- Oficina del Representante Comercial de Estados Unidos le abrió un proceso de consulta al Perú, por considerar que estaría violando los compromisos ambientales asumidos en el Tratado de Libre Comercio.
- Estados Unidos cree que Osinfor perderá independencia en materia de fiscalización forestal al depender del Ministerio del Ambiente. El Gobierno peruano discrepa y se mantiene firme en su decisión.
- Mongabay Latam habló en exclusiva con uno de los congresistas demócratas que cuestiona la decisión tomada por el Perú y dijo que el Gobierno aún no muestra evidencia que pruebe que la indignación de Estados Unidos es injustificada.
Han pasado más de tres semanas desde que el Gobierno peruano decidió trasladar al organismo encargado de la fiscalización forestal al Ministerio del Ambiente. Una medida polémica que despertó críticas entre algunas organizaciones y expertos del sector ambiental, que consideran que la decisión tomada le resta independencia al Organismo de Supervisión de los Recursos Naturales y de Fauna Silvestre (Osinfor), antes adscrito a la Presidencia del Consejo de Ministros. Sin embargo, la reacción más contundente vino de los Estados Unidos y de parte de un grupo de congresistas demócratas, que calificó la medida como “descarada y de mala fe”.
El Gobierno estadounidense ha iniciado —a través de la la Oficina del Representante Comercial de Estados Unidos— un proceso de consulta para evaluar si se están vulnerando algunos de los compromisos ambientales acordados entre ambos países en el Tratado de libre Comercio (TLC), el cual entró en vigencia en el 2009.
El Estado peruano no ha dado su brazo a torcer y se mantiene firme en su decisión. Incluso, a través de una nota de prensa, el Ministerio del Ambiente anunció el 31 de diciembre que este mes comenzará el proceso de selección del funcionario que liderará el Osinfor.
Mongabay Latam conversó en exclusiva con el congresista demócrata Earl Blumenauer y dijo que el Gobierno peruano aún no muestra evidencia que pruebe que la indignación de Estados Unidos es injustificada.
Lee más | Desafíos 2019 en Perú: más de 23 mil delitos ambientales por resolver
El decreto que desató el problema
El miércoles 12 de diciembre y tras permanecer diez años bajo el paraguas de la Presidencia del Consejo de Ministros (PCM), el Osinfor fue trasladado al Ministerio del Ambiente (Minam). La decisión se oficializó con la publicación del Decreto Supremo 122-2018-PCM.
Lo que vino tras la publicación del decreto fue la renuncia del jefe del Osinfor, Máximo Salazar, funcionario que señaló que con la decisión tomada se le restaba independencia al organismo de fiscalización ambiental.
¿Por qué fue enérgica la reacción de los Estados Unidos frente a una política interna? Para un grupo de congresistas demócratas, el decreto supremo vulnera los compromisos ambientales asumidos en el Acuerdo de Promoción Comercial Perú-Estados Unidos, más conocido como el Tratado de Libre Comercio (TLC), que entró en vigencia en el 2009.
Esto fue lo que impulsó a seis congresistas demócratas de la Casa de Representantes a enviarle una carta a Robert Lighthizer, jefe de la Oficina del Representante Comercial de EE.UU. (USTR por sus siglas en inglés), en la que resaltan que una parte central del TLC fue precisamente el Anexo forestal, en el que se incluye la creación del Osinfor como una entidad “independiente y separada”. En la misiva, enviada el miércoles 19 de diciembre, destacan también que “el TLC entre Perú y Estados Unidos fortaleció la labor y los estándares ambientales y fue el primero en su tipo”.
La respuesta oficial de Lighthizer a la carta fue enviada el 21 de diciembre, pero recién se hizo pública los primeros días de este mes. En ella califica la decisión tomada por el Perú como “inaceptable” y agrega que han comunicado “con fuerza” su posición al Perú. El punto más importante de esta comunicación es que Lighthizer adelanta que abrirá un proceso de consulta, el primer paso estipulado en el TLC frente a una potencial violación del acuerdo.
La advertencia se cumplió. El viernes 4 de enero, la USTR, a través de un comunicado, anunció el inicio de este proceso, el primero tras la entrada en vigencia del TLC con Perú. En el documento se precisa que el “Osinfor debe ser independiente (…) Pero el decreto supremo 122-2018-PCM parece estar en conflicto con este mandato”.
“Al tomar este paso sin precedentes, la administración de Trump está dejando claro que toma seriamente el cumplimiento de sus acuerdos comerciales, incluyendo sus obligaciones de gobernanza en el sector forestal. Desde su creación en el 2008, Osinfor ha jugado un rol en el Perú detectando y combatiendo el tráfico ilegal de madera y estamos gravemente preocupados que su independencia esté amenazada”, asevera la oficina estadounidense.
El parlamentario demócrata Earl Blumenauer le dijo en exclusiva a Mongabay Latam que colocar al Osinfor dentro de un ministerio es “por definición no independiente” y agregó que “el gobierno peruano no ha mostrado ninguna evidencia de que la indignación de Estados Unidos sea injustificada”.
Blumenauer señaló también que está de acuerdo con el proceso de consulta iniciado por la USTR, porque marca un hito importante en la trayectoria que varios políticos de su partido han tenido para hacer cumplir los compromisos ambientales.
“Agregamos el Anexo de Madera al acuerdo de Perú para forzar al gobierno peruano a enfrentar la tala ilegal y rampante que estaba destruyendo los increíbles recursos naturales de las cabeceras de la Amazonía. Desde ese logro, hemos luchado para obligar a las administraciones de EE. UU. y del Perú a que tomen en serio estos compromisos, incluso cuando vimos que la madera peruana explotada ilegalmente y en peligro de extinción entraba en nuestras fronteras”, concluyó el congresista.
Otro parlamentario estadounidense que se pronunció fue Richard Neal, quien precisó que es fundamental que sus socios comerciales entiendan que “el cumplimiento de sus acuerdos es una prioridad para los Estados Unidos”.
Lee más | No estamos haciendo lo suficiente | EDITORIAL
La respuesta de Perú
El Ministerio de Comercio Exterior y Turismo (Mincetur) comunicó, el último sábado, que el Perú es “respetuoso de sus compromisos comerciales con Estados Unidos” y que el 31 de diciembre enviaron su respuesta al USTR donde garantizaban la independencia de Osinfor.
Dentro de los argumentos para justificar este pase está la necesidad de tener eficiencia en el aparato estatal y la de fortalecer una entidad como el Ministerio de Ambiente, el ente rector de la coordinación, planificación y ejecución de la Política Nacional del Ambiente. “Esta mejora debe darse bajo un enfoque ecosistémico, en particular vinculado a la lucha contra la tala ilegal en el Perú”, se lee en la carta enviada por el ministro Edgar Vásquez al representante Lighthizer. Vásquez añade que Osinfor seguirá contando con un presupuesto propio y que pronto se lanzará un proceso de selección para designar el jefe del organismo.
El primer ministro César Villanueva también se pronunció sobre el tema el 7 de enero y aseguró que Osinfor no perdería autonomía, sino que esta “se reforzaría” al entrar al Minam. La titular de esta cartera, Fabiola Muñoz, no ha declarado recientemente pero hasta fines de diciembre se mostraba confiada con la decisión tomada. “En el acuerdo de promoción comercial se establece que el Osinfor debe tener independencia, ese es básicamente el tema, no dice dónde tiene que estar adscrito”, dijo en una entrevista con el portal Ojo Público.
Además, Alberto Hart, jefe del Departamento de Economía y Medio Ambiente de la Embajada de Perú en Estados Unidos, señaló que la decisión de mover al Osinfor no violaba ningún acuerdo y que era una decisión soberana del Perú. Esta información fue otorgada al Centro para el Derecho Internacional Ambiental (CIEL) como respuesta frente al tema. Mongabay Latam buscó a Hart para más declaraciones pero se excusó por no estar autorizado para ampliar más información.
Lee más | Mongabay Latam: los 10 reportajes ambientales más leídos de Perú
Un problema con historia
En la carta escrita a mediados de diciembre por los congresistas demócratas —entre ellos Richard E. Neal, Bill Pascrell, Jr. y Sander M. Levin— señalan que “lamentablemente” esta es solo una de las acciones más recientes tomadas por el Gobierno peruano “para minar los compromisos ambientales del TLC”. Entre los antecedentes que detallan está el despido del expresidente ejecutivo —encargado— de Osinfor, Rolando Navarro en enero del 2016, “debido a la presión pública de la industria nacional tras la incautación de madera peruana en Estados Unidos”, precisan en la comunicación.
Los congresistas se refieren a la Operación Amazonas que se realizó en el 2014 y el 2015, y que terminó con el descubrimiento de un cargamento sospechoso de madera que tenía como destino México y Estados Unidos. “Solo el 20 % de la madera, la que llegó a Estados Unidos, ocupaba tres canchas de fútbol. El 80 % restante se quedó en México, pese a que constatamos que era ilegal”, dijo Navarro a Mongabay Latam.
El exfuncionario confirmó que el Estado peruano ya había intentado pasar al Osinfor al Ministerio del Ambiente y que gracias a conversaciones de este organismo con el Ejecutivo se frenó el pase.
También explicó que en setiembre de 2018 se publicó el decreto legislativo N°1451 que permite que el cargo de Presidente Ejecutivo, que era elegido por concurso público y para un periodo de cuatro años, sea ahora el de Jefe, sin límite de tiempo predeterminado. Además, aunque se mantiene el requisito de que sea un profesional con no menos de diez años de ejercicio, se eliminó que la experiencia sea en el sector forestal.
La elección de un presidente para Osinfor es un problema que se arrastra desde el 2011. Desde ese año, todos los presidentes y ahora jefes solo obtuvieron el puesto de “encargados”. Ahora, según el mencionado decreto legislativo, el mecanismo de elección para el cargo de Jefe “será aprobado mediante decreto supremo” y el Minam ya anunció que este mes empezará este proceso de contratación.
En setiembre pasado, organizaciones internacionales como la Agencia de Investigación Ambiental (EIA), el Centro para el Derecho Internacional Ambiental (CIEL), Proética y Global Witness señalaron que estas modificaciones eran “un intento por debilitar la independencia e institucionalidad del Osinfor”. Esta respuesta también se originó por la negativa del Ejecutivo a aceptar el pedido repetido de Osinfor para mejorar sus facultades, entre ellas, que se puedan realizar visitas coordinadas o inopinadas a los centros de acopio, depósitos y plantas de transformación para obtener las guías de transporte forestal y la lista de trozas, donde se consigna el lugar de origen de cada madera. Es decir, identificar que la madera que busca ser transportada tenga una procedencia legal.
El Ejecutivo denegó esta solicitud de Osinfor porque el Servicio Forestal y de Fauna Silvestre (Serfor) señaló que la propuesta era inviable. El fortalecimiento de Osinfor debe darse “en la etapa de aprovechamiento (extracción) que comprende la aprobación de planes de manejo y la implementación de los mismos, pues en la medida que el Estado sea eficiente en la verificación del plan de manejo previo a su aprobación, se evitará la aprobación de planes con información falsa”, señalaba el documento que envió al Ejecutivo para oponerse a esta ampliación de funciones.
El problema es que no todos los planes de manejo llegan a tiempo a Osinfor para que pueda haber una pronta detección de irregularidades.
Lee más | Perú: deforestación se dispara y avanza sobre los bosques del Bahuaja Sonene
Reacciones y suspenso
Entre los expertos, las opiniones están divididas. El director del Programa de Bosques y Servicios Ecosistémicos de la Sociedad Peruana de Derecho Ambiental (SPDA), José Luis Capella, dijo a Mongabay Latam que si bien las formas no han sido las mejores, porque no fue una decisión participativa, es legal. “El Minam pudo haber informado las razones de este traslado, pero puede hacerlo. Creemos que puede seguir operando con total independencia desde el Minam, algo que no hubiera sucedido si era trasladado al Ministerio de Agricultura. Ahora lo que se necesita es elegir a un jefe en el Osinfor”, agregó.
La directora de la Agencia de Investigación Ambiental (EIA) en el Perú, Julia Urrunaga, cree que el gran problema de que Osinfor no tenga garantía de independencia es que representaría un retroceso en la lucha contra la tala ilegal. “Sin un Osinfor independiente y autónomo, resulta imposible realizar una trazabilidad creíble sobre el origen legal de la madera que el Perú produce, consume y exporta, lo que es un requisito cada vez más fuerte para ingresar a mercados internacionales”, señaló Urrunaga. “Consideramos como una buena señal que el gobierno de EE.UU. esté tomando este tema con la seriedad necesaria y exigiendo al Perú que cumpla con sus propias leyes y con los compromisos asumidos en el acuerdo conjunto de comercio”, dijo a Mongabay Latam.
Desde el Congreso peruano también ha habido reacciones. El último lunes, el congresista Jorge Meléndez presentó un proyecto de Ley que propone que Osinfor regrese a la Presidencia del Consejo de Ministros y que tenga sede en Iquitos. “Esta iniciativa potenciará la producción sostenible de los recursos naturales y generará más empleo y mejor calidad de vida en nuestra Amazonía”, señaló el parlamentario.
Mientras se define el futuro de esta propuesta de Ley, el camino abierto por Estados Unidos seguirá su curso. El siguiente paso, luego del requerimiento de consulta ambiental, es la resolución del conflicto a través de un camino “mutuamente satisfactorio”, según lo estipula el mismo Anexo Forestal del TLC Perú-Estados Unidos. De no encontrarse una solución que ambos países acepten, se debe convocar a un consejo de expertos que medie entre ellos. Si la disputa continúa, esto puede finalizar con sanciones que deben decidirse en el camino, según lo regula también el TLC .
Por ahora, ninguno de los gobiernos parece ceder en sus posiciones. Mientras que el Perú alega soberanía, el interés del USTR de continuar en contra del traslado de Osinfor, según el diario New York Times, es para mandarle una señal a los congresistas demócratas de que la administración de Trump, pese a todo, está dispuesta a “hacer cumplir las disposiciones ambientales y labores que se incluyen en los acuerdos comerciales”.
Imagen principal: La madera ilegal sale de la Amazonía con documentación falsa. Foto: Agencia de Investigación Ambiental (EIA)
Si quieres conocer más sobre la situación ambiental en el Perú, puedes revisar nuestra colección de artículos. Y si quieres estar al tanto de las mejores historias de Mongabay Latam, puedes suscribirte al boletín aquí o seguirnos en Facebook, Twitter, Instagram y YouTube.