonces, la necesidad de ocupación de vastos territorios permitió que hubiera una gran deforestación, especialmente en el Chapare y la llanura aluvial de Santa Cruz.
- Así, la población del Departamento de Santa Cruz creció de aproximadamente 300.000 habitantes en 1960 a más de tres millones en 2022. Aunque el 70 % de este crecimiento se ha concentrado en el área metropolitana de Santa Cruz de la Sierra, la economía urbana sigue dependiendo en gran medida de la agricultura.
A mediados del siglo XX, la sociedad boliviana quedó profundamente traumatizada por la Guerra del Chaco y la pérdida de aproximadamente el 30% de su territorio. Previamente, Bolivia ya había cedido la zona del Acre a Brasil y sus provincias costeras a Chile. Desde temprana edad, los escolares bolivianos aprenden que el país perdió esos territorios debido a su incapacidad para ocuparlos. En este contexto, Bolivia acogió con agrado la ayuda recibida en 1942, cuando un equipo de economistas patrocinado por la embajada de Estados Unidos trazó una estrategia de desarrollo para las escasamente pobladas tierras bajas orientales. Conocido como el Plan Bohan, en honor a su autor principal, este documento delineaba una serie de inversiones e iniciativas de reasentamiento que se referían a la Marcha hacia el Oriente.
Durante las décadas de 1950 y 1960, esta estrategia impulsó la construcción de carreteras transitables en cualquier clima, conectando las tierras altas andinas con las tierras bajas de Santa Cruz, Cochabamba y La Paz. La asistencia financiera de Estados Unidos, canalizada a través de la Alianza para el Progreso, formaba parte de una estrategia más amplia para combatir la expansión de ideologías de izquierda, en especial la insurgencia guerrillera liderada por el Che Guevara en 1967. Posteriormente, agencias multilaterales respaldaron inversiones clave, incluyendo carreteras que conectaban la zona de colonización del Chapare con las zonas agroindustriales de Santa Cruz, así como corredores de exportación hacia las costas del Pacífico y Atlántico. Las iniciativas patrocinadas por el Banco Mundial, orientadas a promover la seguridad alimentaria y la exportación de productos básicos, fueron complementadas con inversiones del sector privado, ayudando a crear una industria exportadora y un motor clave para la generación de empleo. Entre 1975 y 2010, las zonas más afectadas por estas inversiones, el Chapare y la llanura aluvial de Santa Cruz, concentraron aproximadamente el 90% de la deforestación del país.
Aún así, durante este período, la economía nacional sufrió una grave contracción en el sector minero, que había sido dominante durante mucho tiempo. Esto resultó en el incumplimiento del pago de la deuda privada, bilateral y multilateral, llevando a que Bolivia fuera clasificada como un país pobre altamente endeudado en la década de 1990. Esta situación limitó considerablemente su capacidad para pedir préstamos e invertir en infraestructura. La posterior privatización del sector de petróleo y gas desató un auge de inversiones que incrementó significativamente los ingresos, lo cual mejoró la calificación crediticia del país en 2010. Gracias a esto, el gobierno, encabezado entonces por Evo Morales, pudo acceder a los mercados de deuda soberana y aumentar considerablemente las inversiones en infraestructura de transporte.
Rutas migratorias y asentamientos en Bolivia
Desde la década de 1960, el gobierno boliviano promovió activamente la migración de campesinos indígenas de las tierras altas hacia las tierras bajas. En sus primeros años, este esfuerzo fue organizado y dirigido por el gobierno central con asistencia de agencias de desarrollo extranjeras. Con el tiempo, las políticas de asentamiento evolucionaron, reflejando cambios en los presupuestos y filosofías de gobierno, pero siempre han sido un pilar central de las administraciones. La migración se ha concentrado en tres regiones distintas, reflejando los intereses de las élites regionales y la disponibilidad de población migrante.
El más antiguo de estos corredores migratorios es el de los Yungas de La Paz, una serie de valles interconectados entre el Altiplano y las tierras bajas del Amazonas, que ha funcionado como ruta de migración durante generaciones. Los Altos Yungas son la principal fuente de hoja de coca en Bolivia, utilizada como estimulante, y durante mucho tiempo han abastecido a la ciudad de La Paz con frutas tropicales y otros productos básicos. A principios de la década de 1960, se amplió una carretera hacia los Bajos Yungas para establecer la comunidad pionera de Caranavi y conectarla con las primeras minas de oro en Tipuani y Mapiri.
Los colonizadores acudieron en masa a la región, deforestando las laderas para cultivar alimentos para su consumo, así como café, cacao y frutas tropicales para los mercados locales e internacionales. A principios de la década de 1970, se abrió un camino hacia el Alto Beni, y para mediados de la década de 1980, se conectó esta región con los ranchos ganaderos de los Llanos de Moxos. Los Yungas de La Paz han sido ocupados en su mayor parte, y los migrantes ahora se trasladan a las áreas del piedemonte, especialmente al corredor vial entre Buenaventura y la frontera con Perú.
La mayoría de los migrantes que han poblado los Yungas de La Paz durante los últimos cincuenta años son campesinos indígenas del Altiplano, de habla aymara. Muchos tienen una tradición de establecer granjas en múltiples localidades a diferentes altitudes, lo que les permite diversificar su producción y mitigar riesgos de pérdidas en las cosechas. Esta estrategia cultural indígena ha sido clave para su éxito como pioneros. Muchas familias también han establecido residencias urbanas en La Paz o en El Alto, facilitando la comercialización de sus productos en los mercados urbanos.
La colonización del Chapare
El Chapare ha sido una de las zonas de colonización más conflictivas de Bolivia. La inmigración a gran escala comenzó a mediados de la década de 1960 para aliviar la superpoblación de las comunidades quechuas en las tierras altas de Cochabamba. Fondos de la Alianza para el Progreso de USAID financiaron la construcción de una carretera a través de la Cordillera Oriental, donde las condiciones extremadamente húmedas, con precipitaciones superiores a seis metros anuales, dificultan el cultivo de la mayoría de los productos tradicionales. Sin embargo, los nuevos colonos descubrieron que una subespecie de coca se adaptaba bien a estas condiciones.
El Chapare se convirtió rápidamente en un imán para los colonos, con pequeñas granjas de no más de 40 hectáreas que se expandieron por el piedemonte. La inmigración se extendió hacia el sureste, llegando a Santa Cruz, impulsada por una nueva carretera que conectaba La Paz, Cochabamba y Santa Cruz. La migración al Chapare se aceleró en la década de 1980, cuando la caída de los precios del estaño llevó a la COMIBOL, empresa minera estatal, a despedir a miles de trabajadores. Muchos de ellos utilizaron sus indemnizaciones para trasladarse con sus familias a las tierras bajas y dedicarse al cultivo de coca. La población del Chapare se duplicó, pasando de 100.000 en 1976 a 200.000 en 1990, y alcanzó los 400.000 en 2015. Entre los colonos se encontraba Evo Morales, quien emergió como líder sindical de los cultivadores de hoja de coca y más tarde se convertiría en presidente de Bolivia.
La llanura aluvial de Santa Cruz
La región más grande e importante de colonización en Bolivia es la llanura aluvial de Santa Cruz, caracterizada por suelos fértiles y un clima ideal para la agricultura tropical. Antes de la década de 1960, los cruceños ya habían establecido un modelo de producción basado en la caña de azúcar, arroz y ganadería, cuando el gobierno inició la reubicación de decenas de miles de campesinos de las tierras altas. En la década de 1970, se establecieron comunidades planificadas a lo largo de tres caminos paralelos en un área conocida como Brecha Casarabe. Aunque el gobierno dejó de organizar el movimiento de personas de forma proactiva, continuó apoyando el asentamiento espontáneo en tierras fiscales mediante la emisión de títulos provisionales y la prestación de servicios básicos. [Imagen 6.10]
Santa Cruz también atrajo a inmigrantes de otros países, como japoneses (décadas de 1950 y 1960) y menonitas (desde la década de 1970), además de inversionistas en grandes explotaciones agrícolas provenientes de Brasil, Argentina, América del Norte y China. Se estima que hasta el 50% de la producción de soya es generada por extranjeros, quienes además han introducido tecnología y capital en la región.
Los pequeños agricultores, que ahora se autodenominan interculturales en lugar de colonizadores, han adoptado numerosas prácticas agrícolas de los inmigrantes menonitas y japoneses, quienes también poseen granjas pequeñas. Si bien muchos optan por producir alimentos para el mercado nacional a través de una economía informal, cada vez más se integran en la economía industrial dominada por la soya.
La población del Departamento de Santa Cruz creció de aproximadamente 300.000 habitantes en 1960 a más de tres millones en 2022. Aunque el 70 % de este crecimiento se ha concentrado en el área metropolitana de Santa Cruz de la Sierra, la economía urbana sigue dependiendo en gran medida de la agricultura. El sector agrícola continúa expandiéndose, y las instituciones que representan a los agronegocios proyectan duplicar o triplicar la superficie dedicada a la agricultura en la próxima década. El Estado, tanto desde el gobierno nacional como el departamental apoyan, en diversos grados, las agendas de pequeños agricultores y grandes corporaciones.
Imagen destacada: Fotografía aérea de un humedal en Bolivia. Imagen de drone Mavic Pro.
“Una tormenta perfecta en la Amazonía” es un libro de Timothy Killeen que contiene los puntos de vista y análisis del autor. La segunda edición estuvo a cargo de la editorial británica The White Horse en el año 2021, bajo los términos de una licencia Creative Commons -licencia CC BY 4.0).