- Todas fueron declaradas el último año y son iniciativas de personas particulares o asociaciones de conservación.
- Según la legislación peruana, un área de conservación privada (ACP) puede ser gestionada durante 10 años o más.
En Perú se han declarado en el último año 24 áreas de conservación privada (ACP), de acuerdo a la lista oficial del Servicio Nacional de Áreas Naturales Protegidas por el Estado (Sernanp). Dichos espacios naturales albergan muestras representativas del ecosistema natural de su entorno y ayudan en las tareas de conservación al complementar los corredores biológicos de las áreas naturales protegidas que son administradas por el Estado. Son gestionadas por un propietario, sea una persona natural o jurídica, y por un período de 10 años o más. El derecho para su gestión puede renovarse, según lo señala Sernanp.
“Para que te reconozcan el área de conservación privada tienes que tener como requisitos tu título de propiedad, la voluntad de conservación y un objetivo de conservación como un ecosistema, especies amenazadas o cuencas de agua”, dijo en una entrevista a Mongabay Latam, Bruno Monteferri, director de Conservamos por Naturaleza, un programa que impulsa la conservación privada en el Perú. Hasta el momento, en el Perú existen 119 ACPs, de acuerdo al Sernanp.
Esta es la lista de las áreas de conservación privada que han sido declaradas en el último año en Perú y que debes conocer.
1.Chicuate-Chinguelas: nueva ACP en el norte de Perú
La primera área de conservación privada se llama Chicuate-Chinguelas y se ubica en la región de Piura, al norte del Perú. Por esa ubicación estratégica, donde confluyen los Andes y la Amazonía, los ecosistemas que alberga son los bosques húmedos y de páramos. Sin embargo, a eso no se resume la importancia del área protegida porque su conservación asegura el acceso al agua, alimento, madera y medicina natural a una población que bordea las 5000 personas. Conoce esta ACP aquí.
2. Sabalillo y Palmonte, dos nuevas áreas de conservación privada en la Amazonía
La Amazonía no se queda atrás y en julio del 2016 se crearon dos ACP que en conjunto cuidan una extensión territorial equivalente a 36 estadios de fútbol profesional. Se trata de Sabalillo, ubicada en la región de Loreto, que alberga a más de 200 especies entre flora y fauna. La otra ACP es Palmonte, en la región de San Martín, que como característica especial tiene la calidad de corredor ecológico entre el Parque Nacional Cordillera Azul y el Área de Conservación Regional Cordillera Escalera. Descubre estas ACP aquí.
3. ACP Cerro Campana protegerá biodiversidad en estado vulnerable
Las ACP también son importantes para la protección de especies amenazadas y, además, como un espacio exclusivo para la investigación científica. Así lo ha demostrado la ACP Cerro Campana, ubicada en la región de La Libertad, que es administrada por la Facultad de Ciencias Biológicas de la Universidad Nacional de Trujillo, cuyos estudiantes investigan y protegen las más de 200 especies de flora y más de 20 especie de fauna vertebrada. Además, la ACP es un antiguo centro ceremonial de la cultura prehispánica mochica. Para enterarte más sobre esta área protegida ingresa aquí.
4. Cuatro nuevas ACP: una de ellas es la primera administrada por una comunidad nativa
Agosto del 2016 fue un mes récord porque el Perú logró declarar cuatro grandes ACP: ‘Machusaniaca II’ y ‘Santuario de la Verónica’, ambas ubicada en la región de Cusco; ‘Fundo Rosita’ en la región Loreto y ‘Ebio Kiabamene’ en la región de Madre de Dios. Las cuatro áreas de conservación privada resguardan un territorio de más de 1000 hectáreas. ‘Ebio Kiabamene’ resalta entre ellas porque es el primer caso en el 2016 de un área protegida administrada por una comunidad nativa. Conoce a todas estas ACP aquí.
5. Wayqecha: el laboratorio natural que se convirtió en una nueva área de conservación privada
Wayqecha comenzó como una de las cuatro estaciones biológicas más grandes del Perú. Hoy es el mejor ejemplo de cómo una ACP tiene un enorme potencial para fines científicos, además de las tareas propias de la conservación. Desde el 2007 ha recibido la visita de 150 científicos en promedio. Por su especial ubicación en una zona que oscila entre los 2300 m.s.n.m. y los 3500 m.s.n.m., alberga una serie de ecosistemas muy particulares. Ingresa aquí para que conozcas a Wayqecha.
6. Nueva área de conservación privada en la zona de amortiguamiento de la Reserva Nacional de Tambopata
Las áreas de conservación privada también pueden servir de barrera contra actividades ilegales que amenazan los ecosistemas. Un gran ejemplo es la ACP Bahuaja 1, ubicada en la zona de amortiguamiento de la Reserva Nacional de Tambopata en la región de Madre de Dios, que sirve de corredor de conservación entre esta área protegida y el Parque Nacional Bahuaja Sonene. Junto a otras ACP brindan una protección a este par de áreas protegidas contra la amenaza de la minería ilegal de oro. Para enterarte más sobre esta importante ACP ingresa aquí.
7. Perú: Comunidad machiguenga logra convertir su territorio en nueva área de conservación privada
La Comunidad Nativa del pueblo machiguenga de Matoriato en la región de Cusco es uno de esos ejemplos de cómo una comunidad indígena puede asumir la gestión de una área protegida. El nombre de esta nueva ACP es también Matoriato y el ecosistema que protege es el bosque montano. Alberga hasta 581 especies de plantas, de las cuales 57 son endémicas y 28 están en la lista roja de la Unión Internacional para la Conservación de la Naturaleza (UICN). En el caso de los mamíferos, existen 10 especies calificadas en estado Vulnerable, como el oso de anteojos (Tremarctos ornatus) y el jaguar (Panthera Onca). La historia completa la puedes leer aquí.