- Especies amenazadas como el oso de anteojos, el puma y la rana gigante del Lago Titicaca están entre los especímenes recuperados.
- El decomiso se realizó el 13 de julio con la participación de alrededor de cien efectivos policiales.
Como si se tratara de un ritual macabro, en la galería comercial Hierba Santa, en el distrito de La Victoria, en Lima, se exhibían sapos y ranas vivas, así como partes de animales silvestres. Cabezas de un oso de anteojos, de pumas, de caimanes, de culebras y tigrillos, que estaban ocultos, iban apareciendo durante el operativo que realizó la Dirección de la Policía del Medio Ambiente en este lugar. Mientras más fueron hurgando, más piezas de animales fueron encontrando los efectivos policiales: ranas disecadas, pieles, patas de diferentes animales y hasta artesanía elaborada con elementos de fauna silvestre extraída de principalmente de la Amazonía peruana.
La Policía de Medio Ambiente organizó un gran operativo para acabar con este mercado ilegal, ubicado en pleno centro de la capital de Perú. Durante la intervención se incautaron alrededor de mil animales vivos y partes de estos
La noticia de la venta de fauna silvestre, proveniente del tráfico ilegal, en los puestos de esta galería limeña llegó hace dos semanas a los oídos de las autoridades del departamento de Fauna Silvestre de la División contra la Tala Ilegal y Protección de los Recursos Naturales de la Policía Nacional del Perú.
El Mayor Héctor Méndez Vicuña, del departamento de Fauna Silvestre de la Policía Nacional, cuenta que luego de confirmar la información, con una visita previa al lugar, decidieron preparar un operativo que finalmente se ejecutó el último viernes 13 de julio. Participaron alrededor de 70 suboficiales de la unidad de control antidisturbios de la Policía y se sumaron aproximadamente 30 más de la división de Medio Ambiente. También contaron con la ayuda de personal de inteligencia, que fueron los que se infiltraron en la galería para planificar la operación. Estuvieron presentes el día del operativo personal de la Fiscalía Especializada en Materia Ambiental del MInisterio Público y funcionarios del Servicio Nacional Forestal y de Fauna Silvestre (Serfor).
“Se intervino cinco puestos. Dos se dedicaban a la venta de ranas, otros dos eran para animales disecados. Ahí encontramos las garras de caimán, la cabeza del oso de anteojos, el cuerpo entero de una venado, ranas y sapos disecados. En el quinto había artículos para chamanería. Incluso se ofrecían trabajos de los llamados ‘amarres’ o brujería”, cuenta el mayor Méndez.
El oficial Méndez comenta que en el operativo se detuvo a los cinco administradores de los locales, quienes fueron entregados a la Fiscalía del Medio Ambiente para que realice la denuncia correspondiente. “Los detenidos han sido denunciados por tráfico ilegal de especies de flora y fauna silvestre protegida”.
Los animales incautados fueron entregados al Serfor para que decida el destino de los mismos, indicó Méndez.
El mayor del departamento de Fauna Silvestre de la Policía Nacional agregó que hace unas semanas se realizaron operativos en Pucallpa, Ucayali y que ahora se prepara otro en el norte del Perú.
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Comercio de especies en peligro
El oso de anteojos (Tremarctos ornatus) u oso andino es una especie catalogada como Vulnerable en la Lista Roja de Especies Amenazadas de la Unión Internacional para la Conservación de la Naturaleza (UICN). Es la única especie de oso que habita en América del Sur y que lamentablemente, como ha demostrado este operativo, es cazado muchas veces para extraerle la cabeza y las patas, y utilizarlas en rituales chamánicos.
El puma (Puma concolor) también figura en la lista de la UICN, aunque figura en la categoría de Preocupación Menor. Sin embargo, la rana gigante del lago Titicaca (Telmatobius culeus), que se utilizan en preparados medicinales, si está catalogada como especie En Peligro Crítico de extinción, la categoría más alta para definir el riesgo de desaparición según la UICN.
Otras especies halladas durante el operativo fueron los zorros (Lycalopex sechurae), culebras (Colubridae), caimanes (Caiman crocodiles), boas mantona (Boa constrictor), anacondas (Eunectes), tigrillos (Leopardus pardalis) y tortugas motelo (Chelonoidis denticulata), esta última figura entre las especies más buscadas por los traficantes
Para Yovana Murillo, coordinadora de tráfico y salud de la vida silvestre de la Wildlife Conservation Society (WCS), esta incautación demuestra la gran demanda que existe en Lima por la fauna silvestre.
“Creo que existe una demanda subestimada. Lo que ha demostrado este decomiso es que la gente no solo compra para tener mascotas, ni como ornamento, tampoco se puede decir que son costumbres ancestrales, sino más bien chamanismo”, señala Murillo.
La especialista de WCS comenta que es la intervención más grande de este tipo que ha visto en los últimos años. “Este mercado lo teníamos registrado en el estudio que hicimos sobre los lugares de comercialización en Perú. Ya tiene historia de venta de partes de animales. Pero esos volúmenes nunca los habíamos registrado. Es sorprendente, me impactó la cabeza de oso, la de puma. Sabíamos que había comercio para extractos de ranas, pero principalmente en Junín y Puno”.