El lanzamiento de la iniciativa “un pasillo de conservación biocultural” en dos regiones brasileñas ha levantado moral la semana pasada en las comunidades indígenas que están luchando para proteger la selva amazónica.
La iniciativa, coordinada por el Amazon Conservation Team (ACT) y parcialmente financiada por la fundación Skoll, la que contribuyó con 1.6 millones de dólares, intenta evitar la deforestación de 46 millones ha (114 millones de acres) en el noreste y el suroeste de la amazonia brasileña.
Según una declaración de la fundación Skoll, la iniciativa “fortalecerá la capacidad de las comunidades indígenas y de las agencias gubernamentales para observar, administrar y proteger las reservas amazónicas y sus áreas colindantes, y al mismo tiempo establecer las condiciones necesarias para garantizar apoyo económico de la protección forestal en el largo plazo”.
El proyecto también financiará el desarrollo de actividades económicas sostenibles para las tribus nativas que incluyen la Zoró, la Diahui, la Cinta Larga, la Surui, la Wai Wai, la Kaxuyana, la Tiriyó y la Wayana-Apalaí.
“La conservación y administración sostenibles del mosaico complejo de estas tierras tropicales supone, por naturaleza, un gran reto”, admite en un comunicado Mark Plotkin, el presidente y miembro fundador de ACT.
“Sin embargo, creemos que la acción conjunta con el pueblo indígena en sus propias tierras y luego la creación de vínculos que atraviesen el espectro cultural, biológico, político y económico es una solución fuerte y holística para proteger la diversidad de la selva.”
Esta iniciativa representa una oportunidad excepcional para involucrar a los pueblos indígenas en un proyecto de conservación en dos regiones muy diferentes – una relativamente intacta y bajo escasa presión ( Karib) y la otra que ha sido fuertemente impactada por la deforestación y continúa bajo gran amenaza ( Munde-Kwahiba) – que pueden proporcionar información valiosa para proyectos similares en otros sitios.
El corredor Karib está al norte y el Monde-Kwahiba al sur.
Los bloques blancos y rojos indican tierras indígenas y los otros colores son varios tipos de áreas protegidas.
Esta iniciativa representa un gran reto y una oportunidad importante en el mundo de los derechos y territorios indígenas” declara Liliana Madrigal, el vicepresidente de ACT. “Creemos que la implementación de este pasillo de conservación biocultural tiene el potencial de arrojar experiencias y lecciones para situaciones similares en paisajes tan variados como el bosque boreal de Canadá y el interior de Australia.”
ACT Brazil will lead the initiative. Partners include Kanindé, the Conservation Strategy Fund, Metareilá, and IDESAM. Kanindé is an NGO run by the Surui people, who are pioneering an indigenous-run forest carbon (REDD+) project on their lands.
La división brasileña de ACT encabezará la iniciativa. Otros participantes incluyen, Kanindé, el Conservation Strategy Fund, Metareilá e IDESAM. Kanindé es una organización no gubernamental de la tribu Surui que está montando en sus tierras un proyecto de carbón forestal (REDD+) dirigido exclusivamente por el pueblo nativo.“El Amazon Conservation Team, en colaboración con sus colegas indígenas y partes interesadas locales, pone en práctica soluciones inclusivas e innovadoras para mejorar la administración y la protección de la selva amazónica”, dice Sally Osberg, la presidente y directora ejecutiva de la Fundacion Skoll. “Creemos que este enfoque, basado en acción conjunta con el pueblo, es indispensable para demonstrar impacto y estimular cambios de conducta y de políticas en el largo plazo.”
“Esta iniciativa ofrece un apoyo importante al pueblo Surui ya que ayuda a movilizar nuestra gente a defender el ambiente y nuestra cultura,” añade el Jefe Almir Surui, líder principal de la tribu Surui. “También da voz a la gente de la selva, las que trabajan en la formulación de políticas públicas para el reconocimiento nacional e internacional del potencial de nuestra biodiversidad. Esta iniciativa muestra que es posible desarrollar un ambiente sostenible para estimular el reconocimiento de la economía limpia.”
Nota: Rhett Butler de Mongabay trabajó como asesor en la preparación de la iniciativa etno-ambiental entre el Karib y el Munde-Kwahiba. .