- Más de 5000 hectáreas arrasadas en la segunda reserva biológica más importante de Nicaragua.
- Gobierno de Nicaragua declaró alerta amarilla cuatro días después de iniciado el incendio, cuando el fuego ya había consumido 3000 hectáreas.
(Este artículo es una colaboración periodística entre Mongabay Latam y Onda Local de Nicaragua)
Más de 5000 hectáreas han sido arrasadas por el fuego en la Reserva Indio Maíz, la segunda más importante de Nicaragua, desde el 03 de abril de 2018. El incendio se originó en la comunidad Siempre Viva, al norte de Greytown, a seis kilómetros del municipio de San Juan de Nicaragua.
El Gobierno Territorial Rama y Kriol (GTR-K), que representa a nueve comunidades indígenas consideradas dueñas ancestrales de la reserva, informó que recibió de parte de las autoridades comunales de Greytown e Indian River una alerta de incendio, el 03 de abril. Desde ese momento, le exigieron al gobierno central declarar en emergencia ambiental el área protegida; y pidieron que el Sistema Nacional para la Prevención, Mitigación y Atención de Desastres (SINAPRED), el Ejército de Nicaragua, el Instituto Nacional Forestal (INAFOR) y el Ministerio del Ambiente y los Recursos Naturales (MARENA) movilizaran los medios necesarios para sofocar las llamas.
La respuesta llegó el 07 de abril, cuatro días después de iniciado el incendio, cuando el fuego había consumido ya 3000 hectáreas. El gobierno central decretó alerta amarilla en los municipios de Río San Juan, Nueva Segovia, Madriz, Estelí, Chontales, León, Chinandega, Managua y la Región Autónoma de la Costa Caribe Norte.
“Es innegable que este incendio fue provocado por personas que realizan actividades agrícolas ilegales en la Reserva Biológica Indio Maíz”, dice el comunicado del Gobierno Territorial Rama y Kriol. Para Amaru Ruíz, presidente de la Fundación del Río, organización ambientalista que promueve la conservación y el desarrollo del sureste de Nicaragua, a nivel local se maneja que “el incendio fue provocado debido a la quema agrícola de un productor que estaba en la comunidad Siempre Viva”.
El gobierno central explicó que los incendios forestales se dan por “la existencia de abundante material orgánico seco en zonas vulnerables y de difícil acceso, las condiciones climáticas presentes, así como las prácticas utilizadas en la preparación de la tierra para la siembra”.
Para el Grupo Cocibolca, integrado por diversas organizaciones ambientales, entre ellas la Red Local y el Centro de Asistencia Legal a Pueblos Indígenas (CALPI), incendios forestales como el que azota a Indio Maíz, indican la ausencia de implementación de planes de prevención y precaución en la gestión ambiental.
Para este grupo es “altamente improbable que dichos incendios hayan sido provocados de forma natural o espontánea. El incremento de las invasiones a las áreas protegidas y la impunidad con la que operan sus depredadores, indican la existencia de una mano criminal que ha penetrado en la Reserva”.
Amaru Ruíz recordó que el año pasado también se produjo un incendio en Indio Maíz, pero logró ser sofocado por las lluvias. El actual es de mayor intensidad, ha ocurrido en verano y se ha extendido por el viento y porque el ecosistema quemado esta conformado por yolillales o palmas resinosas que al ser quemadas se propagan rápidamente.
Indio Maíz es un área protegida y desde hace más de cinco años la Fundación del Río ha denunciado la deforestación y actividades agrícolas y ganaderas ilegales, muchas de las cuales sirven de combustión en estas situaciones.
Mongabay Latam y Onda Local advirtieron de este problema en julio de 2017, cuando denunciaron la presencia de la finca ilegal “La Haciendita” en la zona núcleo de la Reserva Biológica Indio Maíz. Para ese momento se contabilizó la pérdida de 244 hectáreas bosque para dedicarlas al engorde de ganado.
Siga leyendo: Ganadería y narcodeforestación: la lenta desaparición de los bosques en Centroamérica
¿Reacción tardía?
Pese a la alerta de gobiernos comunales y organizaciones ambientales, el Gobierno central esperó cuatro días para decretar alerta amarilla “luego de tanta insistencia de nuestras organizaciones y las comunidades locales, a partir de entonces, se empezó a movilizar al Ejército, apoyado por unas 120 personas voluntarias. Después llegó refuerzo de unos 500 soldados, vía aérea y acuática”, dijo el presidente de la Fundación del Río.
Rosario Murillo, vicepresidenta de Nicaragua, informó este nueve de abril en medios oficialistas, que el siniestro se atiende desde su inicio. Informó que más de 800 efectivos de la Unidad Humanitaria de Rescate, del Batallón Ecológico, del destacamento militar Sur, de la Brigada de Infantería mecanizada de la Fuerza Aérea y de la Fuerza Naval, han sido desplegados a la zona, además de diez lanchas rápidas y cinco medios aéreos.
“Hasta el momento han sido consumidas 5089 manzanas, unas 3585 hectáreas de bosque”, según la vicepresidenta Murillo. Pero una superposición del mapa de áreas protegidas contradice el Informe Preliminar de Defensa Civil. El incendio es de aproximadamente 5116 hectáreas, conforme los puntos de calor que ellos mismos usan, del Satélite MODIS y VIIRS de la NASA, señala Amaru Ruíz.
Por su parte, el Coronel Álvaro Rivas, Jefe del Destacamento Militar Sur (D.M.S) en conferencia de prensa dijo que los militares realizan exploraciones aéreas para redireccionar a las tropas y hacer un ataque frontal en tierra para controlar el incendio, y de ser necesario, evacuar a personas afectadas por el humo. Destacó la ubicación de cortafuegos hacia el suroeste de la reserva para evitar que las llamas avancen, otro en el sector noroeste que permita controlarlo, y un tercero en caño negro para liquidarlo.
Un helicóptero especializado en apagar fuegos de la Fuerza Aérea Mexicana fue enviado este lunes 09 a la zona del incendio, para sumarse a las tareas de control, informó la vicepresidenta Murillo, quien precisó que el mismo está equipado para combatir este tipo de desastres.
Se conoció que el Gobierno de Nicaragua rechazó la ayuda del Benemérito Cuerpo de Bomberos de Costa Rica. Héctor Chávez, director de dicha entidad, confirmó que tenían el equipo preparado, pero el gobierno central informó «que el Ejército nicaragüense incorporó más efectivos a las labores de control del fuego, por lo que ya no era necesaria la ayuda costarricense», según un comunicado del Cuerpo de Bomberos de Costa Rica.
La vicepresidenta afirmó que “en donde se desata el incendio es imposible llegar con camiones, camionetas. Realmente lo necesario, lo urgente, son los aviones equipados con toda la técnica”.
Diversas organizaciones y autoridades comunales le han solicitado al gobierno central la elaboración de un diagnóstico riguroso para evaluar los daños, además le han pedido que investigue y aplique sanciones establecidas en la legislación ambiental y el Código Penal del país.