Las victorias de activistas alrededor del mundo encabezan nuestra lista de las historias más importantes del año sobre el medio ambiente. En esta foto: una joven es esposada y arrestada por desobediencia civil contra el Oleoducto Keystone XL en los Estados Unidos. Un total de 1.252 personas fueron arrestadas en una acción que duró dos semanas. Foto por: Josh Lopez/Tar Sands Action..
La gente se impone, el cambio climático se acelera e Indonesia se afana por detener la deforestación. A continuación, una revisión de algunas de las historias más importantes de 2011 sobre el medio ambiente.
El poder popular: el activismo cumple (Hance)
Muchas de las historias más dramáticas de 2011 sobre problemáticas medioambientales vinieron de gente que se volcó a las calles. Dada la lentitud con que gobiernos y corporaciones lidian con enormes problemas medioambientales, la gente comienza a hacer valer sus derechos. Se vio victorias en los cuatro continentes: en Bolivia, una respuesta draconiana a protestantes avergüenza al gobierno, llevándole a dejar sus planes de construir un camino a través de TIPNIS, una reserva amazónica indígena; en Myanmar, una nación que no se conoce por inclinarse ante las demandas públicas, protestas multitudinarias empujaron al gobierno a cancelar un proyecto hidroeléctrico chino de grandes proporciones; en Borneo, una lucha de tres años por detener la construcción de una planta de carbón en la costa del Triángulo de Coral terminó en victoria para los activistas; en Bretaña, los planes de privatizar bosques generaron tal protesta pública que el gobierno no sólo retrocedió sino que también se disculpó; y en los EE.UU., marchas masivas y desobediencia civil presionaron al gobierno de Obama a retrasar su decisión sobre el controversial oleoducto Keystone XL, que llevaría arenas alquitranadas del Canadá a un mercado mundial. Sin embargo, estén a la espera de que algunas de estas batallas se reinicien: el Congreso estadounidense ya se está movilizando para obligar al gobierno de Obama a apresurar su decisión sobre el oleoducto. Pese a problemas abrumadores, 2011 fue un año en que la gente del mundo probó que aún tienen voz.
El tiempo se está agotando en relación al cambio climático (Hance)
Cuando nuestros hijos examinen esta década, probablemente busquen responder una sola pregunta: ¿Qué se hizo para evitar que siguieran elevándose las temperaturas en la Tierra? Muchos de los científicos y expertos del mundo señalan los siguientes diez años como término para detener o acelerar el cambio climático global. Un estudio reciente halló que para que los gobiernos en el mundo tengan oportunidad (66 por ciento de probabilidad) de cumplir su promesa de mantener por debajo de los 2 grados Celsius las temperaturas mundiales en alza, las emisiones tienen que llegar a un máximo hasta el final de la década para luego bajar aceleradamente. Mas, una oportunidad cuya probabilidad es de dos en tres no es garantía. Para que la oportunidad sea del 90 por ciento necesitaríamos cortar toda emisión antes de que termine la década. A su vez, la Agencia Internacional de Energía, a la cual no se conoce como alarmista, está de acuerdo, arguyendo que las emisiones deben comenzar a declinar en sólo cinco años. Sin embargo, pese a décadas de advertencias de creciente tono catastrófico—sin mencionar un aumento en el clima extremo y devastador, como las sequías e inundaciones—muchos científicos dicen que los gobiernos están actuando con demasiada lentitud y timidez. El año pasado las emisiones de gas de efecto invernadero por todo el mundo batieron un nuevo récord, saltando 6 por ciento en relación al año anterior. A la par, los gases de efecto invernadero están ocupando un espacio récord en la atmósfera; el carbón ahora ocupa 389 partes por millón. Aun así, la guerra del clima todavía no se ha perdido. ¿Qué es lo que se necesita? Un acelerado despliegue de energía renovable, drásticas mejoras en eficiencia, la pronta jubilación de las plantas a combustible fósil, a no ser que la captura de carbono pruebe ser viable en poco tiempo, y un alto mundial a la deforestación y a la destrucción de zonas de turbera. Las últimas investigaciones mostraron que sólo el sol y los vientos podrían surtir al 90 por ciento de las necesidades energéticas del mundo, mientras autos y aviones funcionen con combustibles alternativos. ¿Y en términos políticos? No estaría de más cortar los subsidios a los combustibles fósiles, implementar programas estrictos de emisiones negociables con fijación de límites máximos (cap-and-trade) y llegar a un acuerdo internacional ambicioso sobre el clima. No nos podemos olvidar que, dependiendo del resultado, nuestros hijos nos verán como la generación más grandiosa o como la más vil.
Dos pasos para adelante y uno para atrás, sobre los bosques en Indonesia (Butler)
Antes bosque tropical, ahora plantación de aceite de palma: esta plantación de monocultivo está cerca al Parque Nacional Gunung Leuser en Sumatra. Este año Indonesia implementó una moratoria de resultados encontrados sobre nuevas concesiones madereras y de plantaciones. Foto por: Rhett A. Butler. |
Indonesia finalmente aprobó su moratoria, tan anunciada, a nuevas concesiones madereras y de plantaciones en zonas de turbera y en áreas de bosques primarios, pero la moratoria fue mucho mas débil de lo esperado, reflejando la influencia de intereses del sector forestal, que no han cambiado un ápice, en el gobierno indonesio (los intereses de siempre también aumentaron su presión sobre los grupos verdes). La moratoria tiene grietas substanciales, incluyendo las exclusiones de la agricultura industrial y la minería. Empero, el solo hecho de que la moratoria fuera aprobada refleja el compromiso, aparentemente más firme, del presidente indonesio Susilo Bambang Yudhoyono de reducir la deforestación. El presidente SBY pregonó su iniciativa 7/26, que apunta a un crecimiento anual de la economía del 7 por ciento y a una reducción del 26 por ciento en las emisiones de gas de efecto invernadero hasta 2020, en relación a manejar asuntos como ya es costumbre. Reducir la deforestación y la degradación de las zonas de turbera es el plato fuerte de su empuje por el desarrollo limitado del carbono. Mientras tanto, un importante productor de aceite de palma rompió filas y dio un atrevido paso hacia adelante: Golden Agri Resources (GAR), que fuera blanco de una intensa campaña de Greenpeace, anunció una de las políticas forestales más progresivas del sector del aceite de palma, la de comprometerse a no desarrollar tierras con reservas de carbono de más de 35 toneladas por hectárea y a buscar el “consentimiento previo, libre e informado” de las comunidades involucradas. Los medioambientalistas tenían la esperanza de que otras empresas forestales siguieran los pasos de GAR. Más aún, el gobierno indonesio dijo que ‘reconocería, respetaría y protegería’ los derechos de quienes tradicionalmente usan los bosques, incluyendo a los pueblos indígenas, en una postura que la sociedad civil cree esencial para reducir la deforestación. Y finalmente, los grupos medioambientalistas aumentaron su presión sobre las empresas de pulpa y papel implicadas en la destrucción a gran escala de bosques tropicales y zonas de turbera en Sumatra.
Fusión en Fukushima (Hance)
El 11 de marzo, la tragedia golpeó al Japón en la forma de un terremoto de 9,0 y un tsunami, prácticamente sin precedentes (en la reciente historia humana). Más de 15.000 perecieron mientras ciudades enteras eran diezmadas por el mayor terremoto en la historia del Japón. Sin embargo, el desastre inmediato no era el único problema. El terremoto también acarreó una fusión en la planta de energía nuclear de Fukushima que se ha convertido en el desastre nuclear más grave desde Chernóbil. Hoy, unas 90.000 personas se encuentran desplazadas por la fusión y ciudades japonesas íntegras quedaron vacías. Los expertos predijeron que cientos podrían morir de cáncer asociado a la exposición a radiación. El desastre también impactó al mundo, llevando a muchas naciones a reconsiderar la energía nuclear, siendo Alemania el ejemplo más notable. Algunos advierten que el desastre podría agravar el cambio climático si la energía nuclear comienza a remplazarse por combustibles fósiles en lugar de renovables. Otros argumentan que optar por lo renovable en lugar de lo nuclear podría llevar a una revolución de energía verde. Desde el desastre, Japón prometió acelerar el despliegue de energía renovable conforme se esfuerza por reducir su dependencia de la energía nuclear.
La extinción golpea a los rinocerontes (Hance)
Acercamiento a un rinoceronte vietnamita capturado en una trampa de cámara antes de que el último individuo pereciera a manos de cazadores furtivos. Foto cortesía de WWF. |
Este año confirmó la extinción de dos rinocerontes: el rinoceronte vietnamita (Rhinoceros sondaicus annamiticus) y el rinoceronte negro occidental (Diceros bicornis longipes). Los últimos rinocerontes vietnamitas, subespecie del rinoceronte javanés, fueron liquidados por cazadores furtivos en 2009, mientras que los últimos rinocerontes negros occidentales, subespecie del rinoceronte negro, fueron exterminados en Camerún. Amén de estas trágicas pérdidas, Sudáfrica, actual epicentro de la caza furtiva de rinocerontes, alcanzó un nuevo récord este año en la cantidad de rinocerontes eliminados por cazadores furtivos: es probable que para fin de año unos 460 rinocerontes sigan la misma suerte, un incremento de casi 50 por ciento en el récord de matanza de rinocerontes establecido el año pasado. La lista roja de UICN clasifica a tres de las cinco especies de rinoceronte—el negro, el javanés, y el de Sumatra—en Peligro Crítico. Los rinocerontes están siendo decimados por criminales violentos y organizados para el mercado negro del comercio de medicinas, pese a que numerosos estudios mostraron que el cuerno del rinoceronte no tiene valor medicinal que no sea el de efecto placebo.
Las señales ambiguas del Brasil sobre la deforestación (Butler)
Brasil anunció que la pérdida de bosques durante el año de deforestación 2010-2011 cayó a su nivel más bajo desde que comenzó a mantenerse registros anuales en 1988, lo cual continúa una tendencia de tres años. Empero, el entusiasmo por la noticia fue atemperado por otros procesos que podrían aumentar los riesgos para la Amazonía. En diciembre, el senado votó por la revisión de un Código Forestal del país que lleva ya mucho tiempo, un acto que los medioambientalistas creen podría precipitar la deforestación. El actual Código Forestal, disfuncional en gran medida debido a la falta de aplicación consistente, requiere que los terratenientes mantengan el 80 por ciento de sus propiedades cubiertas de bosque. El nuevo código, que está sujeto a un voto final en febrero o marzo antes de pasar por la aprobación de la presidenta Dilma Rousseff, mantendría la cifra del 80 por ciento en el encabezado para la Amazonía pero otorgaría amnistía hasta julio de 2008 para la deforestación ilegal de propiedades de hasta 400 hectáreas (1000 acres) (algunos verdes temen que en el futuro se cambie la fecha tope). El nuevo Código Forestal también suspendería las multas — que financian la aplicación de la ley — y relajaría las restricciones a desmontes de bosque a lo largo de ríos y en cumbres de montaña. Otro evento importante en 2011 fue la decisión de seguir adelante con la represa de Belo Monte, un proyecto que podría bloquear la mayor parte del inmenso río Xingú, inundando más de 40.000 hectáreas de bosque tropical y desplazando a miles de indígenas. Lo más perturbador de Belo Monte es el precedente que sienta para futuros proyectos de infraestructura a gran escala en la Amazonía. Para citar un caso, en noviembre un juez federal decidió que las comunidades afectadas no tienen derecho a su consentimiento previo, libre e informado sobre el proyecto. Por su parte, las empresas brasileras siguen invirtiendo en proyectos que llevarían la deforestación a gran escala a otros países amazónicos y que incluyen represas, exploración por energía, desarrollos agrícolas industriales y nuevos caminos, lo cual sugiere que aunque la deforestación ha estado fluctuando en los últimos años se podría filtrar a los países del rededor. La noticia sobre la inversión en infraestructura y su desarrollo llegó al mismo tiempo que la de una serie de asesinatos de alto perfil de activistas contra la tala ilícita en la Amazonía y cometidos por ganaderos y leñadores. Finalmente, algunos actores del sector privado han estado dando señas de seguir acuciados por el estigma de la deforestación en su cadena de suministro. JBS-Friboi, el procesador de carne más grande del mundo, anunció que dejará de comprar carne de res de estancias ganaderas asociadas a la esclavitud laboral y a la deforestación ilícita en la Amazonía brasilera, a la par que varios bancos fueron demandados por no acatar las garantías de préstamos que fueron diseñados para evitar que se use las finanzas públicas para subsidiar la deforestación.
Sequía y hambruna en África del Este (Hance)
Una inmisericorde sequía en África del Este, probablemente exacerbada por el cambio climático, amenazó a más de 13 millones de personas este año. La crisis probó ser peor en Somalia, fustigada por el gobierno fallido de la nación y el grupo militante al-Shabab. En el máximo punto, las NN.UU. declararon sequía en cinco áreas de Somalia; la hambruna empujó a cientos de miles de refugiados a la cercana Kenia y llevó a la muerte de, según estimaciones, 30.000 niños de menos de 5 años de edad. Fue la primera hambruna declarada por las NN.UU. desde la de Etiopía en 1984. Las lluvias no llegaron en 2010 a la región y fueron erráticas en 2011, preparando el terreno para la crisis. Las sequías se dan regularmente en el Este de África y desde hace mucho que las comunidades se han ido adaptando a la sequedad de las condiciones pero algunos expertos dicen que las recientes sequías han empeorando debido al cambio climático. Desafortunadamente, los modelos climáticos para las lluvias en la región cuentan dos historias diferentes: algunos modelos predijeron más lluvias en la región mientras que otros predijeron menos. No obstante, aun si el Este de África fuera a ver más en lugar de menos lluvias, es probable que vengan en mayores ramalazos—esto es, inundaciones—en vez de la lluvia confiable que necesitan las comunidades. Si bien la lluvia empezó a caer en el Cuerno de África, la escasez de alimentos continúa en otras partes de este vulnerable continente: NN.UU. advirtió hace poco que es posible que se dé una crisis alimentaria en el Sur de Sudán y en Níger a principios de 2012.
Los tiburones ven progresos por todo el mundo (Hance)
El tiburón oceánico punta blanca (Carcharhinus longimanus) es considerado Vulnerable en la Lista Roja de UICN. La especie se ha reducido en más de 90 por ciento en el Golfo de México. Foto por: Peter Koelbl. |
En términos de la conservación de vida silvestre, 2011 fue el año del tiburón. Diezmadas por la sobrepesca, la captura accesoria y el cercenamiento de sus aletas, algunas poblaciones de tiburones se redujeron en un 90 por ciento y, de acuerdo a la Lista Roja de UICN, casi uno de cada tres tiburones y rayas están actualmente en riesgo de extinción. Sin embargo, este año marca una vuelta de marea para los tiburones. A fines de 2010 comenzaron las buenas noticias: cuando el senado estadounidense aprobó una legislación para prohibir la pesca de tiburón en todas sus aguas. El cercenamiento de sus aletas, que se hace exclusivamente para la sopa de aleta de tiburón, lleva a la muerte a 73 millones de tiburones al año, según una estimación. Entretanto, los santuarios de tiburones (en donde no se permite pescarlos) han estado surgiendo por todas partes: Palau creó el primero en 2009 y las Islas Maldivas y Raja Ampat de Indonesia le siguieron en 2010. Después, en 2011, los santuarios de tiburones siguieron apareciendo uno tras otro: Honduras fue la primera nación en las Américas en crear un santuario de tiburón, seguido de cerca por Chile y las Bahamas; luego Tokelau en el Pacífico declaró santuario a sus aguas; por último, las Islas Marshall crearon el santuario más grande del mundo, que se extiende por un área más grande que México. No solamente hubo progreso en los santuarios. En 2010, Hawái prohibió la sopa de aleta de tiburón y a fines de 2011 California hizo lo mismo. ¿Qué es lo que sigue para los tiburones? Taiwán anunció que el próximo año prohibiría, por primera vez en Asia, el cercenamiento de las aletas del tiburón en sus aguas.
Clima extremo en todas partes (Hance)
Otro año quiere decir otro aporreo del clima extremo, ligado cada vez más al cambio climático. El año pasado vio la ola de calor en Rusia, la sequía en la Amazonía e inundaciones récord en Sudamérica y Paquistán, para nombrar unos cuantos. Este año, los Estados Unidos sufrieron una cantidad récord de eventos de clima extremo que costaron más de $1 billón cada uno: doce. Uno de los más notables fue la sequía en Tejas que rivaliza con cualquiera de las que ocurrió antes de 1789. Tailandia experimentó el peor desastre natural de su historia en la forma de una inundación monzónica sin precedentes. No obstante, un ciclón tropical que golpeó a las Filipinas trajo la mayor cantidad de muertes de cualquier tormenta ocurrida este año: más de 1.000 personas. Lluvias que no llegaron al Cuerno de África amenazaron a 13 millones de personas con escasez de alimentos y empujaron a la inestable Somalia a la hambruna, matando a decenas de miles de personas. La sequía también golpeó a China a la vez que partes de Centro y Sudamérica, y Asia se inundaban. Por otro lado, un informe del Grupo intergubernamental de expertos sobre el cambio climático (IPCC, por su nombre en inglés) encontró que era probable (66 por ciento) que el cambio climático ya estuviera contribuyendo a empeorar el clima extremo. Los científicos predicen que, conforme el mundo sigue calentándose, estos climas extremos no harán más que empeorar y hacerse más frecuentes.
Siete mil millones de personas (Hance)
Niña en Madagascar, en donde el 70 por ciento de los niños sufren de desnutrición. Con un crecimiento demográfico en auge, 45 por ciento de los malgaches tienen menos de 14 años de edad. Foto por: Rhett A. Butler. |
En algún momento del final de la década de los años 60, cuando la generación estadounidense del auge demográfico (baby boomers) estaba entrando en acción, unos asombrosos 3,5 mil millones de personas embellecían el planeta. Este récord fue la culminación de millones de años de expansión humana por casi todo ambiente en la Tierra. Casi 40 años después—cuando la mencionada generación está a punto de jubilarse—la población humana en el mundo se ha duplicado. Según NN.UU., este año marcó la primera vez que siete mil millones de corazones latieron al unísono sobre la Tierra. El impacto es inequívoco conforme las ciudades se inflan, los bosques caen y las luces parpadeantes de la humanidad son capturadas cada noche por los satélites. ¿Qué significa siete mil millones? Significa alimentar, vestir, alojar y educar al doble de gente de la que había antes de 1970. Significa lidiar con el cambio climático, la extinción en masa, la deforestación y la pobreza en un mundo en donde la población humana sigue creciendo. Significa cultivar más alimento en la misma tierra, estirar aún más el agua potable y mirar mientras la tierra virgen continúa decreciendo. Significa mayor presión sobre todos los ecosistemas de la Tierra, desde las profundidades oceánicas hasta el punto más remoto de la Amazonía y hasta los glaciares de Groenlandia. Siete mil millones requieren soluciones creativas, innovadoras, a veces disparatadas, a los problemas mundiales. Claro que también se podría abordar la sobrepoblación frontalmente: entre los métodos probados están el empoderamiento de las mujeres, mejor educación, acceso universal a contraceptivos y planificación familiar, reducción de la pobreza y mitigación de la mortalidad infantil—y todos estos métodos, que no son draconianos ni forzosos, traen beneficios añadidos a la comunidad y al mundo.
Menciones honorables
Durban fija “la hoja de ruta” (Hance)
Para los optimistas, los acuerdos a los que se llegó en la 17a Convención Marco de las NN.UU. sobre el Cambio Climático (CMNUCC) en Durban, Sudáfrica fueron sorprendentemente buenos: el Protocolo de Kioto sigue vivo; por primera vez, 100 por ciento de las emisiones del mundo se sujetarán a un acuerdo a realizarse en 2020; los asistentes generaron un proceso para tratar la actual brecha de emisiones; y la conferencia vio la aprobación final del Fondo Verde que llevará miles de millones de dólares en ayuda climática al mundo en desarrollo. Para los pesimistas, Durban fue otra en una larga sarta de acciones internacionales decepcionantes sobre el cambio climático: no se firmará un nuevo acuerdo hasta 2015 y no se la implementará hasta 2020; por otros 9 años no habrá cortes obligatorios para la mayoría de las naciones, solamente promesas; el Fondo Verde carece de una fuente de ingresos, lo que quiere decir que es una idea sin financiamiento; y el programa REDD que buscaba salvar bosques vio poco avance. En lo que respecta a la ciencia del cambio climático, los investigadores dicen que las emisiones deben llegar a un tope esta década para luego caer aceleradamente si es que el mundo espera tener algo de suerte en atenerse a sus promesas de mantener las crecientes temperaturas por debajo de los 2 grados Celsius. ¿La conclusión? Si las naciones se atienen a las promesas que hicieron y a la vez se ponen más ambiciosas en sus cortes de emisiones, si el dinero comienza a fluir al mundo en desarrollo y a las naciones que tienen bosques, y si el nuevo acuerdo de 2020 no sólo es inmensamente ambicioso sino que realmente tiene garra, ello podría ser.
La rebatiña ártica por perforar, perforar, perforar (Hance)
The Arctic as viewed by NASA’s MODIS Satellite in June 2010. Photo by: NASA. |
El cambio climático causado por la quema de combustibles fósiles está derritiendo hielos marinos en el Ártico y cambiando irrevocablemente el frágil medio ambiente. Así que puede ser un tanto irónico que la pérdida de hielo repentinamente haya impulsado a extraer más combustibles fósiles, justo del lugar que está aguantando el impacto más grave; mas, eso es exactamente lo que está pasando en las profundidades del Ártico. En los Estados Unidos, el gobierno de Obama otorgó extensa aprobación a una gran cantidad de sitios de perforación en las aguas del Ártico, pese a la condena generalizada de medioambientalistas y comunidades indígenas del norte. Muchos de ellos advierten que esto se limita a preparar el escenario para un desastre en las aguas profundas del Ártico. Rusia y Noruega se están dividiendo el Mar de Barents para explotación. Esta rebatiña por perforar no se ha quedado sin recibir protestas: este año Greenpeace lideró una atrevida campaña de desobediencia civil en la frígida Bahía de Baffin contra la empresa escocesa de energía Cairn durante la perforación exploratoria en lo profundo del mar. Greenpeace tuvo la capacidad de cerrar las operaciones de Cairn por un par de días y la cabeza de Greenpeace, Kumi Naidoo, fue arrestado tratando de abordar la plataforma de perforación de Cairn para entregar una carta de protesta. Aparte de más combustibles fósiles para quemar, los críticos de la perforación en el Ártico dicen que cualquier derrame sería prácticamente imposible de limpiar, dadas las duras condiciones y la absoluta falta de infraestructura; las empresas petroleras enfrentarían temperaturas glaciales, hielo en movimiento y tormentas feroces, aparte de que cualquier derrame probablemente tendría que abandonarse durante el invierno ártico, largo y oscuro. Aun cuando Greenpeace no pudo derrotar a Cairn con sus esfuerzos, el Ártico lo hizo: la empresa petrolera gastó más de $600 millones perforando pozos sólo para encontrar nada.
El camino de Serengueti sigue en pie (Hance)
Pese a la confusión y a señales ambivalentes, el gobierno tanzano sigue con planes de construir un camino, sumamente controversial, por el Parque Nacional de Serengueti. En junio el ministro tanzano de Recursos Naturales y Turismo hizo pública una declaración de que el camino “no seccionaría el Parque Nacional de Serengueti,” lo cual alivió y alegró a quienes, por todo el mundo, se oponían al camino. Mas para julio se hizo claro que el gobierno tanzano seguía planificando la construcción de un camino pero que la senda a través del parque sería de grava, no de asfalto. Sin embargo, los observadores siempre han argumentado que sólo es cuestión de tiempo para que cualquier camino sea mejorado y ensanchado para convertirlo en ruta comercial desde el mar hasta el interior. Los científicos creen que el camino eventualmente paralizaría la migración animal más grande del mundo—dos millones de ñus, cebras y gacelas de Thomson pasan por esta ruta en migración anual de Tanzania a Kenia—y devastaría el turismo regional. Tanzania declaró que se necesita el camino para ayudar a vincular comunidades pobres pero el gobierno alemán ofreció construir caminos comunitarios; los críticos sostienen que el verdadero propósito del camino es brindar un atajo para sacar minerales del interior de África. ONGs y gobiernos preocupados han estado presionando a Tanzania para que reconsidere una ruta por el sur que evitaría del todo el Parque Nacional de Serengueti, mientras otros sugirieron elevar el camino para que la migración pase por debajo.